Abigail McCarthy
─ Vamos, levántate o se nos hará tarde. ─ Sonrío cuando mi esposo presiona más sus brazos sobre mi cintura.
Juro que a veces no lo entiendo, unas veces me demuestra que me ama y otras veces siento que nunca dejará de amar a Lissie. Esa mujer que solo conozco en fotos, ha sido mi tortura durante años y ahora, con el parecido que tiene Katty con Lissie, según mi suegro y mi esposo, hasta la misma Ivanna, Aleina y Roger; se han sorprendido demasiado con este hecho, siento que el recuerdo de Lissie, me ha desplazado por completo con la aparición de Katty, la ex esposa de Noah, madre de Jaime y que ahora es muy amiga de la familia y se comunica muy a menudo.
La mujer se disculpó con Valerie, por no poder asistir a su boda y yo, para ser sincera debo agradecer su ausencia, aunque ella, esté casada, siento el peligro cuando está cerca de Jordan.
─ ¿En qué piensas tanto? ─ Murmura Jordan, buscando mis labios.
─ No, ─ le digo intentando levantarme o se nos hará más tarde.
─ Dame un beso o no saldremos de aquí, ─ protesta lanzando sus piernas sobre las mías, sonriendo.
─ Jordan, tú hermana se casa hoy, ─ sonreí luchando con sus piernas y sus brazos.
─ Si te está esperando a ti para casarse, entonces Lumbardi, se quedará plantado, ─ se carcajeó.
─ No saldrás de esta habitación hasta que me beses, ─ sentenció.
─ Te beso y me voy, ─ murmuré besando su cuello.
─ Allí no, ─ protestó aflojando los brazos y piernas.
─ ¿Aquí? ─ Pregunté atrevida.
─ ¡Oh, mierda! ─ Masculló cuando me atraganté con su miembro, succionándolo.
─ Allí, no era el beso, pero no me quejo, ─ murmuró llevando sus manos entre mi cabello, tomando mi cabeza para comenzar embestirme la boca.
Sabía que no me dejaría levantar hasta quedar satisfecho, estos eran los momentos que sentía que me amaba, él siempre ha sido muy fogoso y desde que vio el jardín del hotel Lumbardi, aquí en Alemania, tenía ganas de probarlo.
A Jordan, siempre le ha gustado hacer el amor al aire libre, la naturaleza le fascina, así que hay que darle un adelanto para tranquilizarlo. Movió mis caderas para también darme sexo oral, nos llevábamos tan bien en la intimidad, que creo que eso nos ha ayudado a superar nuestros conflictos, con las sombras de sus recuerdos.
─ ¡Oh, mierda! ─ murmuré cuando se detuvo, dejándome a punto de correrme.
─ ¡Jordannn! ─ me quejé, él soltó una risilla, inclinó mis piernas acomodándose detrás mío y penetrándome.
Levanté más las caderas y bajé mi torso completamente a la cama, las estocadas se profundizaron mucho más y a los pocos minutos, ambos estábamos llegando al paraíso.
Nos duchamos juntos, para luego salir corriendo de nuestra habitación, para la habitación de mis hijos, les pedí que se levantaran o se les haría tarde, de allí me fui para la habitación que tenían destinada para nosotras.
─ ¡Por fin, llegaste! ya iba enviar a alguien para que secuestrara a Jordan. ─ Murmuró Valerie, solté una risilla.
─ Hasta que no lo tranquilizara con su dosis no me dejaría en paz, estos hermosos jardines lo tienen a mil, ─ solté con otra risilla.
─ No pueden arruinar nada tía y tampoco hacerlo antes que tía Valerie, ─ murmura Ashley, acomodando los tocados sobre la cama.
─ Yo no soy la amante de la naturaleza, ─ murmura Valerie, con una sonrisa. Ashley, se sonroja y desvía la mirada de su tía, yo levanto una de mis cejas.
─ Bueno, aunque a veces los gustos cambian, ─ musita Valerie, con picardía.
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¿ERES MI TENTACION PROHIBIDA?
De TodoEn el texto se narra una historia de drama, amor y romance erótico; Ashley Freetman una chica joven, universitaria, sencilla y enamorada desde que tiene uso de razón de Noah Hanks, él fue su amor de adolescencia y ahora su juventud, cuando a ella...