Layne
Me llamo Layne, tengo 15 años y vivo en las calles. Fui abandonada al nacer, pase por al menos diez casas de acogida. Aún cuando me abandonaron recién nacida, nunca nadie me adoptó, así que me fueron moviendo de casa en casa. Quiénes me criaron no eran ni buenos ni malos, diré que eran como las circunstancias los hicieron. Tuve buenas casas donde me sentí bien; pero justo cuando comenzaba a generar lazos era trasladada a otra casa, para comenzar de cero.
Comencé a tener problemas al momento que cumplí doce años, mi cuerpo comenzó a cambiar, antes pasaba por un chico sin problema, de echo lo prefería así.
Ese año las cosas cambiaron para mal, mi senos se revelaron haciéndose notar ante el mundo, mi cuerpo plano, pasó a ser seductor lleno de curvas, mis labios se volvieron llenos y rojos, ya desde que nací mis ojos eran una mezcla de azul grisáceo, mi piel blanca perlada. Y aunque la mayoría del tiempo tenía mi cabello totalmente recogido con una gorra, cuando lo suelto a mi pesar, debo decir que es hermoso, me llega hasta más abajo de mi cintura, color chocolate, ondulado. En fin después de ese año ya no pude ocultar que era chica, y para mi desgracia hermosa.Así que mi mundo cambio, cada hombre con quien me topaba o vivía, quería ponerme las manos encima. Aprendí a esa edad que NO para un hombre, no tiene el mismo significado que para una chica. Así que si mis palabras no tenían sentido para un hombre; debi aprender a defenderme a golpes.
En un principio me costó defenderme, mis golpes no tenían entrenamiento, así que no generaban ningún daño y si mucha risa para mi oponente, uno de esos hombres a quienes me enfrente decidió enseñarme a ser más efectiva. Su nombre era Ángel, no se rían sé que suena bobo; pero así se llamaba. Le conocí en un basurero al lado de un bar, me había escapado de mi último sitio de acogida, creo que era la casa número siete, me tuve que escapar el encargado de la casa le gustaba abusar de sus niños, al principio no creí la historia; pero una noche yo había llegado de clases, estaba estudiando, de repente escuche llantos y gemidos. Sin pensarlo salí de mi habitación siguiendo los sonidos, venían de la habitación de las gemelas, ellas las habían dejado abandonadas a los siete años en una estación de Autobús, el sistema les consiguió padres adoptivos, lo malo; debían ser separadas. Ellas se negaron, al final no las adoptaron. Eran un año mayor que yo tenían quince, me perdí en mi historia. Ahhh si llegue a la puerta de su habitación Melisa estaba de rodillas haciéndole a Rubén una felacion, se notaba que estaba llorando, Melanni estaba desnuda acostada en la cama en posición fetal llorando, al parecer ya Rubén la había usado. No pude terminar de ver, Rubén volteo y me vio en la puerta, me lleno un sentimiento de temor, sin pensar salí corriendo y hui.
Cuando logre calmarme me di cuenta que no había comido en todo el día, así que me acerqué al basurero de un club nocturno esperando encontrar algo de comer.
- eeehhh chiquilla ¿que haces? - me grito un hombre.
Me asusté e intente huir sin éxito, me tomo por los brazos, impidiendome soltarme, él era muy fuerte, luego de la escena que acababa de presenciar pensé que me iba a violar. Comencé a golpearlo como podía, con todas mis fuerzas.
- sueltame - le gritaba, desesperada.
- pequeña calmate, no te voy hacer daño- logró atarme las manos con una sola de él, me miro a la cara- calmate, te prometo que no te voy hacer daño, si te calmas te suelto, sino tendré que llamar a la Policía.
Al nombrar la Policía me asusté, sabía que si venian me iban a devolver a Rubén, no podía permitir eso. Así que dejé de luchar, respire profundo, implorando mentalmente para que este hombre no me hiciera daño.
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Nacida para Pertenecer (Borrador)
WerewolfEl mundo gira, todo sigue aún cuando yo muero lentamente. Siempre estuve sola. Me abandonaron al nacer, crecí en las calles acostumbrada a ser violenta para sobrevivir. Lo he hecho bien durante estos 15 años, nadie me ha tocado a parte de alguna gol...