-Escojan una pareja, haremos un ejercicio de conversación..¿Leigh?-dijo la profesora
-_____-escogió Leigh
-¿Yo qué?
-_____ Siéntate frente a Leigh- indico la profesora
-¿Es enserio?- dije
-Nunca bromeo- contesto
-Como sea- dije de mala gana y me senté frente a Leigh, ella me miraba con envidia.
-Ahora, van a elegir un tema y hablar sobre él, mantendrán una conversación de dos minutos- explico la profesora
-¿Cualquier tema?-pregunte
-No puede ser de sexo, política ni religión
-¿Puede ser de una persona?- dijo Leigh
-Si, Leigh. Si puede ser de una persona- dijo la profesora
-Si dices Sebastian serás patética- dije
-¿Por qué? ¿Te da miedo lo que pueda decir?- dijo Leigh
-Maestra necesitaremos un pañuelo para Leigh, ya está comenzando a babearse- bromeé
-¿Por qué?-dijo desconcertada la profesora
-No es cierto, profesora- dijo Leigh
-Bueno, _____, Leigh...son las primeras. Pasen al frente y comiencen su diálogo
-No se me vayan a caer del asiento niñas, y si ven baba cayendo por la boca de Leigh cubran sus caras.- dije y todas rieron, incluso la profesora.
Esto iba a estar muy bueno, Leigh no me conocía, ella pensaba que iba a poder defenderse por haber sido la novia de Sebastian, tenía un plan, no iba a hablar de el, quería que ella se mirara desesperada, así que mientras ella trataba de acabarme hablando, yo le daría a su cochino ego, así ella se mirara la ardida mientras que a mí solo me resbalaría todo.
-Sebastian fue mi novio- comenzó Leigh
-¿Eso te repites al espejo cada mañana?- todas rieron.
-Lo he besado muchas veces- continuo diciendo
-No deberías babear, por ahí se te puede salir alguna gota de la de él- parecía comedia, todas reían cada vez que yo decía algo.
-Volverá conmigo cuando salga de aquí
-Ahhh, mientras les das usos inadecuados a las verduras-dije
-¡Profesora! Dijo que nada de sexo-le dijo
-Leigh pero que mente tienes, que va de verduras a sexo...ella fue la que acaba de decir al palabra- dije inocente
-En eso tiene razón, Leigh. Tú fuiste la que desviaste la conversación- dijo la profesora intentando no reir
-Ama que acaricien su pelo- continuo
-A eso se debe la colección de caspa que tienes bajo la cama-dije y más y más risas.
-¿Te gusta Sebastian?-pregunto al fin
-No más que yo a él- todas abrieron sus bocas.
-¿Cómo estás tan segura? ¿Pasó algo entre tú y él en Las Vegas?-Ya se había dado cuenta de lo que trataba de hacer, así que buscaba la manera de obligarme a parecer yo la desesperada. Pobrecita...con razón es rubia, su cabeza no sabe ni producir color en el cabello.
-Sólo sé que es mejor que las verduras...digo, para que te des una idea-dije y alcé una de mis cejas.
-Me rehusó a seguir hablando con ella- dijo y sonreí malévola.
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Niña Mal |Sebastian Villalobos y tu|
FanfictionLas fiestas,la ropa, los chicos, la fama,el dinero, la posición social y todos los demás placeres de los que puedo gozar a mis cortos 16 años he vivido muchas cosas, nada malas por cierto. Padres millonarios y viviendo la vida que me merezco. Me dan...