Niña Mal |Sebastian Villalobos y tu|

capitulo 45

-¿Osea que me botas y ya?

-No lo veas así.

-Lo veo de la forma que es; me estás botando.

-No te estoy botando.

-¿Y cómo se llama esto? Nadie nunca me había botado.

-Trata de entenderme, es por mi madre.

-¿Sabes qué? ¡Cásate con quien quieras! ¡Haz lo que quieras de tu vida pero a mí no te me vuelvas a acercar!- me levanté.

-No quiero que esto termine así.

-No hay otra forma- abrí la puerta, Sebastian se levantó y la cerró- Déjame largarme de aquí.

-_____ por favor- sollozo 

-O me dejas salir de aquí o grito que me estás violando.

-No sabes cuanto me duele separarme de ti.

-¿O es que ya extrañabas a Leigh y esto te calló como anillo al dedo?- salí de la habitación.

-Te amo.

-Pues yo no, no te amo. Nunca lo he hecho ni nunca lo haré, ni siquiera te he querido, tú para mí no has sido nadie; me haces un favor al alejarte de mí, así no tengo que ser yo la que rompa tu corazón de tonto enamorado- salí corriendo hacia mi habitación.

Entré y contuve mis lágrimas, mis malditas lágrimas, las primeras que derramaba por un chico, me sostuve en la puerta a punto de soltar en llanto cuando sonó la puerta

-_____  abre por favor.

-¡Lárgate! Ve a hacerle compañía a Leigh, ha de ser gratificante reemplazar a un pepino bien pequeño.

-Sólo quiero hablar.

-¿Qué está pasando?-pregunto Miranda

-Miranda, ábreme.

-Ni se te ocurra, Ibañez- la amenace

-¿Pero qué es todo ése ruido? ¿Qué hora es?-pregunto Juana

-Juana, por favor dile a tu amiga que me abra.

-Miranda, abre.

-A esa no, a _____

-Sebas, lárgate o abro pero para ir a quejarme con tu madre-dije

-Está bien, me voy pero...hablamos mañana.

-Nunca más en la vida-dije y ya no escuché nada, Sebastian se había ido.

-¿Qué fue lo que pasó?-pregunto Juana

-Sebastian...me botó para casarse con Leigh.

-¿¡Qué?!-grito Jesy

-¿No que muy dormida, Jesy?

-Perdón, esa noticia a cualquiera despierta.

-La directora está enferma...ya la desahuciaron. Su último deseo es que Sebastian se case con Leigh.

-¿Y qué le haremos? ¿Le raparemos la cabeza mientras duerme?

-¿Le quemaremos toda la ropa?

-No no, ya sé, ya sé. La encerraremos en una habitación con Pegaso- todas reímos

-Yo y mi bocota por contarles todo-dije

-Tengo una mejor idea ¡Todas las anteriores! Pero me imagino que tú tienes muchas más ideas creativas, dínos.

-No, no haremos nada ¿Sebastian se quiere casar con ella? Que lo haga.

-Juana, tómale la temperatura voy por ayuda.