capitulo 95

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-¿Se te ofrece algo?-pregunto Mario

-Tú siempre tan directo.

-Sí, vete-dije

 -Por favor, Leigh...estamos ocupados-dijo Sebastian

-Eso ya lo noté, y muy entretenidos.

-Mira maldita, lárgate-dije y me levanté.

-No puede ser- me miró de pies a cabeza- ¡Que gorda estás!

-Que p€#&@ más ignorante, ella no está gorda. Está embarazada-dijo Juana

-¿Y de cuál de los dos?- rió.

-¡Lárgate! Nadie te quiere-dije

-Aun para ti esa ofensa es muy tonta, no eres la misma, no me digas que ya te suavizaste.

-Lo que voy a suavizar es tu cráneo si no te largas.

-Déjala-dijo Sebastian y me abrazó.

-Lo lograste...eso crees ¿Piensas que ese niño que llevas ahí me detiene?- se acercó a mi oído- vine por Sebas y no me voy a ir sin él- me susurró.

-Maldita- le di una bofetada.

-¡Otra!-grito Juana

-¡Si! ¡Otra!-lo siguió Mario

-¿Qué les pasa a ustedes?- pregunto Sebastian y me apartó.

-Nos vemos- se fue.

-¡Voy a matarla!-grite 

-No, tú no matas a nadie-dijo Sebastian

-Si, déjala que la mate-dijo Mario 

-¿Qué edad tienen ustedes?

-Yo más que tú no me hagas recordártelo-dijo Mario

-¿Podemos irnos? Se me puso amargo el melón-dije

-Hay que huir-dijo Mario

-¡¡Si!!-dijo Juana

-¿De que hablan?-pregunto Sebastian

-¿Desaparecernos?-pregunte

-Dos días, uno para disfrutar y otro para planear. Le dejaremos una nota a tus padres que nos fuimos los dos solos ¿Qué dicen?-dijo Mario

-¿Mis padres están de viaje, nunca se dan cuenta. Me apunto-dijo Juana

-El mío cree que estoy de viaje con _____-dijo Mario

-Mi padre si ha de estar muy preocupado.

-Sebas...

-Esta bien, huyamos. Al carajo todo- reímos.

Salimos en el auto de Juana hacia un centro vacacional en Las Vegas, nos instalamos en las habitaciones, al fin dos. Sebas y yo estábamos en la nuestra.

-Es hora de las reglas.

 -¿Las qué? ¿A qué hora fue que regresé al internado?

-Ahorita. Número uno: cero alcohol.

-¿Cómo?

-No beberás alcohol mientras tengas a mis niños dentro.

 -¿Que tal si los guardo en otro lado mientras tomo? Luego los puedo volver a meter.

-No me parece chistoso.

-Como digas, prosigue...

Niña Mal |Sebastian Villalobos y tu|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora