capitulo 47

8.4K 381 14
                                    

-¡Maldita Leigh! Hija de p#&%$ ¡Ojalá se te quede atorado un elote y se te pudra ahí dentro!- decía entre lágrimas.

-¿____? ¿Estás bien?-dijo Juana y se acercó a mí.

-No, Juana no lo estoy- la abracé.

-¿Es por Sebas, cierto?

-¿Por qué lo dices?

-Lo acabo de encontrar tirado en la puerta llorando

-Ay no ¿Me habrá escuchado llorar?- me limpié las lágrimas.

-_____ No seas así, dile a Sebastian lo que sientes.

-Es que no puedo. Él de todas formas se va a casar con Leigh, ya me lo dijo. Además no le puedo jurar que lo amo porque no es así. Lo necesito y mucho; odio aceptarlo pero...no lo amo.

-¿Cómo estás tan segura?

-Porque lo sé, lo siento. Es que Sebastian me ama demasiado para amarlo yo a él. Si fue cualquier otra persona me repugnaría por completo como es él, sabes muy bien que me desesperan los chicos que me traen en un pedestal; el lo hace, bueno lo hacía y eso me impide quererlo porque es demasiado fácil.

-¿Necesitas perderle para amarlo?

-No lo sé, Juana. Yo no sentía nada por él, apenas me di cuenta que lo perdería fue que comenzó todo esto.

-No mientas. Desde que lo viste te encantó, y aquí me huele a que tus planes de alejarte de él no te funcionaban porque tú no querías que te funcionaran.

-La verdad es que..- La puerta se abrió.

-¡Hola! ¡Hola!-grito Miranda

-Venimos a ver que te pasaba. Vamos a clases de etiqueta para la cena de mañana-dijo Jesy

-¿Estabas llorando?

-No, es que...me cayó rimel en el ojo. Pero en fin, para que necesitamos etiqueta si mañana será una locura total.

-¿Hablaste con Paolo?-pregunto Jesy

-Así es. Mañana será una locura.

-No puedo esperarlo-dijo Miranda

-¿Aún planeas arruinar la cena?-pregunto Juana

TN: -Nunca lo dudé.

No fuimos a la clase de etiqueta, nos quedamos en la recámara hablando de mil cosas; Sebastian no nos fue a buscar, supuse que no quería volver a verme.Llegó la noche y ya estaba en mi cama apunto de dormirme cuando.

-¿_____?-pregunto Juana

-¿Juana?

-¿Puedo dormir contigo?-pregunto 

-Ok pero no me quites mi virginidad.

Juana se acostó en mi cama.

-¿Por qué no le contaste a Miranda lo de Sebastian?

-Bueno, ustedes son parte de mí. Miranda es mi parte ruda y tú pues, creo que aunque lo niegue tengo alguna parte sensible.

-¿Qué fue lo que dijiste?- prendió un foco a la orilla de nuestra cama. Juana y yo gritamos del susto. Miranda dio una carcajada.

-¡¡Que estas haciendo ahí!!-pregunto Juana asustada

-Las espío, fajonas.

-Me disculpas, yo soy virgen.

-Del trasero, bueno..no estoy tan segura ¡Habla!

-No quiero...no quiero de Sebastian se case con Leigh.

Niña Mal |Sebastian Villalobos y tu|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora