Capítulo 62

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  Luego de lo que me dijo salió dejándome completamente sola, solo que antes me aviso: "tienes tiempo hasta mañana".

Allí me senté sobre el lavadero y tapé mi cara con ambas manos. ¿Qué se supone que deba hacer? me merezco el chantaje que me hace, me merezco todo lo que me pasa. ¿Cómo es posible que esté actuando como si nada paso? ¿Tan dura soy? No siento la conciencia sucia cuando beso a Mario, pero mier.da ahora sí. No podre verle la cara y lo peor de todo es que en clase me dijo que tenía planeado hacer fiesta en su casa por su cumpleaños.

Con los pensamientos revueltos sentí la puerta abrirse. Mire, pero no se había abierto, se había abierto una de las puertas del baño.

Santa mierda. Era Megan, una chica con la que coincido en la clase de matemática.
Ella es la chica que una vez me estaba defendiendo en este mismo lugar... su amiga me estaba insultando y ella por alguna extraña razón de la vida me defendía.

Megan: Hola. –Me dijo y sonrió tímidamente. Yo la mire con aportación. –

Cielo santo, ella escuchó todo, absolutamente todo.
Se acerco al espejo a lavarse las manos mientras yo concentre mi vista en el piso, pensando que hacer.

Tu: Oye... –dije sin mirarla – no sé qué oíste pero quiero pedirte si por favor...
Megan: ¿Oír algo? No oí nada, despreocúpate. –Me dijo y la miré. Me observaba cómplice –

¿Podría confiar en ella?

Tu: Mira, la cosa es seria, sé que oíste todo. –Le dije nerviosa –
Megan: No te preocupes, odio el chisme y ten por seguro que no diré nada, lo prometo.

La vi a los ojos, se veía sincera.
Ella tiene el cabello castaño y ondulado por arriba de la cintura y los ojos miel iguales que los de Mario. Es de mi estatura, enana, y es rellenita pero aparenta muy adorable.

Tu: ¿Por qué...? –Me expresé formando una pequeña sonrisa –
Megan: Odio a Kristen, es una maldita. En tercer grado se beso con el niño que me gustaba solo para hacerme sentir fea.
Tu: Qué... tierna –Opiné con recelo –
Megan: Además no me parece lo que te está haciendo... yo siempre temí a que me hackearan porque siempre se lo hacen a la persona menos esperada. Y cuando te paso a ti yo... yo simplemente pensé en ella. ¿Sabes quien fue? –Asentí –
Tu: Fue ella.
Megan: ¿Por eso te esta chantajeando? –Preguntó con cara de lástima –
Tu: Sí.
Megan: ¿En verdad Jan debutó contigo? –Me dijo y la mire sorprendida –

Es directa |:

Tu: No, no así. Pasó algo pero...
Megan: Puedes contarme. –Me dijo rápidamente y mostrando interés –

¿Contarle? ¿Yo quería contarle? No.

Tu: Fue un error. –Le dije sintiéndome incomoda – Gracias por prometerme que no dirás nada, ya suficiente tengo con la loca esta. –Le dije y asintió. –Y bueno, nada, debo irme... me esperan mis amigas.
Megan: Oh, yo iré al comedor. Adi...
Tu: Yo igual, vamos juntas si quieres. –Le dije bajándome del lavadero –

Ella sonrió y camino al lado mío. Cuando caminábamos comenzó a preguntarme cosas, nada personal por suerte. Me di cuenta que esta chica hablaba mucho.

Megan: ¿Por qué nunca te vi en deporte o en gimnasia? –Me preguntó mientras yo buscaba a las chicas con la vista –
Tu: De pequeña sufría de asma y cuando me agito mucho puede que se me valla el aire y termine en el piso.
Megan: Oh... que mal.
Tu: Por eso mi madre prefiere que no haga deporte. –Le dije y la mire. –
Megan: Desde el baño que quise decirte algo... veras... tengo un grupo de amigas, son las deportistas más grandes, y les comento lo que Kristen te hace porque también la odian.
Tu: Ah...
Megan: La cosa es que siempre quisieron hablarte.
Tu: ¿A mí? Seguro no se enteraron lo que me pasó con la fotografía esa.
Megan: Uhms... ______... eso todo el colegio lo sabe lamentablemente. –Me dijo mirando alrededor porque los varones estaban observándome –Los deportistas lo comentan todo el tiempo en los vestidores –me susurro y la mire con asco –
Tu: ¿Cómo es que sabes todo eso?
Megan: Es imposible no enterarse _____, ¿conoces a Leila de cuarto?
Tu: ¿La pelirroja?
Megan: Sí, es mi hermana.

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