Asumamoslo, Ahora Esto Es Lo Que Somos 2... (#TheWrites)

254. ¡Asesina!

El sol se ocultaba en la lejanía tras las inmensas montañas de Polis cuando la Heda de los Catorce Clanes entró en la habitación que Clarke kom Skykru, Wanheda y Cazadora de la Montaña ocupaba en la imponente Torre de Polis.

Las lágrimas llenaban aún sus ojos cuando nada más poner un pie en la habitación, Bellamy arrodillado junto a Clarke sujetando su mano aún entre las suyas levantó la cabeza enfrentando sus ojos lleno de dolor y rencor.

—¿Tú has hecho esto? —preguntó él quedándosela viendo—. ¡Tú! ¡Has hecho esto!

Roan que entraba tras Lexa en ese momento le escuchó y apenas tuvo tiempo de decir nada cuando vio a Bellamy soltar su mano poniéndose en pie para cruzar la habitación y enfrentarse a Lexa.

—¡Tú debías protegerla! ¡Tú debías cuidar de ella como prometiste que harías! —le gritó por momentos Bellamy sintiendo las lágrimas de la rabia llenar sus ofuscados ojos con dolor.

Lexa que fue incapaz de contestar apartó la mirada tan avergonzada como abatida.

—Cuida tu forma de hablar —amenazó arrastrando las palabras Roan al oírle hablar así—. Es con Heda con quien hablas.

—¡Me da igual! —le gritó Bellamy furioso y dolido con ella señalando a Lexa muy cerca de ella—. ¡Prometiste cuidar de ella! ¡¡Prometiste cuidarla y ahora ni siquiera despierta!! ¡¡Esto es culpa tuya, Lexa!!

La barbilla de Lexa tembló mientras el sabor salado de sus propias lágrimas llegaba a ella y cerro los ojos sabiendo que se merecía toda esa ira suya más que nadie en aquellos momentos.

—¡Ya está bien! —le gritó Roan saliendo en su defensa antes de apartarle con la mano de un empujón de ella—. ¡Ella no le ha hecho daño a Clarke, ha sido esa mujer! ¡Ha sido ella!

—¿¿Y quién la libero?? —le gritó Bellamy dando un paso hacia ella sin importarle cuanto Roan se interpusiese—. ¿¿Quién confió en ella??

—Por favor... —musitó Lexa entre lágrimas sintiéndose más herida por momentos—. Solo quiero verla...

—¡¡No te acercarás a ella!! —le gritó Bellamy lleno de lágrimas y rencor—. ¡¡Te lo prohíbo Lexa!! ¿¿Me oyes?? ¡¡Te lo prohíbo terminantemente!!

Roan que cambió la expresión de su cara al escucharle ya que ningún Skykru se sublevaría al poder de Heda dio un paso hacia Bellamy tomándole con fuerza de la camisa con una mano.

—¡Tú no eres nadie para prohibir nada a la gran Heda, es la Comandante! —le espetó él ásperamente enfrentando con desafío sus ojos.

—¡¡Es una asesina!! —contestó Bellamy con inquina y rencor dirigiéndole una doliente mirada a Lexa—. ¡¡Eso es lo que es!!

Lexa que retrocedió dos pasos aletargada por la tensión reprimida del momento empezó a encontrarse cada vez más mal por momentos escuchándole gritarla de aquella manera.

—¡¡Su sangre tiñe tus manos, Lexa!! —le gritó aún más Bellamy pasando por alto a Roan para enfrentarla a ella.

Roan fue a golpearle cuando sintió de golpe a Lexa caer al suelo tras él. Su rostro palideció y Bellamy se detuvo abruptamente al contemplar su desvanecido cuerpo. De pronto toda esa ira, esa rabia y esa cólera se tornó preocupación.

—¡Lexa! —gritó Roan agachándose rápidamente apartándole el largo cabello de la cara para verla, buscando su pulso enseguida antes de dedicar una dura mirada a Bellamy—. ¡Ve por la sanadora! ¡Ve por ella!

Bellamy que en un principio no tendría porque obedecer finalmente su consciencia le pudo al pensar en lo que Clarke querría que hiciese por Lexa y salió corriendo de la habitación para buscar a una de las sanadoras de la Torre.

Tal vez había sido demasiado duro con ella...

Tal vez su desmayo era su culpa...

Tal vez...

Continuara...