Shy

Capítulo 9: Primoroso encuentro.

Liam y Louis caminan en sincronía, están alegres al recibir la noticia de que podrán ir al hotel más temprano ya que mañana, justo a las 4:20 a.m., se trasladarían hasta la próxima ciudad cercana. Eso significaba que tendrían más tiempo para descansar y tener la energía suficiente para el viaje.

Mi presencia es casi desapercibida, soy solo una chica con una holgada playera y cabello despeinado siguiendo los pasos de dos cantantes, la atención es suprimida totalmente por ellos y, de cierto modo, me siento más cómoda sin tantos ojos sobre mí.

Suelto un suspiro y doy vuelta a la izquierda justo como ellos. A decir verdad, el estadio era lo suficientemente grande como para confundirlo con un laberinto, de no ser guiada estaría perdida. Así que entrelazo las manos y observo distraídamente mis desgastados zapatos.

Pero entonces mi cuerpo es detenido con brusquedad por el pecho de Liam, mi cabeza choca y el golpe es tan desorientador que tengo que parpadear un par de veces antes de ver hacia arriba y disculparme con la mirada.

- Lo siento, yo... N-no me di cuenta.

- No hay problema -cuando dice esto su sonrisa no desaparece en ningún momento, es genuina y carismática.

- Perdón -es lo único que atino decir con los ojos atentos de Louis sobre mí.

Niega riendo leve: - Por aquí, ya casi llegamos -mira a su amigo y entonces volvemos a nuestra caminata.

Medio minuto después soy sólo una espectadora de cómo empujan una puerta y mi campo de visión se llena completamente de personas guardando todo con impresionante rapidez y agilidad.

- Liam, tus auriculares no los he encontrado...

- Ya los tengo.

- Oh, qué alivio. Serían el tercer par perdido en esta semana.

- Descuida, mientras Cory no esté cerca estamos a salvo -ambos ríen y el sujeto se aleja- Hablando de Cory, espero que de verdad esté haciendo algo.

- Seguramente está tras bambalinas con Dan probando la pipa que compraron en Bélgica -dice Louis sin mucho interés.

Sus palabras le causan gracia a más de uno y él sólo sonríe, gesto que se asemeja más a una mueca graciosa.

- Te apuesto a que ellos...

- ¡Por fin! -Exclama un hombre, interrumpiendo con ímpetu- Dime que tienes tu guitarra o iré a golpear a Fred -su tono es desesperado y cansado, casi como todos.

Sus ojos están posados en algo más arriba de mi cabeza y de no ser por las demás personas que también están mirando detrás hubiera asegurado que se dirigía a mí.

Pero no era el caso. Así que tomando un poco más de aire me aparto del camino y me atrevo a ver a la persona que acaba de entrar.

Pantalones negros ajustados, una playera azul, calzado deportivo y una funda de guitarra a un lado. El cabello despeinado, tintado de rubio y unos ojos turquesa enmarcados en contornos de sueño, rasgos alargados, una barba ligera y labios delgados de color pálido.

- Esa guitarra es tuya, ¿No? -el hombre habla de nuevo, su desesperación y estrés incrementando notablemente.

- Es sólo la funda, vine precisamente para preguntar si la habían visto.

- Ayer la vi en un sofá -Comentó Liam.

- ¿En dónde?

- No lo sé, era un sofá café.

- Eres de gran ayuda Liam, muchas gracias -se burla Louis con sus manos dentro de los bolsillos de su pantalón- Todos los sofás de aquí son cafés, genio.