Capítulo 24: Némesis.

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(Booktrailer en multimedia, me llevo casi cuatro días terminarlo, espero que les guste)

*





— Hace unos meses la escuché discutiendo con otra chica por cosas sin sentido... ¿Es algo explosiva, no lo crees? —comenta Gemma.

Asiento incómodamente ante la conversación y atención que ella me tenía.

— Las razones por las cuáles no le agrado aún no están definidas. Sin embargo, no es secreto qué ella tiene un carácter fuerte.

— No es difícil deducirlas, Edine —hace una mueca— El que sea sobrina de Tanner te debe revelar algo.

Mis ojos, como mi boca, se abrieron con sorpresa: — ¿S-su sobrina?

Asiente lentamente y doblamos hacia la izquierda.

— La historia es confusa, pero se sabe que fue expulsada de la universidad de París por agredir a una de sus profesoras. Nadie conoce el motivo. Sin embargo, lo que si queda claro es que el hermano de Tanner suplicó por un puesto para su hija. No quería admitir que ella era un problema. Su hogar se había convertido en un suplicio y según me dijo la propia Victoire; su madre intentaba volverla en algo que ella no quería. Debido a eso su relación es demasiado complicada. Y cuando le dieron la noticia que se uniría al staff de One Direction, contra su voluntad, casi explotaba de ira.

La observo pasmada. Jamás había pensado que Victoire estuviera aquí por obligación.

Incluso después de haberlo escuchado de los labios de Gemma me sigue pareciendo algo increíble y, pasando por alto la estrecha tolerancia que nos tenemos, siento algo de pena por su situación.

En nuestros encuentros ella ha recalcado que lleva años aquí; ¿En serio ha estado separada de sus padres por tanto tiempo? ¿Eso contribuye a su personalidad y comportamiento?

No importan las razones exactas en este momento, pero su caso se no alejaba del mío. También me había alejado de mi hogar, de mi familia y de todo lo que alguna vez había conocido. Sin embargo, estoy aquí con un propósito; necesitaba los recursos necesarios, necesitaba verlos de nuevo y hacerles saber que su hija —aquella que no hizo caso a sus advertencias y consejos— añoraba sentir sus abrazos.

Era verdad, para lograr aquello tendría que esperar a que la gira finalizara. El contrato lo establece y al ser el único lugar que me brindo una mano no pienso desperdiciar esta invaluable oportunidad que poco a poco me acerca a Tobermory... a mis padres.

En otras palabras, sentía lástima por mi actual némesis.

— Tanner jamás lo ha comentado.

— No tiene por qué. Es fácil ver que su sobrina le ha traído muchos problemas por aquí, muchos han sido despedidos a causa de ella y sus padres se han librado totalmente. Le han pasado la responsabilidad a alguien más.

— ¿No tiene más familiares? —Cuestiono con el ceño fruncido y ella se encoge levemente de hombros— No quiero ser indiscreta, pero...

— ¿Cómo se todo esto? Ella bebió de más en una fiesta y me tomo como su método de desahogo —suspira pensativa— No quería creerle. Estoy acostumbrada a que muchas chicas me hablen con el objetivo de relacionarse con Harry, pero ella no tenía ningún interés.

— Entonces... ¿Le creíste? —murmuro algo cohibida.

Mira hacia otro lado con incomodidad y después de unos segundos asiente seria.

— Victoire no tiene una vida fácil, Edine. Sólo sus padres saben con exactitud qué circunstancias atraviesa. Pero debes saber que lo que te ha hecho no es correcto, no tiene justificaciones y deberías decírselo a Tanner.

Un escalofrío me asalta. Niego y observo como se detiene en el pasillo. También detengo mi andar, quedando unos pasos más adelante que ella.

Nadie sabe con exactitud por que circunstancias ha pasado —repito sus palabras sin verla— Sé que no debo soportar sus acciones, pero en el momento en el que Tanner se entere irá por ella... Y ella vendrá por mí. Simplemente quiero estar tranquila, la gira está por terminar.

— Sé que tú también has pasado por algo que te ha marcado, pero quedarte callada solo provocará más daño. Hay un punto de quiebre en cada persona, no podemos cargar con tanto —dice mirándome con empatía.

— Lo sé, pero yo sabré cuando tomar cartas en el asunto. Sabré cuando detener todo.

Asiente con vacilación en mi dirección.

— Me disculpo si te ha molestado que Harry me haya contado acerca de...

— No me molesta, Gemma —le resto importancia con mi mano.

— Genial, porque creo que es un nombre muy lindo.

Le sonrio suavemente y retomamos la caminata. En cuánto llegamos a la sala de descanso me encuentro de nuevo con Lottie, quién habla alegremente con Lou y Corinne.

— Vaya, ya la conociste —dice Lottie y Gemma me observa.

— Era lo que estaba esperando.

— ¡Igual yo! —Exclama emocionada— Louis quería presentármela después del concierto, pero haber chocado en el pasillo fue más interesante.

La miro apenada nuevamente: — De verdad lo siento.

— No te preocupes —me sonríe con sus carnosos labios— Y tú, Gemm, ¿Cómo la conociste?

— Liam y Niall habían perdido sus auriculares y ella apareció.

— ¿Por qué siempre pierden algo antes del concierto? —cuestiona mirando a lo lejos, como si fuese a encontrar la respuesta por ahí.

— Son chicos —responde Lou pasando a nuestro lado y reímos.

— Oh, por cierto, Gemma me comentó que saliste con Harry.

Me pongo nerviosa ante las sonrisas que me muestran.

— Si, fuimos a Manchester House —digo tratando se sonar despreocupada.

Gemma suelta una risita cómplice: — Es uno de sus restaurantes favoritos.

— ¿Y qué tal? —pregunta Lottie con ojos brillosos.

Tomo aire, les indico que nos sentemos en los largos sofás y me preparo para relatar una vez más aquel momento.

ShyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora