CENTROAMÉRICA II

775 104 25
                                    


En el momento en que Kris dijo la palabra volar, tres helicópteros aparecieron de la nada en el cielo sobre sus cabezas y al menos una docena de humanos armados bajaron hacia ellos. Los cuatro guardianes y Jimin eran los blancos de armas que no podían ver claramente a través de las ramas de los árboles. Todos tenían un láser rojo apuntando a sus cuerpos, o cabeza, en caso de Jimin.

Tao rodó los ojos sintiendo que la situación era de muy poca gracia y levantó sus manos en señal de rendición al ver el láser que pintaba un círculo rojo en su hombro izquierdo. Los demás guardianes, incluyendo a un muy contrariado Sehun, subieron sus manos. Jimin también levantó sus manos asustado y de alguna forma indignado, ya que el láser que le apuntaba a él tenía la mira fija en el centro de su frente.

Por tierra llegaron muchos soldados vestidos en ropa de camuflaje de varios tonos de verde que esposaron y amordazaron a los fugitivos y los hicieron subir a dos camionetas; Tao, Jimin y Sehun en una y Kris junto a Luhan en la otra. A menos de un kilómetro de recorrido, todas las cosas dentro de la segunda camioneta empezaron a levitar y a girar en el aire. Los humanos se dieron miradas nerviosas entre ellos pero no se les ocurrió nada que pudieran hacer más que seguir su camino.

La esposas con las que sus manos se mantenían juntas en su espalda apretaban las muñecas de Luhan y lastimaban su piel cuando se removía en su asiento. A su lado, Kris estaba tranquilo, se veía sereno y Luhan pudo adivinar que el guardián se sentía confiado, aunque no tenía idea de qué.

Kris confiaba en las reacciones de Luhan a estar atrapado y trató de mantener la calma esperando a que la telequinesia hiciera su trabajo. En poco tiempo escuchó un clic que los humanos no podrían haber escuchado. Sus esposas se resbalaron de sus manos hasta caer en el asiento y una pequeña sonrisa escapó de su rostro de emociones contenidas. Con un codo y con demasiada fuerza, el guerrero volador se deshizo del humano que lo custodiaba en su costado izquierdo sin que nadie se diera cuenta. Kris tomó un pequeño respiro y llevó sus manos a la mandíbula del conductor, quien estaba delante de él, y de un certero tirón hizo que la cabeza del humano cayera con flacidez hacia un costado.

Trabajando de forma simultánea con Kris, Luhan había dejado inconsciente al humano que cuidaba su costado derecho y segundos después también al humano en el asiento del copiloto. El telequinista detuvo la marcha del auto y lo sacó del carril haciendo que toda la parte delantera del auto se estrellara contra un árbol a orillas de la carretera, salió del auto, se quitó la mordaza y se apresuró a detener el auto que los adelantaba, ahí transportaban a los demás fugitivos. El conductor intentaba aumentar la velocidad pero fue incapaz de poner en marcha el vehículo. Las cuatro puertas de la camioneta se abrieron al mismo tiempo y tres humanos rodaron inconscientes por el suelo. Luhan trató de no prestar mucha atención y subió por dónde el copiloto había caído, Kris también alcanzó el primer auto y se metió en la parte trasera.

Para sorpresa de todos, el que llevaba el volante esta vez era Tao. Para ser honestos, no lo hacía muy bien pero al menos iba rápido. Luhan se aferró a su asiento al igual que Jimin y Sehun; Kris se mostró fascinado al ver a Tao hacer algo descabellado. En un giro en U, Tao salió de la carretera principal y se detuvo creando mucha conmoción y un par de golpes a los cuerpos humanos dentro del auto.

—No es buena idea volar —dijo Tao, inclinándose sobre el volante y mirando al cielo a través del parabrisas oscurecido. —Hay muchos —susurró. 

Habían al menos diez helicópteros esparcidos por el cielo sobre sus cabezas. Tao miró por el retrovisor y clavó su mirada afilada en los ojos de Kris. 

—Será mejor que lo hagas tú —admitió, aunque para ser su primera vez conduciendo un automóvil y si se tomaba en cuenta que nadie lo había instruido, había estado bastante bien.

HUMANO ~EXO~Donde viven las historias. Descúbrelo ahora