GALA.Terminar llorando sobre el pecho de Luca no era parte de mi plan...
¿De que plan hablo si no tenía ninguno en primer lugar? Dios, esto es muy confuso.
Mis ojos se sienten pesados y me quito las gafas para verme en el espejo. Ahogo un grito ante mi reflejo: ojos chicos y ligeramente hinchados. Niego ante mi imagen y vuelvo a ponerme los lentes. Soy un desastre.
Miro el disfraz que tengo entre mis manos y frunzo el ceño.
¡¿Pero qué diablos es esto?!
El atuendo es de mucama pero es bastante erótico y revelador a juzgar por el diseño y la poca tela. Dios, ¿por qué acepté la propuesta de Luca? ¿En que estaba pensando?
Los disfraces me encantan y creo que al usarlos, uno puede ampliar su imaginación, viajar y/o experimentar miles de historias al igual que leer un libro. Sin embargo, ni por todos los santos del mundo me pondré esto.
Entonces salgo del vestidor.
- ¡No pienso disfrazarme de mucama sexy! -reclamo.
Los chicos voltean hacia mí y Dante parece contener una carcajada.
- ¿Le diste ese disfraz? -pregunta a su amigo-. Vaya, vaya...
-No fue mi intención -se defiende Luca.
El moreno murmura por lo bajo y no logro escucharlo bien.
-El disfraz no tiene nada de malo. Te quedará bien -me anima luego.
-Claro, de maravilla para bailar en un caño frente a miles de hombres.
-Umm... ¿en que piensa esa cabecita sucia?
Ruedo los ojos. ¿Acaso todo lo que digo es tan fácil de malinterpretar o es solo el amigo de Luca quién ama hacer eso conmigo?
-Yo elegiré mi disfraz -decreto y dejo el atuendo sobre uno de los mostradores-. ¿No se supone que debe ser algo que me alegre? Entonces quiero algo que me guste.
En el perchero, paso disfraz tras disfraz en busca de uno que sea de mi agrado hasta que encuentro el de Tinkerbell. Ese personaje ha sido parte de mi infancia y siempre me ha gustado cuando veía Peter Pan. Muy pequeña pero de un gran carácter.
Lo agarro y marcho al vestidor. Éste consta de tres piezas: un vestido verde sin mangas, un par de zapatos del mismo color con pompones blancos en sus punta y alas de fantasía. Para finalizar, formo un rodete en lo alto de la cabeza con mi propio pelo, porque no tengo otra cosa con que atarlo, y me coloco las gafas de nuevo.
Al salir, silbo para llamar su atención y ellos voltean en sus asientos para verme.
- ¿Qué les parece? -pregunto con una sonrisa satisfecha y los brazos en jarras.
Espero por sus reacciones. Y sigo en eso hasta que la canción que suena por un altavoz finaliza y comienza otra.
- ¡Quítate eso de una maldita vez! -exclama Dante.
- ¿Qué? ¿Por qué? -inquiero.
- ¿Acaso quieres que mi mejor amigo tenga un ataque por tu culpa? ¡Anda, quítatelo! Vamos a buscarte otra cosa -demanda y se pone de pie. Se dirige a los disfraces y comienza a rebuscar entre ellos.
¿Que bicho le habrá picado? Confundida, me ubico frente a Luca.
- ¿En serio luce tan mal? -pregunto mientras tomo cada extremo de la falda verde con mis dedos.
Él me observa descaradamente de los pies a la cabeza. Mira, pero no dice nada.
- ¿Luca? -vuelvo a preguntar, esta vez un poco incómoda por su falta de comentarios.
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En ese Maravilloso Instante © (SP#1)
RomanceDesde temprana edad, Gala Machado comprendió que su madre no la quería ni sentía afecto por ella y se conformó con una vida que conlleva el instituto y su casa sin ninguna emoción. Luca Pesaressi sabe desde pequeño, que su vida está atada a su mejor...