Capítulo 27

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Narra Malú

Vane me sostiene de la cintura, tengo mis brazos alrededor de su cuello, con una de sus manos, corre el cabello de mi cara, me mira y sonríe de una manera increíble, sus ojos están llenos de lágrimas. Vuelvo a besarla.

-Me siento muy orgullosa de ti, mi amor.- Digo en tono suave.

-Bueno, bueno, que yo también quiero felicitar a mi cuñada.- Dice mi hermano sacándonos de nuestro mundo en el aire.

Vane me baja, mi hermano se acerca y la abraza, ella corresponde muy feliz, luego mira a mis padres que observan a una distancia sin decir nada. Ellos la quieren muchísimo, se que ahora mismo mueren por felicitarla, pero se también que esperan algún tipo de explicación. Vane toma aire, se pone sería, pero la felicidad no se le va de la cara.

-Soy Vanesa Martín Mata y me casé con su hija. Se que no es la mejor manera de presentarme y que os hubiese gustado que las cosas fueran diferentes y creedme, hace unos días, yo también quería que las cosas fueran diferentes, pero la verdad.- Hace una pausa y toma mi mano. -La verdad es que me he enamorao y tengo muchas ganas de intentar hacer que este matrimonio, alborotado y loco, funcione.-

-¿Te lo dije o no te lo dije, Pepe? Advertí que estas niñas iban a terminar juntas, es que había que ser ciego para no darse cuenta.- Dice mi madre mirando a mi padre.

-¿Es que alguna vez te he contradicho? Bien dije que eso de dormir en la misma habitación traería consecuencias.- Responde mi padre.

-¿Vosotros también? ¿Es que hay alguien que no haya creído que terminaríamos juntas?- Pregunto rascándome la cabeza.

-Nadie, como canta mi cuñada aquí presente, todo estaba en tiempo de espera, hermanita.- Dice mi hermano.

-Y ahora, ya, enhora buena mi hija, venga, dame un abrazo que vas a llenar las Ventas de puro arte y del bueno ¡ole!- Grita mi madre.

Vane corre y la abraza, luego abraza a mi padre que le da la bienvenida a la familia, José trae una botella de champagne y brindamos.

-Solo os pido os queráis mucho.- Dice mi madre. -Malú, cuida mucho a mi Vane.-

Tanto mi padre como mi hermano asienten, Vane se ríe, se mete entre ellos y los abraza.

-Oigan, en su familia la defendieron a ella, se supone que aquí deben defenderme a mí. Traidores.- Digo achicando los ojos. -Y tú que tenías miedo de hablar con tus suegros...-

-Jamás dije eso, si mis suegros son un encanto.- Interrumpe Vane haciendo cara graciosa.

Narra Vane

La cena ha resultado más que increíble, los padres de Malú nos dan mil recomendaciones y consejos antes de retirarse. Me quedo en la puerta mientras ella los despide en el coche, se gira para regresar, abro mis brazos para recibirla, sonríe, corre hacía mi, salta, y enreda sus piernas a mi cintura. Nos besamos, la llevo despacio al sofá y nos tiramos ahí, ella se acuesta sobre mí.

-Por fin solas. Es hora de celebrar.- Susurra sobre mis labios.

-¿Y que vamos a celebrar?- Pregunto colando mis manos bajo su camiseta.

-Que.- Me besa. -Mi mujer. -Vuelve a besarme. -Mía solita, de nadie más, ¡va a tumbar Las Ventas!- Grita y me besa de nuevo.

-Soy muy feliz ¿sabes? ¡Muy, muy feliz!- Grito también.

-No es para menos, mi amor.-

-No es por eso que estoy feliz, bueno sí, pero no solo eso, sino porque te tengo conmigo. Nada de esto sería igual sin ti a mi lado. No imaginas cuanto te quiero.-

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