Sígueme el juego

Capítulo 61

Narra Vane

-¿Qué? No, no, espera, Malú, no puedes estar hablado enserio.-

-Estoy hablando muy enserio, Vane, no podemos seguir así, viviendo a escondidas...-

-Pero siempre hemos vivido a escondidas, nuestras vidas solo nuestras.- Interrumpo.

-Pero no de esta manera, Vanesa. ¡Joder! ¡Que tengo miedo! Me paso el día entero pensando que alguien sigue mis pasos, que ve todo lo que hago. ¡Saben que te metes en mi habitación todas las noches! ¿Te das cuenta de eso? ¿Qué tal si te hacen daño?- Dice sumamente nerviosa.

-A mi no me importa...-

-¡Pero a mi sí!- Grita. -Y no puedo permitir que esto siga creciendo, es una locura.-

-¿Qué significa esto, entonces? ¿Estas terminando conmigo?- Pregunto con un miedo increíble.

-No lo se. Solo se que necesito recuperar la paz en mi vida y tu necesitas vivir la tuya.- Hace una pausa y toca mi mejilla. -Tú no sabes de sombras, ni sabrás. No te mereces esto.-

-El problema es que yo quiero mi vida a tu lado, ¿cómo lo resolvemos?- Pregunto haciendo que me mire.

Sus ojos están llenos de lágrimas, los míos también. Se acerca, me abraza por la cintura y apoya su cabeza en mi pecho, la abrazo con todas las fuerzas de mí ser y beso su frente.

-No me voy a dar por vencida.- Susurro.

-Adiós.- Dice separándose y sale de la casa rápido,

Me quedo observándola, las chicas regresan, miran hacia donde se ha ido Malú y me miran a mí.

-¿Qué pasó?- Pregunta Nali preocupada.

-¿Qué pasó? Que volvieron a amenazarla, que saben lo que hacemos, que siguen todos sus pasos. ¿Por qué demonios no has hecho nada Nali? Eres millonaria, conoces a todo el mundo y ¡¿no puedes hacer que encuentren a una puta loca?!- Digo completamente sacada.

-Ella no tiene la culpa, Vanesa.- Dice Francis.

Nali hace seña con la mano para que me deje hablar, siento tanta rabia e impotencia ahora mismo, que me desquito con quien menos se lo merece, las lágrimas empiezan a caer por mi rostro, intento pedir disculpas, pero tengo la voz quebrada. Nali se acerca, me abraza, los demás hacen lo mismo, nos unimos en un abrazo grupal.

-Chicas, necesito un favor.- Digo luego de unos segundos.

-Claro, lo que quieras.- Dice Gaby.

-No dejen sola a Malú, ahora más que nunca las necesito a su lado. Cuídenla.-

-No tienes ni que decirlo, amiga, no vamos a dejar sola a nuestra Malula. No, señor.- Dice Pau firme.

Narra Malú

Siento que he perdido todas mis fuerzas, regreso a mi casa pensando en la maldita mierda que estamos viviendo y no puedo creer que haya tenido que tomar esa decisión, que haya tenido el valor de hacerlo, yo tampoco puedo imaginar mi vida sin ella. Las lágrimas caen por mi rostro por inercia.

-Gonzalo, ¿qué haces aquí?- Pregunto sorprendida al verlo en el living.

-Me enteré de lo que pasó, quería saber como estas.- Dice acercándose.

Lo detengo con un gesto de mano, me sorprendo, mi madre y Sol llegan desde la cocina, mi madre viene abrazarme, pero la detengo también.

-Hija, ¿estas bien?- Pregunta sin entender.