Narra Malú
Seguimos en la habitación, cargo en brazos a Lucerito, joder, es tan bonita.
-Oye, ¿qué dices si vamos a buscar a Lucía ahora mismo?- Susurra Vane a mi oído.
-¿De verdad? Sí, ¡vamos! Muero de ganas, amor, quiero, quiero, quiero.- Digo con voz de peque. -Vamos a buscar a tu primita, Lucerito.- Agrego y le doy un beso en la mejilla.
-¡Por fin! Quiero conocer a mi sobrina. Espero que me hagas el padrino, con eso, voy a casi olvidar que no me has contado nada.- Dice Francis.
-¡Vaya! ¡Que se nos hace tarde!- Dice Vane mirando su reloj, haciendo caso omiso. -Vamos, vamos, amor. Adiós Lucerito preciosa, adiós tíos.- Me coge de la mano.
-¡¿Qué?! ¿No me harás padrino? Vanesa Martín Mata, soy tu hermano.- Es lo último que escuchamos antes de salir.-
Hacemos unos metros por el pasillo hasta el patio interno de la clínica y vemos a Nali sentada, fumando, pensativa, con la mirada en la nada misma. Nos acercamos, nota nuestra presencia y se levanta.
-Solo he venido a dejaros el coche para que podáis regresar.- Dice pasándonos las llaves.
-¿Estas bien? ¿Qué ha pasado? ¿Y Ana?- Pregunta Vane preocupada.
-Se acabó, Vane, ya no queda nada.- Responde cabizbaja.
-¿Cómo que se acabó, Nali? Os amáis. -Apelo.
-No es suficiente, Malú.- Dice y niega con la cabeza. -Luego recojo el coche.-
-¿Te acercamos a algún lado? ¿Quieres ir a tomar unas cañas?- Pregunta Vane. -Lo que quieras amiga.-
-Gracias, pero prefiero caminar un rato.-
-Vamos a buscar a Lucía, ¿por qué no vienes con nosotras?- Pregunto intentando animarla.
-Que bonito, por fin.- Dice sonriendo levemente. -Pero no, id vosotras, y disfrutadlo, que lo merecéis.- Agrega sincera.
-Ana te ama, Nali, te ama de verdad.- Habla Vane mientras Nali se dirige a la salida lo que hace que se detenga y regrese hacia nosotras.
-Solo necesito saber una cosa...- Hace una pausa. -¿En algún momento, vosotras dudaron de mí? ¿Me creyeron capaz de hacer algo así? Decidme la verdad, por favor.-
-No, amiga, no dudé de ti.- Respondo sincera.
-Tampoco yo.- Agrega Vane y baja la cabeza, sabe que esa será peor condena para Ana.
-Mi mujer sí.- Dice Nali y niega con la cabeza. -Mi mujer sí.-
Narra Vane
No hablamos mucho durante el camino, me mata pensar en Ana ahora mismo, imaginar lo dolida que está, jamás había amado tanto a alguien como ama a Nali, no puedo creer que ese amor tan bonito se haya acabado y todo por el odio de una persona, maldita sea.
-Ya, cambia esa cara, seguro lo solucionaran.- Dice Malú acariciando mi mejilla.
-No lo se, amor, has visto a Nali, no se si lo solucionarán.- Respondo suspirando.
-Bueno, pues a la de ya, me cambias esa cara malagueña, que vamos a ver a nuestra hija, ¿vale? No podemos hacer mucho por ellas, más que acompañarlas en estos momentos.-
-Tienes razón, vamos a por nuestra niña.- Digo ganando entusiasmo.
Nos dan acceso sin problemas en la cuidad, vamos saludando a todos como siempre y llegamos a casa de Lucía, ella está en un banco bajo un gran árbol, coloreando. Malú chista, ella levanta su mirada y sus ojos se iluminan y con ellos, se nos ilumina la vida a nosotras.
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Sígueme el juego
FanficTanto tiempo buscándote sin saber que te había encontrado hace mucho... Historia ficticia, sin intención de faltar el respeto a quienes la protagonizan