Había pasado un mes. Un mes desde que Chris literalmente me dejó por Astrid, un mes desde que había comenzado a salir con Nick. No me arrepentía, pero sinceramente no le quería, no del modo que él se merecía. Sin embargo, pasábamos un buen rato juntos, tratábamos (al igual que Chris) de aprovechar al máximo el poco tiempo que nos quedaba juntos. El, al igual de Astrid, se iba en un mes, tenía que regresar a Italia, lo extrañaría, de verdad que si.
Nick aprovechaba para tomar fotos memorables de cada momento que pasábamos juntos, decidí publicar esta foto, que era mi favorita, con la siguiente frase: (no, no lo hice para darle celos a Christoffer... bueno, tal vez un poco)."Con mi favorito🤞🏻💘"
(...)
Hoy era el día. Nick se iba hoy, este último mes se había pasado volando, lo iba a extrañar infinitamente. Habíamos acordado en dejarnos ir, sería un amor de verano, probablemente volvería con su novia. Fuimos a una cafetería antes de tomar su vuelo, pedí un café, Nick no pidió nada, no le gusta viajar con el estómago lleno. Al salir del local, Nick le pidió a un extraño que nos tomara una foto. Nuestra ultima foto juntos. Ya en el aeropuerto, nos despedimos entre lágrimas y muchos abrazos.
(Supongamos que estos son Nick Robinson y ustedes xd)-Te voy a extrañar mucho, Andy- me abrazó fuertemente.
-Yo más a ti, Nick- me acomodé el cabello- No olvides llamarme en cuanto aterrices.
-No lo haré- me abrazó (otra vez).
Cuando nos separamos vi de reojo algo que llamó mi atención. Una chica con una sudadera rosa fosforescente y un vestido dorado, me giré para verla y OH MIERDA.
No podía ser posible, era realmente irónico, ¿De verdad podía ser que Astrid se fuera el mismo día que Nick? Y... OH MIERDA!, Chris estaba con ella, vestido completamente de negro (mas tarde publicaría un foto en Instagram de su despedida) despidiéndose como solo los amantes saben hacerlo. Joder, consíganse un maldito cuarto. Me sorprendió que los de seguridad no les dijeran nada, era un espectáculo lo que estaban ofreciendo, pero traté de enfocarme en Nick.
Decidí esperar hasta que su avión despegara, así que me senté en una de las sillas en la sala de espera, pero alguien se sentó a mi lado.
-Hola belleza- Chris se acomodó en la silla.
-Que quieres Christoffer- dirigí mi vista a la ventana.
-Hablar contigo, aprovechando que Astrid ya se fue- guiñó el ojo.
Lo volteé a ver sorprendida.
-Chris, eres increíble- tapé mi cara con las manos- Déjame explicarte algo, yo ya no quiero nada más contigo- me permití mirarlo a los ojos. Tan adictivos como siempre, y su sonrisa... ¿como puede la sonrisa de alguien ser tierna y sexy a la vez?
Pero se desvaneció en unos segundos.
-Astrid se fue, ya podemos volver a estar juntos, joder como lo siento- levantó los hombros.
-No Chris, tú me gustaste, mucho, a decir verdad, pero me dolió enormemente lo que me hiciste, y aún más que vengas y me propongas regresar a como estábamos ya que Astrid ya no está, lo dices como si nada, como si YO no fuera nada- solté. Eso es algo que había querido decirle hace mucho tiempo.
-Pero, me derrumbaría sin ti- su rostro expresaba ¿miedo?.
-No te preocupes, si no te derrumbaste en estos últimos 3 meses, creo que estarás bien el resto de tu vida sin mi-.
Pude ver que mis palabras le dolían enormemente, pero eran ciertas.
-Astrid y yo llegamos a un acuerdo...- dijo mirando al piso.
-¿OTRO?- grité con diversión.
-Si, otro, pero acordamos que estos serían nuestros últimos 3 meses juntos, el próximo año, si es que regresa, cada quien seguirá con sus vidas. Esto fue lo último que te haré, lo juro- juntó sus manos fingiendo orar.
-Exacto, lo último que me harás, porque no dejaré que me beses o lastimes otra vez Chris. Además, ¿arriesgaste lo nuestro por algo pasajero de 3 meses que sabías que terminaría? Es estupido!, ahora si me disculpas, no eres el único que perdió a su "pareja"- hice comillas en esta última palabra.
-Una de las razones por las que volví con Astrid fue porque pensé que me engañabas con Nick- se cruzó de brazos y dirigió su vista al frente.
-Mierda Chris, me contactó un lunes, salí con él hasta el viernes y me engañaste durante toda esa semana, tus argumentos son estupidos, tú eres estupido- mierda, me pasé con eso último.
-Lo se, lo se, es solo, que busco excusas, pienso eso para hacerme sentir mejor, lo de Astrid fue estupido, YO soy estupido, tienes razón. Te pedí una oportunidad y prometí que no la cagaria, me la diste y jodi todo, como siempre. Pero te voy a reconquistar...-
Dirigí mi vista al avión, que justo acababa de despegar.
*Adios Nick, ten una larga y feliz vida*
-Lo juro- Chris me besó en la mejilla.- Te acompaño a casa- tendió su mano.
-Gracias, pero puedo cuidarme sola- me levanté de la silla.
-Andy, se que puedes, pero ya es tarde. Es peligroso que te vayas en taxi a estas horas- vió su reloj.
-Pensaba irme caminando- me dirigí a la salida del aeropuerto.
-¿Estás loca? ¿Eres masoquista o algo?- me tomó de la muñeca. Este chico tenía manías muy raras.
-Supongo que debo serlo, me involucre contigo- me solté de él.Estaba lloviendo leve, estaba anocheciendo y el cielo se veía sumamente gris. Me encanta. Caminando, mi casa esta a 20 min, y quería disfrutar de algún tiempo a solas. Pensaba en Nick y en cuanto lo extrañaría. Y sin querer, Chris se coló en mis pensamientos. Pensaba en sus ojos, en su perfecta sonrisa, sus lunares y... ¿que me pasaba? 3 meses tratando de superar un fin de semana con el, ¿para que me volviera a hablar como si nada hubiese pasado? Eso sí que no. Pasé junto a un callejón. Mierda, no recordaba que ahí se ponían a beber unos tipos de mala facha.
*Por favor que no estén, por favor que no estén*
Joder pero si, ahí estaban. Traté de acelerar el paso, pero uno de ellos se puso delante de mi, impidiéndome avanzar.
-¿A donde con tanta prisa?- me recorrió con la mirada un tipo con un cigarro entre los labios.
Traté de esquivarlo una vez más, pero me tomó de los brazos. Era mucho más fuerte que yo.
-Vendrás conmigo, no le dirás a nadie, y no vas a gritar, ¿escuchaste?-
Ni siquiera pude responder, estaba petrificada. El tipo comenzó a caminar junto a mi. Yo trataba de ver a algún lugar donde correr, pero estaba en un sitio cerrado. Estaba jodida.
-Ey, suéltala- Chris apareció detrás y lo empujó, poniéndome detrás de él. Siempre salvándome.
-Véte de aquí niño rico, esto no te incumbe- se acercó a Chris.
-Oh, pero si me incumbe, ella es mi novia- retrocedió unos pasos.
¿Eh, qué?
-¿Ah si?- me miró con la ceja levantada, luego volvió su mirada a Chris- Te conozco niño, tu padre es dueño de la compañía donde trabaja, tú no tienes novias, solo te acuestas con las chicas-
-Eso era antes- se puso muy cerca del tipo, quedando cara a cara- No que te incumba, pero cambié por ella- me señaló con la cabeza.- Ahora, vuelve a tu vida de mierda y déjanos pasar-.
Esto fue lo último que dijo Chris antes de que el tipo lo golpeara con un tubo en el costado. Cayó de rodillas, pero se levantó enseguida y comenzó a golpear al tipo. Tuve que jalarlo de la camisa para evitar que le hiciera algo peor. Lo dejó tirado, con el ojo sangrante y el labio partido. Comenzamos a caminar, yo delante de él, hasta mi casa.
-Chris, gracias, de verdad no se que sería de mi si no hubieras estado ahí- sonreí- Ya van 2 veces que me salvas, gracias en serio.- bajé mi mirada al piso.
-No hay de que- levantó los hombros e hizo un gesto de dolor- lo que sea por ti- apretó los ojos, sabía que el golpe que le había dado ese tipo le había dolido. Mucho.
Llegamos por fin a casa.
-Gracias por todo- me giré hacia el.
-No hay de que-
Nos miramos a los ojos por unos segundos. No, mierda, no. No podía gustarme de nuevo. No tan rápido. No después de lo que hizo.
-Bueno, ya es tarde y hay escuela mañana, así que...- dije tratando de acabar con ese momento incómodo.
-Oh, si lo siento- bajó los escalones de la puerta de entrada- te veo mañana- me guiñó el ojo.
Asentí y entré a la casa. Me recargué en la puerta y me dejé caer. Mierda, Christoffer. ¿Como podías odiar a alguien hermoso? Era imposible, pero a pesar de que literalmente me cambió por Astrid, nunca me trató mal, siempre fue un caballero conmigo. Suspiré y dejé mi bolso en una mesita junto a la ventana... ¿pero que?...
Chris estaba sentado en los escalones, recargado en el barandal, tocándose el costado. En un momento determinado se levantó la sudadera y pude ver una gran mancha morada, el moretón era enorme, inclusive más que aquel que se hizo en su pecho. Una mueca se reflejó en su rostro. No podía dejarlo así.
-Chris...- suspiré
Me volteó a ver, sorprendido.
-Pasa, no puedes quedarte ahí afuera- me hice a un lado de la puerta.
-No, estoy bien, solo- respiró fuerte- necesitó un poco de aire-.
-No seas ridiculo Christoffer, entra ya- volteé los ojos.
Su mirada se tensó.
-Gracias- dijo mientras entraba una vez más a mi casa, sobándose el costado.
Lo curé, su moretón se veía mal, pero no era nada de que preocuparse. Le ofrecí quedarse, pero dijo que aún no era tiempo, que se quedaría cuando él hubiera cambiado. Cambiado por mi. Se fue a su casa a las 2 de la mañana. Pero yo me quedé pensando, ¿era posible que Christoffer Schistad, cambie solo por mi?.
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-Andy💘
OMG, ¿que les pareció el cap? Recuerden que cada 5 votos algo IMPACTANTE pasa❗️Voten, y gracias por leer🤙🏻
Preguntaaaaaaaa🤭
¿Que les gustaría que tuviera la historia? Ósea, otro personaje, un nuevo interés amoroso para Chris etc, etc.💥
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Love me, Schistad💘 [S K A M]
De TodoChris Schistad es el Fuckboy oficial del instituto, todas quieren algo con el, aunque sea por una noche, todas quieren portar la muy típica sudadera de los Penetrators, y siendo sincera ¿quien no querría? Bien, ahí es donde entro yo... pero quien cr...