Me desperté a las 5 am cuando Chris se fue a su habitación (por cierto, le tomé una foto muy cool en la cama). Pero no pude volver a dormir, así que colgué mi vestido, encendí la televisión del baño y me preparé un baño de burbujas. Juro por Dios que las burbujas tocaban el techo, fue el baño más relajante que he tenido en años, tanto así, que ni siquiera me di cuenta en que momento me quedé dormida. Así es, tomé una siesta en una bañera de mármol, empapada de burbujas tranquilas que rozaban mi cuerpo con cada respiración que daba.
Desperté a las 7:30, cuando las burbujas eran pocas y la mayoría se habían convertido en agua. Me puse algo ligero para pasar el día: una falda de pana corta color ladrillo y una blusa hombliguera color mostazay mi traje de baño abajo. La fiesta comenzaría a las 8, así que tenía poco más de 12 horas para disfrutar de la alberca y de no hacer nada.
Christoffer tocó a mi puerta exactamente a las 8.
-¿Quieres ir a nadar?- me ofreció un flotador gigante en forma de dona.
-Me encantaría- lo tomé de la mano.
Bajamos las escaleras (que eran, por cierto, más de 50) y corrimos a la alberca. Dejamos las cosas en uno de los camastros y subimos los escalones hasta llegar a la parte más alta del tobogán.
-Belleza, las damas primero- hizo una reverencia para dejarme lanzar primero.
-Pero que caballero- reí- Pero son las 8 am, el agua debe estar helada, y creo que un caballero debe tomar el riesgo por su damisela-
Me miró con los ojos entrecerrados.
-Sabes, fue una mala comparación.-
-¿Por qué lo dices?- pregunté confundida.
-Por esto- me lanzó por el tobogán.
Soy pequeña y delgada, y no puse resistencia alguna. La maldita perra me había lanzado, pero esto no se quedaría así. El tobogán tenía agua templada, y el paseo fue divertido, a decir verdad. Pero mierda, cuando caí a la alberca, daba la sensación de estar nadando en hielo derretido. Cerré los ojos cuando caí, como si así pudiera contrarrestar el frío que acuchillaba mi cuerpo. Toqué el fondo con mis pies, y sentí una sensación rara así que abrí los ojos... y que bueno que lo hice.
Todo el fondo de la piscina estaba cubierto por pequeñas piedras de diferente color, lo que le daba al agua un color tornasol.
Pero no salí. Me quedé abajo del agua, haciéndole una broma a Chris. Fue divertido durante los primeros 30 segundos, pero luego de eso, realmente quería salir desesperadamente por aire. Pero encontré otra solución; esconderme debajo del tobogán. Habían 20 cm entre el nivel del agua y el tobogán y ahí decidí quedarme.
-¿Andy?-
Escuché de manera distorsionada y lejana la voz de Chris.
-Mierda-
10 segundos después, ya estaba el también en el agua, conmigo. Pero no me vio, nadaba desesperadamente tratando de encontrarme, pero la sombra me cubría perfectamente. Se quedó estático por unos segundos, dándome la espalda, así que ahí salí de mi escondite y puse una mano en su hombro.
-¡Carajo!- gritó debajo del agua.
Ambos salimos a la superficie, yo riendo, y el enfadado.
-Casi me matas del susto- me lanzó agua.
-Casi me matas a mi, lanzándome- le regresé el agua.
Y así comenzamos una pelea acuática de la que yo resulté ganadora.
-¿Puedo acompañarlos?- Theodore se quitó la camisa y se lanzó al agua, quedando en medio de Chris y yo.
Nadé de espaldas hasta llegar a la orilla, salí de la alberca, me puse una camisa de Chris y tomé fotos con mi celular, cuando menos acordé, Theodore se sentó junto a mi.
-Veo que usas una camisa de Chris, pero te verías más sexy con una mía-
-De verdad, tienes que dejar de insistir. Soy novia de tu primo, es inapropiado que me hables de esa manera- bebí un poco de té helado.
-¿Ya tuviste sexo con el?- lo miré enfadada- ¿Hace cuanto? Porque de ser así, no tarda mucho en botarte-
Me puse de pie y lancé el té helado en su cara. Los hielos golpearon su rostro y terminaron en el césped. El chico se lo había buscado.
-¿Qué pasa aquí?- Chris salió de la piscina y se dirigió a nosotros.
-Se enojó porque le dije la verdad. ¿O acaso piensas que Christoffer Schistad realmente está enamorado de ti?- gritó mientras me miraba.
Quería llorar, pero no de tristeza, sino de rabia e impotencia.¿Quien se cree ese hijo de perra para hablarme así?
-Cállate Theodore no sabes de lo que estás hablando- Chris puso su mano en el pecho de su primo.
-Dile la verdad, Chris. No la amas, solo la tratarás como a una de tus folla amigas y luego la botarás, al igual que has hecho con todas- sonrió maliciosamente.
Chris soltó el pecho de Theodore y lo tomó del torso, lanzándose ambos a la piscina. Salieron a la superficie, donde la pelea apenas iniciaba. Chris se había peleado varías veces en mi presencia, y siempre había ganado, pero esta vez era diferente. Theodore tenía su misma fuerza, y habían crecido juntos, así que supongo que sabía sus debilidades también.
Chris asestó un golpe en la mandíbula de su primo, quien a su vez lo tomó de los hombros y lo metió al agua por 15 segundos (que fueron eternos para mi)
-No dije ninguna mentira, Christoffer. Y lo sabes- lo golpeó en el labio.
-No tienes mi puta idea de lo que estás hablando. Ya no soy así- lo golpeó en el labio.
-¡Por favor! Eres el gran Christoffer Schistad, tú me enseñaste todo lo que se!-
Nunca había visto la mandíbula de Christoffer tan tensa. Su cara estaba roja y a pesar de estar en el agua, pude distinguir ciertas gotas de sudor.
-Chris, basta! No vale la pena!- gritaba desde afuera.
Pero era imposible. Nada podía pararlos.
-¡Hey! Theodore, suéltalo!- Joseph se lanzó a la alberca, seguido de Jack, quien sujetó a Christoffer y lo separó de Theodore.
Cada uno sacó a su respectivo chico del agua, Jack dejó a Christoffer sentado junto a mi. Temblaba del enojo y tenía los puños cerrados. Su mandíbula estaba trabada y parecía que los huesos de sus clavículas estaban a punto de colapsar.
Joseph se llevó a rastras a Theodore, quien no paraba de gritar una y otra vez:
-¡Tu eras mi hermano!-
Hasta que finalmente lo metió en la mansión.
Fui por un botiquín de primeros auxilios a la cocina y regresé con Chris, quien ya estaba más calmado. Puse alcohol en un algodón y lo apliqué sobre su labio sangrante, este esbozó una sonrisa.
-¿Te causa gracia el dolor? Deberían golpearte más seguido- apliqué el algodón con más fuerza.
-Es curioso-
-¿Qué es curioso?- seguí curando sus heridas.
-La primera vez que hablamos de manera decente, fue porque salvaste mi vida... junto a una piscina. Y ahora estás haciendo exactamente lo mismo- sonrió.
Maldita sea, ¿por qué aún estando tan jodido y golpeado tenía que verse tan sexy?
Reí con la mirada gacha.
-Tienes razón. Esa vez que casi te suicidas porque Astrid de dejó-
-Se va algo bueno, llega algo mejor- me dedicó un guiño.
Nos quedamos en silencio por unos minutos, minutos en los cuales el no hacía más que verme con culpabilidad en los ojos. Minutos en los cuales recordé esa noche en la piscina, en la que Christoffer Schistad aún era un fuckboy, y yo solo una de sus conquistas. Como cambian las cosas. Ahora éramos novios e íbamos a terminar debido a la distancia.
-Mi abuela va a matarme cuando vea que me peleé con Theodore- se dejó caer en el camastro.
-Pasa por mi habitación más tarde y te maquillaré con gusto- guardé todas las cosas en el botiquín- ¿A que se refería Theodore cuando dijo que era tu hermano?-
Hizo una mueca de dolor y se incorporó, hasta quedar a 10 cm de mi.
-Theodore y yo solíamos ser inseparables. Desde pequeños hacíamos todo juntos. Él conoció a Astrid, y trató de meterla en su cama, ella se negó, Claro eso fue antes de que se convirtiera en una zorra. Yo dejé de hablarle desde entonces. Y no lo quiero cerca, ni de ti, ni de mi-
-Es tu primo hermano- afirmé.-Prométeme que no volverás a pelear con Theodore- lo tomé de su mandíbula.
La tensó al instante.
-Okay- se quedó en silencio un rato- Entonces paso por ti a las 7:30 a tu habitación para que me maquilles, y de ahí bajamos a la fiesta, ¿de acuerdo?-
Asentí con la cabeza y lo besé cortamente.
-¿Eso porque fue?- preguntó sonriente.
-Un pequeño preview de lo que tendrás en la noche si te portas bien- mordí su labio.
Estaba pretendiendo ser sexy, pero Chris ES sexy.
-Oh belleza, me portaré de maravilla-
Me besó nuevamente y se colocó encima de mi, sin poner su peso completamente. Aprisionó mis labios contra los suyos. Con una mano tomó mi brazo izquierdo y lo colocó junto a mi cabeza, mientras que con la otra paseaba por el contorno de mi traje de baño.
Si este era el trailer, no podía esperar a la película...
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-Andy💘
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Love me, Schistad💘 [S K A M]
RandomChris Schistad es el Fuckboy oficial del instituto, todas quieren algo con el, aunque sea por una noche, todas quieren portar la muy típica sudadera de los Penetrators, y siendo sincera ¿quien no querría? Bien, ahí es donde entro yo... pero quien cr...