Padres YoonMin Mpreg

Cap.52

Pov Escritora;

Jimin estaba nervioso, lo admitía.

Justo esa mañana había sentido una gran molestia, o más bien un dolor, en su vientre bajo, en toda la mañana el dolor no había parado.

YoonGi estaba bastante preocupado, JiMin lloraba, se quejaba y se sentía bastante incómodo.

Todo empeoraba en grandes niveles, ya que mañana sería el día de su boda, ya todo estaba listo.

Las invitaciones habían sido enviadas con anticipación de dos semanas, los trajes ya fueron entregados por Soyeon hace tres días y les habían quedado perfectos, la decoración del salón en el que sería la boda ya estaba lista y los anillos ya estaban en su respectivo lugar.

Todo estaba listo.

Se habían negado a separarse, la madre de JiMin les había pedido aquello, sólo por que para ella eso era un especie de tradición.

Yoongi no quería dejar a Jimin sólo, tenía miedo de que algo le pasara mientras estaban lejos. Además de que como JiMin había estado un poco mal desde aquella mañana, mucho menos iban a ser las ganas de alejar a Jimin de su lado.

Los dos se encontraban en el patio del gran hogar, Jimin estaba de espaldas a un gran árbol, donde ambos planeaban hacer una casita para que sus dos pequeños jueguen allí, y Yoongi se encontraba al lado de su casi esposo, recostado y con la cabeza en uno de los muslos de este mismo. Acariciaba cariñosamente y a veces les hablaba lentamente, tratando de que Jimin no sintiera mucho dolor.

Yoongi estaba orgulloso de su novio, soportaba las contracciones, las patadas y el dolor extraño que sentía desde la mañana. Para Yoongi, Jimin era una persona muy valiente.

Jimin se sentía bien, pero con sentimientos encontrados.

Todavía no se creía que en menos de de unas horas más se casaría con el amor de su vida, su primer amor, su primer romance y su primer noviazgo, además, ahora podía agregar a su lista que Yoongi sería su primer y último esposo.

Yoongi fue, es y será lo primero y último en todo.

Emocionado, Jimin besó con pasión a Yoongi, entrando su lengua en su cavidad bucal. Le arrancó varios jadeos con sus mordidas a los finos labios de su Yoonie.

Para este tiempo, Yoongi ya se había levantado un poco ya que estaba acostado, lo hizo por que notó que Jimin estaba incómodo con aquella posición, por el gran vientre, pero el menor no dejaba señales de que se quería separar de los labios suaves del mayor.

Las dos lenguas jugaban entre ellas, tomando contacto entre medio de los dos labios, dejando finos caminos de saliva en las barbillas de los dos enamorados.

Cuando se separaron, por parte de Yoongi, sus respiraciones estaban irregulares, saliva por todo su mentón y barbilla.

-- Te amo Yoongi.-- Susurró Jimin, quitando el dulce apodo que siempre usaba, dejando notar seriedad.

Jimin hizo el ademán de acercarse nuevamente a Yoongi, buscando otro beso apasionado, cosa que no le fue permitida ya que Yoongi se lo impidió poniendo dos de sus dedos en los labios de su pareja.

-- Debes de controlar tu respiración primero Minnie.-- Le sonrió suavemente el mayor.

De verdad Yoongi quería otro beso así, hace tiempo que no lo hacían, pero debía de pensar en Jimin. Su respiración era más trabajosa ya sea por tener un vientre enorme o que de verdad le cueste respirar.

Él, en cuestión de segundos, pudo normalizar su respiración, en cambio Jimin seguía con la respiración irregular.

-- Pero Yoonie~.-- Se quejó mientras hacía un tierno puchero.

-- Primero tu respiración Minnie.-- Acarició la sonrojada mejilla.

-- Yo quería otro besito.

-- Ya lo tendrás después.-- Besó la mejilla contraria a la que acariciaba.

-- Yoonie.-- Le llamó bajito.

-- ¿Sí, mi amor?.-- Le miró fijamente.

-- Los bebés se mueven.-- Hizo una mueca de dolor, cada vez esos pequeños se movían más.

-- A ver.-- Yoongi se acercó al vientre, subió la camisa de Jimin lentamente y dejó un besito cerca del ombligo.-- Hola mi pequeño niño y mi pequeña niña, ¿Qué tal están?.-- Sonrió al ver cómo se marcaba el lugar en dónde sus hijos pateaban.

Yoongi ya había descubierto cómo hacer para que a Jimin no sintiera tanto dolor a las horas de las patadas.

Sólo tenía que acariciar lentamente a los costados del vientre, y a veces hasta donde los bebés atacaban a su pobre papi.

-- Creo que te dicen que están bien Yoonie.-- Jimin le sonrió en grande, dejando atrás sus ojitos.

-- Yo también lo creo mi amor.-- Besó el vientre repetidas veces.-- Mis pequeños, como creo que ya sabrán su papi y yo nos casaremos mañana, estaría yo muy feliz de que no hagan que papi esté incómodo. Estoy seguro que entre los cuatro nos la pasaremos muy bien.-- Sonrió con dulzura para luego inundar de besos todo el vientre.

-- Amo cuando les hablas Yoonie, suenas tan tierno hablando con ellos.-- Acarició los cabellos negros que estaban frente a él.

-- Tengo que aprovechar mi tiempo con mis hijos lo más que pueda.-- Recargó su cabeza un poco sobre el vientre, disfrutando de las caricias.

-- Yoonie.-- Le volvió a llamar.

-- Dime, Minnie.-- Susurró adormilado.

-- ¿Ya pensaste en lindos nombres para nuestros hijos?.-- Preguntó.-- Sabes que el doctor dijo que sólo teníamos que esperar a las contracciones finales, y hasta ahora no hemos tocado el tema ni una sola vez.-- Continuó con las caricias.

-- En realidad, tengo una pequeña lista. Pero no creo que te gusten.-- Reveló inseguro.

-- Si me van a gustar Yoonie, siempre me gusta todo lo que venga de ti.-- Besó la frente descubierta de su pareja.-- Tengo una pequeña idea.

-- Dímela Minnie.

-- Qué tal si tú eliges el nombre de la niña y yo el del niño.-- Sonrió feliz gracias a su idea.-- Así hicieron mis papás, si era un niño, mi mamá lo elegía y si era niña lo elegía mi papá.-- Terminó de contar su pequeña idea.

-- Sería una buena idea Minnie, hagamos eso.-- Dijo Yoongi, esta vez, seguro.

-- Yoonie.-- Le llamó por tercera vez.

-- Dime, Minnie.-- Yoongi no pudo evitar sonreír.

-- ¿Ya me puedes dar mi beso, Yoonie?.-- Preguntó con voz suave e inocente.

-- Sí Minnie, todos los que quieras.

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