Capítulo 59

437 56 0
                                    

La risa de Mike inunda mis oídos y no puedo evitar reír también. Scott me mira con sorpresa pura en sus ojos, lo que me hace sentir aún más poderosa. Le tiendo mi mano y acepta que lo ayude a levantarse. Hace una mueca de dolor y tengo que reprimir la sonrisa que amenaza con aparecer en mi rostro.

—Esa es mi aprendiz.

Cassandra sonríe abiertamente y con puro orgullo en sus ojos.

—¡Esa es mi sobrina! —festeja Mike mientras aplaude.

Scott voltea los ojos y se acerca a mi oído.

—¿Cariño? —pregunta sonriente y siento como mis mejillas se calientan.

Estoy más que segura de que lo dije de tal manera en la que sólo sus oídos pudieran escucharme, pero aun así me siento nerviosa e incluso un poco avergonzada.

—Lo siento, me salió sin pensar…

Scott me da un pequeño beso en los labios para callarme.

—Me encanta.

Sus ojos están más oscuros de lo normal y escucho como Mike se aclara la garganta.

—Sigan entrenando, los veo al rato.

Se despide de Cassandra con un beso corto. Jamás lo había visto mostrar afecto en frente de mí y al parecer se dio cuenta, puesto que se va rápido y sin mirar atrás.

El entrenamiento fue bueno, Scott me enseñó varios movimientos para defenderme de espaldas y es irónico, ya que fue en esa posición en la que le gané, pero el aprender siempre es bueno. Compartimos todos los conocimientos de lucha entre nosotros y me alegró saber que tenemos otra cosa en común,  somos buenos peleando.

—Chicos creo que es todo por hoy, Mike me escribió para decirme que vendrá en quince minutos. Yo debo ir por Mary al colegio. Cámbiense y esperen aquí.

Ambos asentimos, Cassie toma su bolso y tras despedirse de nosotros se marcha. Tomo mi mochila y me encamino a los vestidores, siendo consciente de que Scott viene detrás de mí con una sonrisa de oreja a oreja.

—Motivo de esa sonrisa, por favor.

Me adentro más al vestidor de mujeres y cuando noto que estaba entrando conmigo, lo miro entre sorprendida y nerviosa. Es tarde y ya no hay nadie en ésta parte del edificio, pero aun así, mi estómago se aprieta con fuerza y sé bien lo que va a pasar.

—Tú —contesta con tranquilidad.

Sin darme tiempo a echarlo de dicho vestidor, me empuja contra los casilleros donde las agentes guardan sus pertenencias y me besa. Rudo y sin piedad, su lengua busca la mía con sutileza, mientras sus manos se posan sobre mis pechos apretando con fuerza. Un placer doloroso atraviesa mi cuerpo y gimo contra sus labios. Comienza a subir mi blusa, el roce de sus dedos sólo logra estremecerme más y siendo honesta, estoy perdiendo el control de la situación.

—Scott… Para.

Él se separa al instante y por eso me siento tan segura a su lado. Scott jamás va a hacer nada que yo no quiera.

—Lo siento…

Su respiración está agitada y tiene los ojos cerrados con fuerza, como si estuviera luchando internamente para controlarse. Me acerco a sus labios y le doy un beso dulce. Suspira mientras sus manos acarician mis mejillas y las mías se enredan en su cabello.

—Me gustó —admito avergonzada una vez que rompimos el contacto.

—Puedo hacer que te sientas el doble de bien —me asegura con un guiño y le creo—. Cuando estés lista, preciosa.

Muerdo mi labio inferior, la idea era increíblemente tentadora, pero sé que éste no es el momento y menos aquí.

—Gracias.

Deposita un beso corto en mi frente para luego dirigirse a su parte del vestidor a cambiarse. Lucho con todas mis fuerzas para no ir tras él y pedirle que me haga todo lo que desea.


***


Me tiro en la cama luego de una ducha relajante, me duele cada músculo del cuerpo, puesto que hace semanas que no entrenaba así, pero se siente bien estar de nuevo en el juego y por más masoquista que suene, no hay lugar como el hogar.

Mi teléfono vibra en la mesa de noche y contengo todo el aire de mis pulmones. No quiero mover ni un músculo adolorido para tomar el aparato, que últimamente era culpable de mis crisis nerviosas. Suspiro y lo sujeto con mis dedos temblorosos, el nombre de Scott se convierte en la luz al final de mi túnel.

‘¿Duermes? Quiero hablar contigo’

No contesto, simplemente lo llamo.

—Hola, Diana —contesta al primer tono.

Su voz suena agotada y me lo imagino acostado igual de adolorido que yo.

—Hola. —Sonrío como idiota y agradezco que no pueda verme.

—Estaba pensando algo. —Lo escucho reír y me pongo un poco ansiosa—. Yo no te he preguntado algo y lo he estado presumiendo todo este tiempo, nena.

Maldición, parece que una bomba va a estallar en este momento.

—¿Qué cosa? —pregunto más nerviosa que nunca. ¿Por qué tanta vuelta?

—No te he pedido que seas mi chica —suelta de repente y siento como la sonrisa vuelve a surcar mi rostro—. Digo, yo no le pondría etiqueta a esto, sabes lo importante que eres para mí, pero necesito saber qué quieres ser completamente mía.

Parece incluso más nervioso que yo con cada palabra que pronuncia.

—Scott. —Él contiene la respiración del otro lado de la línea—. Es que yo ya soy completamente tuya —le digo de verdad.

Jamás había conocido ni había imaginado conocer a alguien como él. Scott ha cometido muchos errores con respecto a nosotros, pero sé que fue porque él no estaba seguro de aceptar que estaba enamorado de mí y también puedo decir que mi problema también fue ese; pero una vez que superas todos los obstáculos puedes ser plenamente de una persona.

—Las ganas que tengo de besarte ahora son inexplicables —gruñe con deseo en su voz.

—También quiero eso.

Muerdo mi labio inferior. Deseo tenerlo junto a mí ya mismo.

—Entre otras cosas… —Su tono de voz se pone grave y mi cuerpo comienza a calentarse—. Descansa preciosa.

Lo escucho reír, es como si él pudiera ver las reacciones que me provoca.

—Te veo mañana.

Me acomodo bajo las mantas aun sonriendo.

—Te amo, nena. —Mi corazón salta dentro de mi pecho—. Por cierto… soy completamente tuyo Diana, siempre será así.

Cierro los ojos, es lo más lindo que jamás me han dicho. Espero que esta sensación de seguridad y amor que me hace sentir sea así siempre.

—Te amo —susurro en modo de despedida.

Me encantaría dormir en paz sabiendo que tengo una buena relación y mi familia está bien, pero muy en el fondo sé que hay alguien afuera intentando arruinar mi vida y temo más por mis seres queridos que por mí.

¡No se pierdan el próximo capítulo! Va a estar bueno, lo garantizo 🤗 espero que disfruten éste💖 gracias por leer 😀...x

Un Pequeño  Cambio De Planes ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora