Cigarettes

[020]

Freddie despertó por el cantar de los pájaros, se estiró mientras bostezaba, lamiendo sus labios al acabar con la acción, miró hacia sus amigos, los cuales seguían durmiendo. Miró al techo un momento, el sentimiento de insertidumbre recorrió su cuerpo. Aquella sensación carcomía la mente del pelinegro, quien en un intento de disipar los malos pensamientos, buscó el reloj. Al encontrarlo, vio que eran las diez de la mañana. Se levantó de la cama suspirando, yendo hacia la escalerilla que daba al piso inferior. Cuando ya logró abrirla, caminó en dirección al baño. Al llegar a este, entró. Mientras tanto, en la habitación de John, Roger raramente había despertado a los segundos. No tenía nadie con quien hablar, por lo que se sentó, agarró su almohada, y la aplastó contra el rostro de Deacon, el cual estaba al lado de él. Este despertó debido a la falta de aire.
—¡¿Qué te pasa?! —dijo alterado.
—Buenos días, dormilón. —Roger se volvió a acostar en su cama, soltando una risita.— Dormías como un bebé. —musitó enternecido.
John suspiró mientras rodaba sus ojos. Conversaron un rato, gracias al ruido que emitían, el más alto de allí despertó. El trio volteó al ver que la puerta que daba al ático se abría. Era Mercury.
  —Por fin despiertan. Ya estaba muriendo aquí solo. —Freddie resopló, llamando la atención de sus compañeros.
  —Buenos días también para tí. —Brian se sentó, arreglando su cabello, bostezó, haciendo que Deacy imitara su acción.
—Ajá, eso mismo, ahora, ¿bajemos a desayunar? Estoy muriendo de hambre —Roger se levantó flojo de la cama, pero la idea de ir a comer lo tentaba lo suficiente como para hacerlo moverse de su lugar. Los demás siguieron al vocalista, quien lideraba la fila en la que iban, siendo él el primero de todos. Luego de terminar su desayuno, volvieron y cambiaron sus ropas, no sin antes haberse bañado, una vez listos volvieron al lugar de ensayo.
  —Muy bien nenitas, hoy vamos a hacer todo lo que no hemos hecho los días anteriores: —Freddie sintió la mirada de sus compañeros en su espalda, él solo hizo una pose al darse cuenta que era el centro de atención.— trabajar. No hemos hecho mucho, y si no queremos pasar vergüenza en televisión, debemos esforzarnos más.
  —¿Alguien ha visto mis baquetas? —Roger interrumpió el discurso del cantante, haciendo que este se sobresaltara por la pregunta.
  —¿Cómo que no sabes dónde están tus baquetas, Taylor? Busca de nuevo. —el pelinegro regañó al rubio, quien volvió a buscar entre sus cosas, sin encontrar nada.
  —Te digo que no están, tonto. —Roger se cruzó de brazos, mirando enojado a Freddie— Si quieres ven y búscalas tú.
  —¿Y qué pasa si las encuentro?
  —Te las meto por donde más te duela, ¿te parece? —el vocalista se volteó dispuesto a pelear, desafiando a Roger con la mirada. Se sentía lo suficientemente estresado como para golpearlo.
  —Chicos, no empiecen a estas horas de la mañana, ¿quieren? —John se interpuso entre las peleadoras miradas que se lanzaban Roger y Freddie— ¿Por qué no simplemente ayudamos a Roger a buscar sus baquetas y listo?
Freddie, insatisfecho con la desición, se puso a buscar las baquetas de su amigo junto con los demás.
  —Creo que las perdiste, Rog. —Brian rascó su nuca luego de buscar por tercera vez en los estantes del garage.
  —¿No las habrás llevado a la habitación ayer antes de dormir?, —John se levantó del piso, revisando por debajo de los muebles— porque ya es casi imposible que estén aquí.
  —No, no duermo con mis baquetas. —Roger mordió sus mejillas por dentro, esperando que Freddie no le lanzara una flecha envenenada.— Agh, Freddie me va a matar.
  —Pues sí, ¡eso haré si no las encuentras! No sé qué harás, Roggie. —Freddie arregló su cabello, volteando hacia Roger— Pero vamos a tocar, con o sin tus baquetas.
  —Sabes que no va a poder, Fred —Brian intentó calmar a su amigo.
  —No es mi problema, Brian, que él se las arregle. —Freddie miró por última vez a Roger— Resuelve esto rápido. Voy por un vaso de agua.
Todos miraron cómo Freddie dejaba el cuarto, se quedaron en silencio un rato hasta que John suspiró, ciertamente frustrado.
  —¿Podríamos intentar con cucharas de palo en vez de con baquetas? —Roger y Brian miraron a Deacy al mismo tiempo, luego se miraron entre ellos.
  —¿Estás bromeando? —Roger aún no se creía lo que sus amigos habían decidido por él.— Espero que estén bromeando. —sabía que sus amigos no la hacían cuando vio que John se apresuró en ir a buscar las cucharas.— ¿Me ve la cara de cocinero o algo?
Cuando volvió con ellas, se las entregó al rubio. Este suspiró sin esperanzas de que la idea resultara, sin embargo, funcionaron casi tan bien como baquetas reales.
  —Quién lo diría, resultó. —Brian se sorprendió por el nuevo uso que les estaban dando a los cubiertos.— Como sea, iré a buscar a Fred.
  —¡Oí que hablaban de mí! —Freddie apareció, luego de terminar de decir aquella frase, bebió un sorbo de su vaso de agua.
  —Genial, te teletransportas. —dijo John en su inocencia.
—¿Podemos empezar a tocar? —preguntó el baterista.
Freddie asintió, se dirigió a su piano, se sentó en el banco del que disponía su instrumento y carraspeó aclarando su garganta. Empezó a chasquear, sin embargo, no pudo continuar, siendo interrumpido por el estruendoso sonido del teléfono.
—¡Yo voy! —John se apresuró en dejar su bajo junto a su respectivo amplificador, yendo a atender el teléfono.
—¿Quién va a ser a estas horas de la mañana? —Brian habló entre suspiros mirando a Mercury de reojo, se veía sumamente molesto y estresado. Prefirió dejar de hablar y mantener el silencio hasta que Deacy volviera.
Freddie marcaba un ritmo con su pie bastante rápido, haciendo incómoda la estancia en el garage. Roger miraba de reojo a Brian, buscando algún tipo de comfort en la situación en la que estaba, obteniéndolo luego de unos minutos de estarlo mirando. El baterista no puedo aguantar sacar unas risas que se preocupó de callarlas lo más posible al ver al vocalista de esa manera. Brian le siguió el juego imitando las acciones de Freddie hasta que este se dio cuenta, pero antes de que este le dijera algo, vieron la figura de John entrar al garage de manera silenciosa y tranquila, aunque se notaba que estaba nervioso.
—¿Quién era? —Taylor dejó los cucharones en la caja de su batería, recargandose levemente en el instrumento, esperando una respuesta por parte del menor de los cuatro.

AMIGXS 1000+ LEÍDAS LOS AMAMOS TANNNNNTO DEBIDO A ESTO ESTAREMOS SOLTANDO DOS CAPÍTULOS SEGUIDOS EEEEE 💕💕💕💕 SE MERECEN EL SOL LA TIERRA Y LA LUNA Y TODO AAAAA❤️ amikes, los amo un montón. A todo esto, ¿qué dirían si les digo que Cigarettes tiene pre-cuela? 🎊
Si no se lo creen, pues allá ustedes JEJEJEJEJ❣️y esoopppppp espero que hayan disfrutado el capítulo:( also, les gustaría que publicáramos otra historia? Si es así, de qué? Ya ahora si xao