Capítulo Sesenta y Tres.

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NOTA SÚPER IMPORTANTE AL FINAL. 

Capítulo Sesenta y Tres:

_____ P.D.V:

Me desperté con el molesto ruido de mi despertador. Todavía con los ojos cerrados, le pegué al molesto aparato logrando que su molesto sonido se detuviera. Suspiré, y abrí los ojos. Cayendo en la realidad que estaba en mí cuarto. Fruncí el ceño, ¿Cómo había llegado yo ahí? Lo último que recordaba era que me había quedado dormida con Luke en el sillón, pero no recuerdo haberme levantado y haber venido a mi habitación. Tal vez me levanté a la mitad de la noche y me vine a mi cuarto, solo que como estaba tan cansada no lo recuerdo. <<Quizá nos trajo Luke>> Mi corazón comenzó a palpitar fuertemente contra mi pecho cuando pensé eso. Podría ser pero… No, seguramente me vine yo por mi parte.

Me paré de la cama, y cuando estaba por ir al baño para realizar mi rutina de todos los días, noté que había un papel sobre mi cama, y debajo de este, estaba, la chaqueta de Luke…

Con los ojos abiertos como platos, agarre la nota, la abrí, y leí lo que decía dentro de esta.

Esto es tuyo.

El rubio.

<<Ves, yo tenía razón, nos trajo Luke>>

Sonreí de oreja a oreja, volví a doblar la hoja en dos, y agarré la chaqueta de Luke. Apenas la tuve entre mis manos, el perfume del rubio invadió mi nariz. Esta vez, el olor era más fuerte, pues había usado la chaqueta ayer. Sonreí de vuelta. Puse la chaqueta encima de la silla que está enfrente de mi escritorio, decidida a que iba a usarla hoy.

~•~

Cuando terminé de lavar mis dientes, de bañarme, comencé a elegir la ropa que me iba a poner el día de hoy.

Abrí el armario, y elegí una remera blanca manga corta con la palabra “Dream” en letras grandes y negras. Una falda negra, y mis converse negras. Obviamente, después iba a ponerme la chaqueta de Luke.

Sequé y peiné mi pelo rápidamente, tenía hambre y quería tener tiempo para desayunar tranquilamente. Por esa razón no me molesté en hacerme un gran peinado, solo dejé mi cabello lacio y listo.

Me deje puesto el collar –que no me saco nunca- que me regaló Luke en mi cumpleaños, y el primer día que me dijo que me amaba. Ese día qué, fue muy especial para mí.

Lo único de maquillaje que me coloqué en la cara fue un poco de labial rosa con brillos.

Guardé en mi bolso negro mi celular, mis auriculares, dinero, y las llaves de mi casa. Agarré la chaqueta de Luke, y salí de mi cuarto.

_____: Buenos días. –Dije sonriente mientras me sentaba al lado de Eddy, quien comía una tostada con manteca mientras tomaba jugo de naranja.

Eddy: Buenos días hermanita. –Dijo con la boca llena de tostada. Mi mamá apareció con una ensalada de fruta, -que era mi desayuno preferido cuando era pequeña- y un jugo de durazno entre sus manos. Me saludó como hizo mi hermano, y luego me saludó mi papá.

_____: ¿Cuándo llegaron anoche? –Mi mamá miró el techo pensativa.

Mamá: A eso de las 8:00 PM. Cuando llegamos ya estabas dormida, y por eso no te despertamos.

_____: ¿Estaba en el sillón? –Pregunté, a ver si era verdad que Luke me había llevado a mi cuarto, o me fui sola. Mi mamá negó con la cabeza.

Eddy: ¿Por qué?

_____: Nada. –Sonreí y tomé un sorbo de mi jugo.

I know I can save you {Luke Hemmings}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora