I know I can save you {Luke Hemmings}

Capítulo Setenta.

Capítulo Setenta:

Cerré mis ojos y me dejé llevar, temiendo que todo fuera un sueño, y temiendo luego despertar. Aunque inmediatamente supe que no era un sueño, en el momento en que Luke se separó de mí por falta de aire y me miró a los ojos, todavía con sus manos en mis mejillas. Sonreí al darme cuenta que era real, todo fue real; el beso mientras bailábamos, mis lágrimas, las palabras que le dije luego de correr, cuando me besó, después de decirme que también me amaba.

No podía hablar ni hacer nada, seguía en estado de shock, por todo lo que había pasado. Los chicos tenían razón, también Eddy; Luke sentía lo mismo que yo, y ahora, por fin, los dos ya lo habíamos confesado. La pregunta actual era; ¿Qué iba a pasar ahora?

El rubio de ojos celestes como el océano, me sacó de mis pensamientos al sonreír de oreja a oreja, sin apartar su mirada de la mía. Le devolví la sonrisa, y me quedé en silencio. No sabía qué decir en ese momento. Todo lo que quería decir ya estaba dicho, y además, no me esperaba esto, así que solo me quede callada, mirando al hermoso muchacho.

Luke agarró mi mano, la entrelazó con la suya, y me miró, sonriente. Lo miré confundida, y él comenzó a caminar afuera de la escuela. No sabía a dónde nos dirigíamos, pero no me importaba, porque estaba con él.

Luke: Fue mi primer beso. –Murmuró, rompiendo el silencio, y ganando mi atención.

_____: ¿Q-Qué? –Tartamudeé, confundida, dejando de mirar mis pies, para mirarlo a él. Mordió su labio inferior, y noté como su mano seguía un poco temblorosa.

Luke: Cuando me besaste, ahí adentro… Fue mi primer beso. –No podía creerlo. No podía ser que un chico como él nunca había besado a nadie antes que a mí.

_____: ¿Enserio? –Susurré, incrédula. El chico asintió, cabizbajo, y sonrojado. Alzó su mirada, y sus ojos brillaron, gracias a que la luz de la luna se reflejaba en ellos. Me acerqué a él, y uní mis labios con los suyos. Suspirando al hacerlo. Era el mejor sentimiento que sentí en toda mi vida. Por fin me sentía querida de verdad, sentía que él, era el muchacho al que iba a amar, toda mi vida.

~•~

Sonreí cuando vi a dónde me había llevado Luke.

Me guió por el parque, hasta que llegamos a donde había un lindo árbol que movía sus hojas lentamente gracias a la fría brisa que había en esos momentos. Nos acostamos debajo de él, y suspiré mientras mirábamos las bellas estrellas en el oscuro cielo, con algunas nubes grises.

Sentí como Luke volvía a entrelazar mi mano con la suya, y comenzaba a jugar con mis dedos. Luego sentí como besaba mi cabeza y apegaba su cuerpo más al mío. Suspiré. Esto era mejor a lo que siempre soñé. Y no podía estar más feliz de haber besado a Luke en ese baile escolar.

Me pregunto qué habría pasado si no lo hubiera hecho.

Luke: Sabes, hace mucho que descubrí lo que siento por vos. –El chico rompió el cómodo silencio, al mismo tiempo que llenaba mi cuerpo de escalofríos al hablar cerca de mi oído.

Desvié mi mirada de las brillantes estrellas, para mirar al joven que había robado mi corazón a los ojos, los cuales tenían su mirada fija en mí; y me ponía muy nerviosa. Sentí como el pulso de mi corazón iba cada vez más rápido al paso de los minutos.

_____: Yo también. –Murmuré, tartamudeando un poco.- Solo que, tal vez nos tardamos un poquito. –Sonreí, a lo que Luke rió y mordió su labio.

Luke: Solo un poco. –Rió y yo también solté una leve carcajada.- Pero mejor tarde que nunca, ¿No?

 _____: Sí… -Miré mis dedos, a los que Luke acariciaba.- Luke. –Llamé su atención, haciendo que me miré a los ojos, haciéndome temblar.- ¿Por qué te separaste de mí cuando te besé? –Pregunté, queriendo sacarme la duda. El muchacho suspiró, y miró al cielo.