Shane Foster || El sexy mujeriego ©

8: El refugio para borrachos.

(Editado)

Cameron Davis:

—Sam vomitaba como loca muy cerca de la piscina... —empiezo a relatar y todos me miran con suma atención. ¡Diablos! Todos se ven fatal, recuerdo perfectamente todo y me causa una gracia enorme que ellos no. Los pobres no recuerdan nada.

Flashback:

Me sentía tan feliz en este momento, que no podía borrar la sonrisa de idiota que tenía en el rostro y todo gracias a que estaba con Sabrina, la chica que me gusta.

Amigos ella es tan perfecta, o por lo menos para mí lo es... Creo que fue amor a primera vista y si, admito que al principio solo me llamo la atención su belleza externa pero no me equivoque en elegirla después de todo, ya que no solo su físico es perfecto si no también su personalidad, tiene un corazón enorme y mientras más la conozco más me fascina esa mujer.

Pero mejor dejo de hablar de ello porque puedo causarles diabetes o eso me dicen seguido, lamento mucho si hice subir su azúcar no fue mi intención, de veras.

En fin... Le debo una enorme a Shane, gracias a él esta ha sido la noche más increíble. Bueno, también he tenido otras, pero ustedes me entienden, ¿no? Vuelvo a la realidad en el momento en que escucho esa voz angelical que tanto me gusta.

—Mira, Sam esta vomitando—Sabrina señala a la rubia, mientras ríe como loca, ya esta un poco ebria—. Iré a ayudarla.

Se levanta y va hasta donde Sam se encuentra, veo como Hunter y Hudson pasan corriendo al frente de mí.

—¡Yo no la bese a propósito! ¡Ella misma me busco!—grita Hunter.

—¡Ella pensó que tú eras yo! —le grita Hudson de vuelta, va corriendo detrás de su hermano.

—¡Pero si yo soy más guapo!

Y así se van dentro, desapareciendo de mi vista. Owen, Caleb y Shane se acercan a mí, todos mojados, acaban de salir de la piscina.

—Camaroncito, ven... —me dice Shane—. Haremos un concurso.

—Queremos que seas el juez —esta vez quien se dirige a mi es Owen.

—Ganare yo caramoncito —tartamudea Caleb sonriente—. Ya lo verás.

Rio al escuchar como hablan, están bien borrachos eso se puede notar.

—Ardaleeee, ven... —suplica Shane.

—Sí, sí, sí —ruega Caleb—. Ven, ven, ven, Camalon, ven.

Suelto una carcajada sonora, estos amigos que yo me gasto... No sé como termine siendo parte de un team tan loco, ellos están dementes.

—Okay, vamos pues.

Los sigo hasta donde antes estaba Sam vomitando, ella es la más borracha hasta ahora o eso es lo que puedo notar. Por suerte ya se ha calmado y no esta vomitando. Sabrina y ella al vernos nos siguen el paso, llegamos a una esquina donde esta Ivie sentada en el césped en posición de flor de loto, Shane se sienta a su lado y ella suelta una risita al ver la acción del castaño.

Mmm, sospechoso.

Owen toma asiento al otro lado de la pelinegra, después le sigue Sam y luego Sabrina. Por mi parte, yo me siento junto a ella y junto a mi Ethan, que llega segundos después de vernos.

—¡Hey! ¡Gemelos cavernícolas, vengan aquí! —grita Shane para luego quejarse, ignora el dolor que supongo le produce gritar y continua—. ¡Ya comenzamos con el concurso!