24: Oh, cállate pervertido.

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Shane Foster:

Me dirijo con Mackenzie al estacionamiento, en busca de mi auto. No nos iremos de la fiesta, la follare ahí dentro. Saco las llaves y oprimo el botón que abre las puertas, mi auto suena diferenciándose de los demás que están en silencio absoluto. Abro la puerta que dan a los asientos traseros, tomo a la castaña por las caderas y la tiro en el cojín con un poco de brusquedad.

Empiezo a besarla cuando estoy con ella y poco a poco su espalda va tocando el asiento por completo. Cierro la puerta y me concentro en ella. Muerdo sus carnosos labios y recorro su cuerpo con mis manos, Jerry se va emocionando a medida que las cosas se calientan, los pequeños suspiros de Mackenzie me hacen saber que le gusta lo que hago. Mi mano se introduce por el top de su disfraz y acaricio el borde de sus senos con delicadeza, un suave gemido llena el angosto espacio.

Me separo de ella para buscar el condón, reviso mi bolsillo trasero pero no encuentro nada. Quiero golpear mí frente al momento en que recuerdo que no traje ni un condón conmigo. Los deje en mi otra ropa, por supuesto no pensé que follaria aquí.

─No tengo condón.

Mackenzie me toma por la camina obligándome a caer encima de su cuerpo, me besa y le correspondo por unos minutos antes de volver a separarme. Una queja brota de su boca cuando lo hago.

─No tengo condón ─vuelvo a repetir.

─No importa, me tomo la pastilla mañana.

Intenta besarme de nuevo pero me niego.

─No confió en esa pastilla, o en que en verdad te la tomes.

─¿Qué estas tratando de decir?

─Que no follaremos sin condón.

Suelta un bufido y se remueve para ser liberada, pero no lo permito.

─Quítate, no vamos a follar así que iré a la fiesta de nuevo.

Una sonrisa arrogante surca mis labios ─No te enojes amor.

─Que te apartes Shane.

Una risa se me escapa y recibo su mirada recriminatoria.

─Nena, puedes calmarte. Iré a buscar un condón y regreso pronto.

Entrecierra los ojos ─¿Dónde lo conseguirás?

─Tengo amigos, ¿recuerdas?

Le doy un pequeño beso y bajo del auto, guardo las llaves y me dispongo a marcharme, no voy a ignorar esta calentura, debo follar esta noche. Espero que alguno de los muchachos tenga un preservativo.

─¡No tardes! ─dice cuando me estoy alejando.

Ya dentro de la fiesta intento encontrar a alguno de los cavernícolas, pero no lo consigo. Me acerco a la pista de baile donde fue la última vez que vi a Owen y a Samantha, choco con varias personas ebrias y sudadas en el proceso pero no consigo ver a ninguno del Team, cuando estoy a punto de dar la vuelta una silueta que conozco perfectamente llama mi atención.

Ivie maniática Jackson esta justo a unos pasos de mi, la pequeña está discutiendo con un tipo mucho más grande que ella, aunque no me sorprende ella es diminuta. Observo con curiosidad la escena y decido acercarme para preguntarle por alguno de los chicos, o por su novio. Cuando doy unos pocos pasos el mastodonte la sujeta con brusquedad del brazo, ella intenta zafarse pero no lo logra. Mis alarmas se activan y me aproximo con rapidez a donde están ambos.

─¡Suéltame maldito! Me haces daño ─le gruñe Ivie.

─Tu vienes conmigo ─dice el imbécil.

Shane Foster || El sexy mujeriego ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora