Capítulo 78⚓

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Me encuentro sentada en uno de los jardines del colegio. No me sienro bien como para almorzar con mis amigas. Después de lo que me dijo mi padre, no, me he sentido como la mierda y lo sigo sintiendo.

Nunca pensé que las palabras provocaban más dolor que los hechos. Simplemente eran como cuchillos muy afilados que iban directamente a tu corazón. Pensé que ya me había hecho más fuerte, pero no. Creo que no era tan ruda como pensaba, o quizás sí, lo era, pero no todo el tiempo. Había construido una barrera en mi corazón para que nada me afectara, para que nadie pudiera hacerme daño, y sí, ha había funcionado durante todos estos diecisiete años y algunos meses, pero luego cayó.

Nick se había encargado de quitar esa barrera, ese corazón de hielo que tanto me había esforzado por mantener. Todo lo mande a la mierda por él. Aquí es donde pienso si decirle "te quiero" fueron las palabras correctas pero en un momento inadecuado.

Paso una mano por mi cabello en señal de frustración.

—Mierda —digo. Mi espalda se apoya en el tronco del árbol.

Cierro los ojos, al menos por dos minutos cuando alguien me habla.

—¡Aquí estás!—dice Ryan, acercándose hacia mí.

—¿Qué pasa? ¿Qué insecto te picó para que quieras hablar conmigo?—pregunto.

—Nada, sólo quería pasar un momento contigo y hablar—dice el chico de ojos verdes.

—En serio, ¿qué quieres?—siseo.

—Ya te dije que sólo quiero charlar contigo...y la verdad necesito que me des un consejo—admite.

—¿Tengo cara de ser psicóloga o algo parecido?—frunzo el ceño.

—No, pero me parece que eres la una chica de todo el colegio que puede utilizar su cerebro.

—Me halagas, Ryan Henkel. Es más creo que lo apuntaré en algún cuaderno —digo con sarcasmo y pongo los ojos en blanco.

—Hablo, en serio, Ludmila.

—Después de que me amenazaras con lo de la Policía y lo del club, no creo que sea una buena idea de que te dé un consejo porque lo más realista y sincero que te diría es: busca un precipicio, caminas unos cuantos pasos y te lanzas —le explico.

—Lo siento, en serio, yo sé que no debí amenazarte de esa manera—se disculpa conmigo.

—Sin contar que por Rob, Nick y tú—lo señalo—, hicieron que nuestro bando perdiera una bodega, un club y el dinero que habíamos ganado esa noche. Deberías de estar agradecido que no hemos ido a cobrarles a cada uno de ustedes unos cuantos billetes.

—Perdón, fue un impulso de estupidez, y la verdad me gustaría recompensártelo—dice.

—A menos que tengas unos cuantos billetes lo harás—le digo.

—Como sea, ¿podrías ayudarme también con algunos cursos?—pide.

—Está bien —pongo los ojos en blanco. No, no era mala persona en ese sentido, si alguien quería mi ayuda, yo se la proporcionaba.

De lejos puedo ver como Kelsey viene muy pero muy cerca de Nick, Rob viene detrás de ellos. La chica cabello de unicornio está tocándolo demás. No debería de hacerlo. En este momento sólo quiero ir a jalarla del cabello de unicornio que tiene.

¡Joder, Ludmila! ¿Ahora te conviertes en una celosa posesiva?

Que más da. Nick se fija en mí y en Ryan al mismo tiempo. Él camina rápidamente hacia nuestra dirección, Kelsey viene pisando sus talones.

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⏰ Última actualización: Sep 23, 2021 ⏰

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