MI HISTORIA XXX
Era Jasper, era Jasper, hasta ese momento no sabía la alegría que me daba de volver a verlo, no dude en abrazarlo y por torpe el retrocedió pero se mantuvo en pie, pensé que caeríamos y aunque Jasper no me correspondio el abrazo, estaba feliz de que estuviera en mi puerta.
— Jasper, no sabes cuánto te necesito ahora —y separandome de él suspiré agobiada— primero, he perdido días de clases, segundo me peleo con una tipa que resulta ser la hija del dios más poderoso de estos, tercero caigo de nuevo en el hospital, cuarto hay una chica que me dice que no pertenezco aquí, quinto se supone que debo ir a una clase, pero no puedo ir porque no sé dónde rayos queda y es frustrante —sí, me queje frente a los ojos de Jasper, cuando él solo guardaba silencio y me miraba perplejo o más bien asustado, cerré mis ojos con fuerza y los volví abrir— Jasper, realmente necesito tu ayuda, dime ¿Dónde queda la clase de tiro con arco? —
Y para entonces Jasper reaccionó y sonrió de lado— de verdad que te preocupes demasiado —y tocó mi nariz con su dedo índice— tranquila, con el tiempo te acostumbraras —
— no me acostumbre si a cada rato estoy en el hospital —
— es normal en los novatos —
— tú también eres un novato —replique.
— no, yo llevo años viniendo a este campamento, pero tú, es tu primera vez —
Baje mi cabeza derrotada— acabo de perder la tercera clase del día, soy un desastre —
— no la perdiste, de hecho Quirón tuvo un retraso, pero seguir justo ahora de estar yendo —cruzado de brazos y con un aura tranquila, Jasper me dió la mejor noticia del mundo.
Lo tomé de sus hombros y emocionada le agradecí— oh maldición, eso es increíble, gracias Jasper, solo debo ir y nada habrá pasado —
— sí —ese sí era lo mejor que podía escuchar, porque no venía acompañado de "peros" ni era proveniente de una noticia mala, solo era un sí de afirmación y de buena suerte— por cierto, te queda bien el traje de las cazadoras —
— gracias —y era lo único que por ahora quería escuchar.
Y al final fue Jasper quien me guío entre las cabañas en todo el trayecto.
Era increíble la paz que podía sentir ahora con Jasper en este lugar, sentía que junto a él nada podría salir mal.
La diferencia ahora era que este lugar era desconocido para mí, pero Jasper me acompañó desde Nueva York hasta aquí y creía que era el único en el que podría confiar, me resultaba terrible confiar en las personas, pero después de pasar un minotauro, un bosque nocturno terrorífico con alguien, para mí era suficiente para confiar en alguien.
Y que Jasper no indagara con preguntas sobre mí pasado, también me tranquiliza a, no tendría que cuidar mis pasos, ni mis pensamientos por él.
Jasper hoy cargaba con un jean desgarrado y una remera negra, de su cuello sobresalía un collar, algo que más bien parecía un artilugio.
— ¿Disfrutas de lo que ves? —y hasta ese momento me había embobado en su presencia y no había caído en cuenta que me miraba con una sonrisa y mirada de reojo.
De inmediato desvíe mi mirada, no dejando que viera mis mejillas ruborizarse del coraje que cargaba.
¿Por qué siempre tenía que hacerme enojar así?
— presta atención a el camino, no estaré siempre para guiarte —
— no pedí tu ayuda —le encaré con el ceño fruncido.
— parecían feliz al verme en tu puerta —
— exacto, tú viniste a mí, yo jamás me acerque a ti —entonces me detuve— desde Nueva York, siempre tan molesto —
Jasper alzó sus cejas frente a mis palabras.
— ¿Soy el molesto ahora? —retrocedió y terminó frunciendo su ceño— solo… —y cuando quiso decir algo más guardó silencio.
Desvío su mirada y en cuanto menos lo pensé, Jasper terminó moviendo sus pies y caminando lejos de aquí, dejándome varada en medio del pasto.
— ¿Soy el molesto ahora? —
Baje mi mirada, ¿No se daba cuenta que él fue él que siempre estuvo molestando? ¿Por qué ahora se portaba así?
…
Porque tal vez sin él no hubiera podido llegar aquí y no hubiera encontrado una fuente de agua que me ayudará contra Thalia… sí, creo que había metido la pata.
— ¿No quieres ir a tu clase? Rápido, no tengo todo el día —no me había dado cuenta que se había detenido a esperarme.
Aún tratándolo así pensaba guiarme a mi clase.
Parpadee un par de veces sorprendida por su forma de ser, pero no dude en seguirlo, aún necesitaba ir a la clase y con Jasper de guía… era bueno ¿No?
Fue un gran terreno que estuvimos caminando, dónde la mayoría era pasto y a lo lejos podías ver otra edificaciones, la más cercana que pude ver, fue un enorme y circular área, que bien estaba abierto una que dos personas salían de ahí, armadas y conversando con tapones y sudor en su rostro, que seguramente en algún momento también cruzaría yo y sería totalmente un desastre, el sol radiante sobre el campamento se asomaba y aunque él mar estuviera lejos, lo podía escuchar como si estuviera a un lado de él y para ser sincera, si me dieran a elegir un lugar en el que vivir, siempre elegiría una cabaña junto al mar, dónde perfectamente podría sincronizar mi paz con las olas y vivir feliz.
Era un sueño constante que aún vivía en mí, tal vez algún día, podría hacerlo.
Pero las voces de los adolescentes cercanos me indujo a la realidad de nuevo, con mucho esfuerzo visualice en nuestro frente, como pasando la mirada por Jasper, podría encontrar un grupo de adolescentes preparándose.
— ¿Es aquí? —masculle acercándome a Jasper sin mirarle. Pero él no respondió, frunci mi ceño y volví mi mirada a él, pero entonces encontré lo que estaba haciendo, se limitaba a mirar el grupo de campistas que estaban, aunque no los miraba a todos, sino a uno en especial, uno que pretendía acercarse con su ceño fruncido y un arco en mano
Era el chico de antes, el chico de espíritu oscuro y siniestro. Creo que compartiría clases con él.
— Jasper ¿Que haces aqui? Se supone que te irías ya —
— sí, pero tuve que traerla a la clase —y cuando menos lo pensé el chico dirigió su mirada a mi, una mirada insignificante hacia mí, algo que me hizo sentir escalofríos al instante.
— ah, ella —
¿Por qué lo decía como si no fuera de importancia? ¿Por qué me miraba como un ser inferior?
Negué con la cabeza quitando mi mirada del chico molesto y volví a Jasper— ¿Te irás? —
Él había dicho que se iría, ¿Por qué Jasper se iría?
Jasper suspiró y con su mirada baja y arreglando su chaqueta respondió— una situación que requiere a cierto grupo de campistas, nos reclutaron ayer en la noche —
— ¿Cómo? ¿Situación? Tipo… misiones de semidioses —
Jasper no pudo evitar sacar una risa y negar con la cabeza moviéndose de su lugar.
— ¿Por qué lo dice como sino fuera real? —el amigo de Jasper me miraba con su ceño fruncido.
— oye, de verdad eres muy peculiar, pero ya te dije que no debes decirlo de esa forma —no podía dejar de hacerlo, mordí mi labio inferior, es que aún no me lo creía.
— perdón —
Creo que aún tenía que acostumbrarme.

ESTÁS LEYENDO
PERSEA FORKS © - La Gracia de Artemisa
FanfictionCuando Persea Forks vive con su madre y sin problemas, lejos de la vida ajetreada de la ciudad y demás ocupaciones, su madre Lily, le guarda secretos de su padre. Lyra mantiene la idea de que su padre nunca apareció porque decidió vivir su vida inde...