Ouroboros

Capitulo 117: Notas

Ignav apareció en un lugar que no pudo comprender al principio.

Las paredes oscuras tenían cierta viscosidad, además de que no eran completamente duras. Eran como goma.

El lugar estaba iluminado por faroles. Parecían objetos creados por el Maestro herrero.

No había mucho que buscar. Al menos no en la sala que él apareció.

—¿Es esto realmente una prisión? no veo ninguna... —Ignav se detuvo. —No puede ser...

Para salir de esa sala había un solo pasillo que llevaba a un lugar que no podía ver bien.

Pero, en medio de ese pasillo, había un monstruo que reconoció.

Era un vampiro con una espalda ancha y con una boca en su axila izquierda.

—¿Aquí también hay vampiros? aunque... la Maldad aquí es más fuerte, más intensa —Se preparó para luchar. —No me dejarás cruzar ese pasillo. Así que, perdón si te hago sufrir. Yo necesito cruzar

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Todos decidieron regresar a la cueva donde Ignav se quedaba.

Bajo ninguna circunstancia iban a querer dormir cerca de vampiros y zombies.

El vampiro también regresó con ellos, pero no entró a la cueva.

Se quedó afuera, sentado en una esquina.

—¿Quién irá mañana? —Preguntó Gabbe.

—Yo podría hacerlo si nadie se ofrece —Dijo Stella.

—No. Por favor... dejen que yo lo haga... —Dijo Zero. —Podría ser... una oportunidad para mí

Stella quiso ir ya que tenía interés en ver la supuesta prisión.

Podía ser un lugar peligroso, pero no tuvo tanto miedo.

Antes que tener miedo, se sintió tranquila.

De morir, Ouroboros podía rehacer su muerte al retroceder el tiempo.

—Yo lo voy a hacer —Ouroboros se sentó en una esquina.

Nadie esperó que Ouroboros decidiera ir segundo.

—Me gustaría poner el orden en que iremos si no les molesta —Ouroboros miró al vampiro. —¿Tú también irás?

El vampiro lo miró por varios segundos antes de responder.

—No. No creer

—En ese caso, creo que será mejor así —Ouroboros decidió dar el orden. —Yo, Zero, Stella, madre y Gabbe

—¿Alguna razón en particular? —Preguntó Stella.

—Ninguna. Ni siquiera tengo un plan. Tan solo... pensé hacerlo así

Él realmente no tenía ningún plan.

Dejó que Ignav fuera primero para cumplir su capricho, pero él se iba a ofrecer.

Podía retroceder el tiempo al estar abajo.

Podía ver y obtener algo de información antes de retroceder el tiempo.

Además, no quería que Zero fuera antes que él.

Zero estaba siendo algo inestable. No quería que ese lugar lo pusiera peor.

—Yo... no creo que vaya —Dijo Gabbe. —Me quedaré aquí a esperar por ustedes

—Vamos, Gabbe. ¿Por qué te vas a quedar? —Zayra se le acercó.