La tensión en el país Raavar era horrible. Todos estaban alertas ante el imperio.
Habían podido matar a varios de ellos, sin embargo, las fuerzas principales aún estaban de pie.
A un día aproximadamente del castillo del rey, había una fortaleza preparada para detener el ataque enemigo.
Habían 4 torres con varios arqueros y usuarios de magia.
Los soldados abajo estaban preparados, tanto física como mentalmente.
Sin embargo, habían estado esperando y esperando sin respuestas del enemigo.
Hasta que aparecieron como un tsunami.
Un soldado golpeó una campana, avisando a cada uno de los soldados en la fortaleza que el enemigo estaba en la vista de ellos.
—¡Están aquí!
Los soldados tomaron sus espadas y escudos para proteger la fortaleza e impedir el avance del enemigo.
El enemigo, los cuales eran miles de monstruos, no eran capaces de superar el número de los soldados.
Del interior de la fortaleza y de unos campamentos que estaban atrás, aparecieron muchos soldados.
Todos estaban listos para detener y eliminar a los monstruos, sin embargo, los monstruos se detuvieron.
La emperatriz, montada en una quimera con apariencia de caballo, se adelantó para atacar al enemigo.
—*risas* Es momento de matar los postres
Una lluvia de flecha fue disparada hacia la emperatriz y hacia la quimera.
La quimera levantó el escudo que tenía en manos para proteger su cuerpo.
Las flechas, potenciadas con runas mágicas de fuego, golpearon a la emperatriz y a la quimera.
Algunas flechas lograron herir a la quimera, pero fueron muy pocas.
Mientras la emperatriz terminó con flechas en todo su cuerpo.
Aún así, a pesar de ser atravesada por muchas flechas, no sangró ni mostró signos de dolor.
Tan solo siguió hacia adelante.
Una runa mágica de tierra se activó, abriendo un agujero en el suelo que, a pesar de saltar, la quimera no pudo evitar.
La emperatriz saltó para no caer al agujero, pero un martillo de tierra la golpeó en la cabeza, lanzándola al agujero.
—*suspiro* Los humanos de aquí son tan tontos —La emperatriz se puso de pie.
Al mirar a su lado vio que la quimera se rompió las patas al caer.
—*suspiro* Esto es aburrido —Ni siquiera intentó salir del agujero. —Te vas a morir aquí. No puedo cargarte. Pesas mucho
En la superficie, el ejército de los monstruos decidió atacar a la fortaleza.
—La diferencia en números es mucha. Sin embargo, los números no siempre son buenos
El Guardián Jarshow sonrió ligeramente al mirar hacia arriba.
Arriba en los cielos, un grupo de Grapus comenzaron a realizar sus ataques suicidas.
Dispararon aire comprimido que acabó con la vida de ellos, sin embargo, lograron su objetivo.
Los soldados, incapaces de ver el ataque, fueron brutalmente destrozados.
Los arqueros y los magos principalmente.
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Ouroboros
FantasíaOuroboros, un peón del imperio de los monstruos, lucha en el campo de batalla con el único objetivo de sobrevivir gracias a su única habilidad.