—¡Oigan! ¡vengan todos!
Origin reunió a todo su grupo alrededor de una fogata.
Habían muchos monstruos de diferentes clases. Todos reunidos junto a El Conquistador.
Escucharlo y verlo era agradable para ellos, pero el poder estar junto a él era todo un honor.
Era una figura que, sin siquiera pedirlo, hacía que los demás sintieran la necesidad de seguirlo.
En su grupo, de más de 80 monstruos, estaba Ilussio.
Un híbrido que, aunque al principio no fue aceptado por sus ojos, los cuales eran idénticos a los del mayor enemigo que tuvo Origin, terminó estando con ellos.
Después de todo, sin importar su especie, sexo o apariencia, Origin aceptó a todos por igual.
Ninguno de ellos eran subordinados de él. Eran sus fieles amigos, sus hermanos. Aquellos que iban a estar junto a él hasta el final.
—He superado el reto de los cepher, de las momias y también de un espíritu grande llamado Kerz. Y, aunque me da vergüenza decirlo, fallé el último reto por una razón muy vergonzosa —Colocó ambas manos en su rostro. —Creo que... me enamoré a simple vista
Al principio hubo silencio, pero inmediatamente todos comenzaron a reír.
—¿Al fin te enamoraste? me gustaría verla —Dijo una ninfa. —El gran Origin, al fin se enamoró
Origin se sintió avergonzado ya que todos en su grupo se estaban riendo.
Pero, esa vergüenza desapareció al mirar a un miembro de su grupo.
Esa persona era el único que no se estaba riendo.
Estaba serio. Mirando fijamente a Ilussio.
Esa persona era un joven Ilussio.
¿Ilussio?
Después de las risas que tuvieron, todos se fueron a dormir.
Pero Origin no pudo dormir. La mirada de Ilussio lo dejó preocupado.
Por eso, decidió hablar con Ilussio a solas.
—Te entiendo. Soy el culpable de la muerte de tu abuela. Es normal que no estés feliz estar cerca de mi
—Es mejor para mí estar cerca de ti, Origin —Dijo Ilussio. Estaba sentado en una piedra. —Si me voy y decido vivir mi propia vida, alguna ninfa vendrá a matarme. Al menos estar en tu grupo me siento seguro
Era el único de la familia de Ilka con sus ojos.
Esos ojos, considerados como los ojos del mal ya que Ilka los tuvo, eran algo que todos marcaron como algo que debía ser vigilado.
Ilussio estaba siendo tranquilo y obediente, pero tenía los ojos de Ilka.
Por eso nada más, nadie se sintió seguro cerca de él.
Pero a Origin no le importó nada de eso.
—No me gusta que te traten así. Eres una víctima también. Que tengas los ojos de Ilka no significa que vayas a ser como ella. En mi opinión, eres alguien que está destinado a ser grande. Ayudar a otros, etc. —Origin le sonrió. —Estoy seguro que en algún futuro, vas a ser muy importante
El carisma de Origin era incomparable.
Era un talento natural que tenía para hacer sentir cómodo a los demás.
Ilussio, al escuchar y sentir sus palabras, miró hacia otro lado.
—Gracias
—¡Si! si quieres hablar conmigo, tan solo dímelo. Siempre estaré ahí para ti
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Ouroboros
FantasyOuroboros, un peón del imperio de los monstruos, lucha en el campo de batalla con el único objetivo de sobrevivir gracias a su única habilidad.
