Capítulo 12.

4.2K 190 9
                                    

POV Alicia.

Y por fin, el gran día llegó. Hoy se disputaba la primera carrera de la temporada aquí en Austria, en el Red Bull Ring, y adivinen quién iba a estar presente para verlo en persona... ¡yo!, ¿no es genial? La verdad es que estaba emocionada y triste a la vez, porque tenía muchas ganas de vivir un día como el de hoy, lleno de emoción, incertidumbre... pero, por otra parte, triste porque... sabía que al finalizar la carrera, la despedida sería inevitable.

Me levanté enérgica y fui directa al armario para escoger la ropa que me iba a poner. Opté por un vestido negro ajustado por debajo del pecho y holgado por la parte de las piernas que iba acompañado de un cinturón y unos zapatos de aguja plateados. Complementé el look con un bolso negro tipo clutch y un colgante con una perla. Hoy iba a ser mi último día... así que quería llevar un outfit rompedor.

Bajé al hall del hotel y allí me encontré con Jorge, quien dirigió sus manos a la boca con tan solo verme.

- Pero amiga... ¡estás espectacular!, ese vestido parece que ha sido diseñado solo para ti, verás cuando te vea Carlos, se va a caer de culo - articuló mientras nos dirigíamos a la cafetería a desayunar.

- Me he vestido así para la ocasión, hoy es un día importante - aclaré risueña mientras daba un sorbo a mi cappuccino.

El ambiente del paddock era un caos en comparación con los días anteriores, veía a los trabajadores de las escuderías correr de un lado a otro, las cadenas televisivas llevando a cabo su previo a la carrera, los ingenieros revisando una y otra vez las estrategias de cada piloto... por no mencionar la cantidad de gente que se hallaba hoy en el circuito, especialmente en las gradas. Me sorprendió ver que, aún faltando varias horas para que se disputase el GP de Austria, el público ya estuviese presente.

Mientras paseábamos por el paddock, noté como repentinamente Jorge me agarró fuerte del brazo izquierdo, como intentando no caerse por algo que había visto y le había dejado en shock. Estaba a punto de preguntarle qué le ocurría, pero rápidamente lo entendí todo.

- Alicia - dijo Lewis cuando se acercó a nosotros. Jorge seguía tenso, lo notaba por cómo me agarraba - esta carrera te la dedico a ti, tengo buenas sensaciones - comentó para volver a retomar la marcha, no sin antes dedicarme una sonrisa con los labios. Le agradecí el gesto y Jorge y yo seguimos caminando como lo estábamos haciendo, como si nada hubiese ocurrido. Bueno, para mí. En el mundo de Jorge, todo se había puesto patas arriba.

- ¿Sabes? - mencionó llamando mi atención - en ocasiones como estas me encantaría meterme en tu cuerpo, de verdad te lo digo - dijo con efusividad - tienes una suerte que ni tú te la crees - comentó esta vez como haciéndose el indignado. Yo me reí por su reacción.

En un abrir y cerrar de ojos, ya solo faltaba 1 hora para que el semáforo diera paso a la tan aclamada y esperada carrera. Jorge y yo íbamos a presenciar el acontecimiento en una especie de sala Vip compuesta de una cristalera gigante que daba al circuito, varias pantallas para seguir la retransmisión por Tv, butacas amplias y un servicio de catering extenso. Sin embargo, antes de llegar a dicho lugar, Jorge y yo decidimos dar un rodeo por delante de los boxes para sentir el ambiente en primera línea de batalla. Los fotógrafos que me acompañaban me hacían fotos y posaba de vez en cuando delante de algún coche porque me hacía ilusión, pero tampoco quería distraer al personal, aunque al final resultó imposible.

Cuando pasé por delante del box de McLaren, vi como los ingenieros y mecánicos trabajan concienzudamente con los dos coches, incluidos sus pilotos. No quería ser un motivo de distracción, así que decidí no acercarme expresamente, pero tenía ganas de desear suerte a ese piloto que ha estado metido dentro de mi cabeza toda la noche. Carlos iba vestido con su mono y llevaba ya puesto el casco. Miraba de vez en cuando a la gente pasar hasta que me fichó con la mirada. Alcé una mano y crucé los dedos para que lo viese y entendiese mi mensaje, y él me respondió con el guiño de su ojo izquierdo. Me pregunto si él estará viviendo tan intensamente todo esto que hay entre nosotros o solo soy yo que me monto unas películas que ni en Hollywood...

A falta de 10 minutos, nos dirigimos a la sala Vip, o como queráis llamarlo. En él, se hallaban otras personas que no conocía, ni siquiera me sonaban. Según Jorge, eran inversores, empresarios... en definitiva, gente con cierto poderío. Todos ellos fueron muy educados conmigo, ya que procedieron a saludarme uno a uno.

Los monoplazas empezaron a moverse tras haber estado un rato en la parrilla de salida, llegó la hora de que los pilotos llevaran a cabo la vuelta de calentamiento. Yo no comía mucho porque estaba ansiosa por ver empezar la carrera, y algo nerviosa por Carlos. Jorge, sin embargo, estaba arrasando con ella. Empezaron a llegar los coches en el orden pertinente, primero Bottas, seguido de Hamilton, Verstappen, Norris... y en la octava posición Carlos. ¿Qué se le debía estar pasando por la cabeza?

En cuanto el Williams de Latifi se colocó en el último lugar, los motores de los coches empezaron a rugir. Yo estaba atenta y expectante ante el panorama que estaba viviendo, y era tal la emoción que sentía en esos momentos, que no pude evitar levantarme de la butaca para acercarme a la cristalera. Sentía que de ese modo lo estaba viviendo más de cerca. Inevitablemente, miraba en varias ocasiones el monoplaza naranja que ocupaba la 8º posición. El semáforo se puso en marcha, 5... 4... 3... 2... 1... y los coches salieron escopeteados del lugar, dando comienzo el Gran Premio de Austria. Volví a la butaca donde estaba inicialmente y no despegué los ojos de la pantalla en ningún momento. Me lo pasé en grande viendo la carrera. Lando llevaba muy buen ritmo y las paradas de boxes que hizo Carlos fueron bastante rápidas, y eso le permitió ir subiendo posiciones. Sin lugar a dudas, la parte más destacable de la carrera fue la sanción de Hamilton por hacer caso omiso de una bandera amarilla. Todos los presentes nos sorprendimos por lo que había sucedido, y nos emocionamos por saber que Lando Norris iba a conseguir el 3º puesto y su primer podio en Fórmula 1. La carrera finalizó y salió victorioso el piloto finlandés Valtteri Bottas, seguido de Charles Leclerc y, claro está, de Lando Norris.

Sentí mucha felicidad por Carlos, porque pasó de salir en la octava posición para finalizar la carrera en la quinta, lo cual es todo un logro, ya que durante la carrera se le habían presentado diversas dificultades. "Él es increíble", pensé para mis adentros mientras suspiraba y lo veía allí abajo, saliendo de su coche y chocando la mano a los pilotos a modo de felicitación.

- Vamos al box de McLaren para ver cómo celebran el podio - me propuso Jorge exaltado.

Al llegar, todos los trabajadores de McLaren estaban eufóricos. Me encontré un panorama en el que Zak abrazaba con todas sus fuerzas a ese muchacho británico que había hecho un buen trabajo hoy. Tras festejarlo mientras se bañaba en champán junto con Charles y Valtteri, regresó al box de McLaren, donde todos le esperaban ansiosos mientras aplaudían. Yo estaba a un lado viendo todo este espectáculo que jamás en la vida había visto en persona. Lando me vio y se fue corriendo hacia a mí para abrazarme con todas sus fuerzas. Yo reí, y tras liberarme de sus brazos, le dije:

- Lando, ¡felicidades!

- Gracias Alicia - logró decir con la respiración agitada. Llevaba mucha emoción encima - ¡tú me has dado suerte, la primera vez que vienes y fíjate, eres como un talismán!

- Quién sabe - contesté riendo.

- Por cierto - mencionó Lando acercándose un poco más a mi para que nadie más escuchara - Carlos está en su motorhome... ahí lo dejo - manifestó mientras alzaba las cejas repetidas veces. Había leído mis intenciones claramente.

Le comenté a Jorge que me iba a ausentar por un rato y me fui sin pensarlo dos veces.


------------------------------------------------------------------

¡Hola! new cap<3<3<3

¿Cómo están? ya extrañaba actualizar la historia, pronto haré mi último examen y podré dedicar todo el tiempo del mundo a esta novela. Mientras tanto, quisiera agradecer vuestra paciencia y vuestro apoyo. 

En el próximo capítulo, Alicia y Carlos volverán a encontrarse. ¿Terminarán lo que empezó aquella noche en el circuito? quién sabe uwu.

Nunca me olvido de deciros que os cuidéis mucho. Os deseo una feliz semana;)

Besos, Echo. 

Diez mil estrellas (Ten thousand stars) | Carlos SainzDonde viven las historias. Descúbrelo ahora