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Ha pasado un tiempo desde que me reí tanto como esa noche.  

-¡No! ¡Por favor no me digas que eso realmente sucedió!. -Grité, limpiando las lágrimas que se habían escapado.  

Ambos asintieron frenéticamente con la cabeza, demasiado ocupados tratando de controlar su risa para responder con palabras reales.  Casi me las arreglé para calmarme, cuando Alex imitó la expresión facial de su hermano pequeño cayendo en el lago, y volví a la carcajada total.  

Después de un rato, los tres simultáneamente dejamos escapar un suspiro de satisfacción, agotados por todas las risas.  Pero en un abrir y cerrar de ojos, mi expresión facial se volvió seria.  Fruncí el ceño tan pronto como vi al rubio acercándose a nosotros.  Llevaba su expresión naturalmente fría;  sus ojos se entrecerraron mientras nos escaneaba a los tres.  Sus ojos se detuvieron en mí por un segundo, y arrugó la nariz antes de desviar su atención hacia Alex.  Se dieron un educado asentimiento, y Malfoy extendió la mano para estrecharla.  En lugar de hacer eso, Alex atrajo al rubio en un fuerte abrazo.  Me estremecí ante el movimiento repentino e inesperado.  

-¡Es bueno verte otra vez!. -Él vitoreó entre risas.  

-¿Qué estás haciendo aquí, Malfoy?. -Eso fue lo primero que dije, tan pronto como se soltaron, y saludó a Vik.

-Podría preguntarte lo mismo. -espetó en respuesta, su rostro tan confuso como el mío mientras la sonrisa desaparecía de su rostro.  Ambos estábamos mirando de un lado a otro entre Alex y Vik, quien parecía bastante divertido por la situación.  

-¡Juega bien,T/ n!. -Alex dijo en broma como si hubiera algo que aún no entendía.  -Mamá y Narcissa son muy buenas amigas. Conozco a Draco desde que tiene memoria. -explicó rápidamente, haciendo un gesto hacia Malfoy mientras lo hacía.  -Estaba tan molesta cuando decidiste no ir a Durmstrang. -

-¿Narcissa?. -Seguí, mis cejas aún arqueadas.  

-Mi madre. -dijo Malfoy, aclarando de quién estábamos hablando.  

Por un segundo, hubo una sutil sonrisa formándose en su rostro ante la mención de ella, pero desapareció con la misma rapidez.  Suspiré.  Debe haber sido mucho más amable que su hijo para que la familia de Alexei estuviera tan cerca de ellos.  

-Es bueno saber que ustedes ya se conocen, al menos. -interrumpió Vik, probablemente demasiado inconsciente para notar que no estábamos exactamente en buenos términos.  Una rápida mirada a Malfoy me hizo saber que estaba disfrutando esto tan poco como yo.  

-Pensé que podríamos pasar el rato juntos esta noche. -anunció Alex, con una sonrisa de disculpa en su rostro.  Al menos se dio cuenta.  Me recompuse, respiré hondo y luego asentí con una sonrisa en mi rostro.  

-Por supuesto. -Las cosas que hice por mis amigos ... 

-No sabía que tenías novio.-


Pasaron unos minutos antes del toque de queda y Malfoy, y yo estaba de camino de regreso a las mazmorras.  Resulta que, simplemente pudo ignorarme y concentrarse en los otros dos, hizo que la situación fuera la mitad de mala.  

-¿Qué, eres... Celoso?. -Me reí, volviendo la cabeza hacia él y levantando una ceja.  Sacudió la cabeza mientras caminábamos hacia la sala común antes de enfrentarme.  

-Lo deseas, Potter. -se burló, una sonrisa desafiante en sus labios. 

-¿Oh, en serio? ¿Por qué preguntas entonces?.-

-Simplemente no pensé que alguien tan cuerdo como Alexei podría seguir tu ritmo. -se encogió de hombros, la sonrisa todavía en sus labios.  Resoplé antes de poner los ojos en blanco.  

-No es mi novio. -aclaré, divertida por la sugerencia.  La única respuesta que obtuve fue un:

-Interesante. -murmurado, mientras él asentía para sí mismo.  

Luego, se apresuró a ir a su dormitorio y casi desapareció en él, cuando su cabeza apareció por la puerta.  

-Oh, antes de que me olvide. -comenzó. -Nos vemos aquí a la una de esta noche. -Y con eso, la puerta se cerró detrás de él.

De ninguna manera iba a hacer eso, pensé mientras me acercaba a mi habitación.  ¿Por qué habría?  Le di a Wren una pequeña sonrisa cuando entré y luego me dejé caer en mi cama junto a ella.  

-Hoy fue interesante ...-

-¡Debes estar sobre la luna!. -Dijo Wren, con una gran sonrisa en su rostro.  -Sé cuánto extrañaste a tus viejos amigos, ¿y ahora están aquí? ¿No es una locura?. -Ella pareció más emocionada que yo por un momento.  Una gran sonrisa apareció en mi rostro cuando recordé que iba a pasar un año entero con ellos, y asentí.  

-Lo es. -dije alegremente. -Es una locura. -Hablamos de ello un poco más y les prometí que los presentaría mañana.  Imaginé que se llevarían bastante bien.  Eso esperaba, al menos.  

Para cuando Wren se fue a dormir, ya eran más de las 12. Así que podría quedarme despierto para ver qué quería ese sapo, ¿verdad?  De todos modos, no significaba nada si todavía estaba despierto.  

-Solo voy a leer un poco. -mentí sosteniendo uno de los libros en mi mesita de noche y ella asintió.  

-Duerme bien más tarde, entonces. -sonrió antes de cerrar los ojos.  

Antes de irme, apagué las luces y apoyé la almohada debajo de la manta para que pareciera que todavía estaba allí.  Salí a hurtadillas del dormitorio y cerré la puerta silenciosamente detrás de mí.  Malfoy ya estaba sentado en el sofá de cuero oscuro que estaba frente a mí y a él disparó a la cabeza en mi dirección tan pronto como escuchó mis pasos acercándose.  

-Llegas temprano. -le dije mientras me sentaba en el sofá frente a él y él asintió.  

-Bueno, estaba despierto de todos modos.-

-Yo tambien. -Me cepillé un mechón de mi cabello detrás de la oreja, con los ojos pegados al suelo.  Se aclaró la garganta.  

-Pensé que una vez que no tendría que ver tu cara molesta todos los días, simplemente me olvidaría de lo que pasó el año pasado. -comenzó lentamente, con voz seria.  

-Yo también. -dije, tan bajo que mi voz era igual a un susurro.  

Ahora mi atención estaba completamente en él.  Estaba concentrado en el fuego, un cómodo silencio flotando en la habitación antes de levantarse abruptamente.  Mis ojos lo siguieron mientras se acercaba al sofá que estaba ocupando y se sentaba a mi lado.  

-Pero parece que no puedo. -Tragué saliva ante sus palabras, dándome cuenta de que todo lo que decía me resonaba.  

Una vez más, sentí esa tensión en la habitación.  La tensión de la que ambos intentamos escapar el año pasado.  Solo que esta vez, ninguno de los dos lo intentó.  

-No quiero empezar el año con esto solo para que arruine el resto de nuevo. -suspiré y negué con la cabeza.  

A eso me refería. Siempre que Malfoy estaba involucrado en algo, se convertía en un gran lío.  No estaba planeando programar todo mi año para no encontrarme con él accidentalmente de nuevo.  Él se burló.  

-¿Arruínalo?. -Levantó una ceja. -Sé lo que pasó, te gustó.-

-¿Y cómo sabes eso?. -Repliqué, mis brazos cruzados frente a mi pecho.  Una sonrisa apareció en su rostro y negó con la cabeza ligeramente.  

-Estás aquí, ¿no?. -Suspiré, sin tener nada más que decir.  -Entonces, ¿Qué es entonces? ¿Tienes miedo de que captes sentimientos, Potter?. -Su sonrisa demasiado familiar se plasmó en su rostro cuando las palabras salieron de su boca.  

-Ni en un millón de años. -Y así, mis labios aterrizaron en los suyos una vez más.

Potter?|| Draco Malfoy |Traducción.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora