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-Profesor Slughorn, señor. Acabo de descubrir a este chico acechando en un pasillo de arriba. -La voz de Filch me hizo vacilar en mi movimiento. La risa previamente compartida de Blaise y yo se desvaneció casi de inmediato.

El resto de la habitación también se quedó en silencio rápidamente.

Mi cabeza giró en su dirección, fruncí el ceño cuando vi a Draco ser arrastrado por su chaqueta.Sus ojos estaban fijos en mí, no parecía que estuviera planeando apartar la mirada pronto. Se estrecharon, se formaron pequeñas arrugas en su frente mientras me miraba.

Parecía enojado; molesto porque lo habían atrapado haciendo lo que fuera que estaba haciendo aquí.

¿Qué estaba haciendo aquí?

Rompió nuestro contacto visual, su mirada se clavó en mi cuello. Instintivamente mi mano alcanzó el collar que lo rodeaba; Uno pequeño y dorado que combinaba con mi vestido.

¿Por qué seguiría usando el collar que me dio cuando ni siquiera me estaba mirando? Se sintió estúpido, así que me detuve.

-Afirma haber sido invitado a tu fiesta.-

Ante eso, los ojos de Draco se dirigieron a Blaise, y luego de un lado a otro entre nosotros dos. Cuando se dio cuenta, Blaise me rodeó con un brazo, su mano acariciando mi hombro que estaba cubierto. Draco arrugó la nariz ante el movimiento.

-Está bien, está bien. ¡Estaba rompiendo la puerta!. -Escupió, cada vez más irritado a cada segundo. Su atención estaba completamente en mí de nuevo. Su mirada era tan intensa que sentí que podría desmayarme si no apartaba la mirada.

Sus ojos grises se clavaron en los míos, el chico que era la última vez que hablamos desapareció por completo. No me miraba con ojos suplicantes; no me estaba rogando que hiciera nada.

Pero mantuve su contacto visual, sin atreverme a dejar que ganara esta ronda.

Aunque, visiblemente me alejé de Blaise, poniendo un poco de distancia entre nosotros dos. No creo que Draco se diera cuenta de que Snape se paró frente a él y, por lo tanto, rompió nuestro contacto visual antes de que tuviera la oportunidad de hacerlo.

-Lo acompañaré fuera. -dijo Snape, su voz tan tranquila que casi daba miedo.

-Por supuesto, profesor. -El rubio asintió con la cabeza, el sarcasmo entrelazó su voz antes de golpear el hombro de Blaise con el suyo al salir. Snape justo detrás de él.

-Está bien. -Slughorn se aclaró la garganta antes de poner una sonrisa falsa. -Todos, sigan, sigan. -se rió, con la esperanza de aliviar la tensión en la habitación.

Parecía estar funcionando, ya que la mayoría de los invitados simplemente continuaron sus conversaciones previamente interrumpidas.

-¿Bueno, dónde estábamos?. -Blaise se rió entre dientes, claramente confundido por la entrada y salida de Draco.

Lo miré por un momento, escaneando sus rasgos; su mandíbula afilada, su piel suave. Y sentí que mis labios se convertían en una sonrisa de disculpa.

-Lo siento mucho, creo que tengo que ir y encargarme de algo ahora mismo. -murmuré, sintiéndome mal por eso tan pronto como las palabras salieron de mi boca. Todavía podía ver las comisuras de su boca caer, la sonrisa en su rostro desapareciendo; pero antes de que pudiera decir algo más, me di la vuelta para irme.

Su mano en mi muñeca me detuvo, y una vez que me tiró hacia atrás, estaba mirándolo directamente.

-Asegúrate de tomar la decisión correcta. -dijo. Su voz era tranquila pero definida.

No pensé que esta fuera realmente una decisión que aún tuviera que tomar.

-Lo siento. -mi voz estaba tranquila, y en un movimiento rápido, saqué mi muñeca de su agarre y giré sobre mis talones para seguir a Snape y Draco fuera de la habitación.

Los pasillos estaban fríos y vacíos en comparación con la habitación en la que estaba hace unos minutos. Escuché voces distantes, y aunque no estaba segura de que era a quién estaba buscando, las seguí de todos modos.

-¡¿Harry?!. -Me callé, un jadeo silencioso escapó de mi boca tan pronto como lo vi presionado contra la misma pared que estaba a punto de levantar con el mismo propósito exacto.

¿Cómo llegó aquí antes que yo?

Se sobresaltó, sus ojos se agrandaron cuando me vio, pero su dedo frente a su boca me dijo que me callara. -¡Shh!. -Él siseó, y luego lo escuché también.

-Tal vez he maldecido a esa Bell-girl, tal vez no lo hice. ¿Qué te importa?. -Era inconfundible la voz de Draco diciendo eso. sonaba irritado y molesto. Enfadado.

Un fuerte ruido resonó en el pasillo antes de que Snape hablara. -¡Juré protegerte! ¡Hice el voto inquebrantable!. -Dijo, su voz no tan tranquila como solía ser cuando hablaba.

-¡No necesito protección!. -Draco inmediatamente espetó, su voz áspera y cansada como si hubiera tenido la misma conversación un millón de veces antes.

Fruncí el ceño mientras trataba de seguir su conversación. Traté de entender solo un poquito de lo que estaban hablando, pero no tenía ni idea de lo que estaba pasando. Y así parecía, era mi hermano.

-¡Fui elegido para esto! De todos los demás; ¡yo!. -Siseó. -No le fallaré. No le fallaré a ella... -Su voz se calmó hacia el final de la oración. Tan silencioso, fue casi un susurro; y me alegré de haberlo entendido, en primer lugar.

-Tienes miedo, Draco. -dijo Snape, su voz mucho más tranquila ahora. -No estás haciendo esto por ti mismo, ¿verdad?. -Un pesado silencio creció en el pasillo, lo que me hizo temer que pudieran registrar mi respiración agitada.

Mi corazón estaba acelerado e intercambié una mirada rápida con Harry, quien estaba escuchando tan intensamente como yo.

-Olvidas, el señor oscuro confía en mí, Draco. Sé todo sobre tu tarea. Y por qué estás tan ansioso por hacerlo.-

-¡No sabes nada sobre mi!. -El rubio escupió, acompañada por el rizo de la ropa.

Snape se rió disimuladamente. -Créeme cuando te digo, nada le va a pasar a la chica, Draco.-

Los ojos de mi hermano estaban sobre mí de nuevo, pero estaba completamente concentrado en la conversación. Quería escuchar más, entender más. Pero en este momento todo lo que dijeron fueron palabras vacías para mí.

-No lo permitiré. Así que déjame ayudarte. -agregó Snape, y en este punto, la respiración de Draco era tan fuerte que podía escucharla desde aquí.

-Yo tampoco lo haré. -dijo antes de que unos fuertes pasos resonaran en el pasillo, alejándose cada vez más de nosotros hasta que estuvieron demasiado lejos para escucharlos.

Cerré los ojos, mi cuerpo se deslizó lentamente hacia el suelo, mi espalda todavía estaba presionada contra la pared de piedra.

Me senté en el suelo ahora, mi rostro enterrado en mis manos mientras trataba de recuperar la compostura. Mi respiración todavía era pesada y mi corazón todavía se sentía como si estuviera a punto de saltar fuera de mi pecho.

Harry no dijo nada. En silencio, me rodeó con un brazo y me acercó a él. Sé que quería decirme que tenía razón todo el tiempo; que sabía que pasaría algo como esto. Pero no lo hizo. Y estaba eternamente agradecida por eso.

-¿Estaban hablando de ti, T/n?. -Preguntó lentamente después de que un largo silencio llenara la atmósfera que nos rodeaba.

Negué con la cabeza, un profundo suspiro escapó de mis labios.

-No lo sé.-

A/ N: ¿Pensamientos?

Potter?|| Draco Malfoy |Traducción.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora