Potter?|| Draco Malfoy |Traducción.

»123«

Orgullosamente parado frente a la clase ahora, los ojos de Amycus Carrow escanearon la habitación, con una sonrisa enferma en su rostro. Asintió para sí mismo mientras su mirada volaba sobre los muchos rostros familiares.

Me pregunté si era una coincidencia que Slytherin y Gryffindor de séptimo año tomaran esta clase juntos; todas las personas a las que Harry estaba más cerca en una habitación.

De todos ellos, solo he hablado con Neville un par de veces, pero sabía que Harry era igual de bueno con Seamus Finnigan y Dean Thomas.

Deteniéndome en el pensamiento solo por un segundo más, estaba segura de que no era una coincidencia.

Mientras caminaba de un lado a otro frente al tablero, finalmente caminando alrededor del escritorio para apoyarse en él y mirarnos, esbozó una amplia sonrisa, mostrando los dientes amarillos y casi comenzando a reír a carcajadas.

-Tengo que admitirlo. -dijo con su acento cordial. -He estado esperando esto durante días. Ahora, no voy a fingir que esto será divertido para ti, pero seguro que lo será para mí.- Su voz estaba tan rasposa como siempre, ronca de la manera más desagradable.

-Tú y tu pequeño club de fans de Harry Potter. -gruñó, con los ojos clavados en los estudiantes de Gryffindor. -¿Dónde está ahora? Te dejó aquí solo; huyendo como el cobarde que es. -

Sentí involuntariamente que mis manos se cerraban en puños ante las palabras, haciendo todo lo posible por mantener la calma. Sin embargo, todo lo que realmente quería hacer era arrancarle los ojos. Uno a la vez, para que el dolor persista un poco más.

Pero sabía cuándo era el momento adecuado. Y ahora mismo, todo lo que quería era que alguien perdiera los estribos para poder convertirlos en un ejemplo. Y estaba lo suficientemente consciente para darme cuenta de eso.

Sin embargo, no todo el mundo lo estaba.

-Eso es, hasta que lo matemos, por supuesto.-

Cerré los ojos con fuerza, mis nudillos se volvieron blancos con la fuerza con la que apreté mis propias manos en puños ahora. Tratando de respirar profundamente y calmarme, me tragué mi ira.

Suficiente para mantenerme en mi asiento, al menos.

Desafortunadamente, Neville no tenía tanta fuerza de voluntad, así que solo unos momentos después, escuché una silla arrastrarse con fuerza por el piso de madera mientras se levantaba rápidamente.

Como las mías, sus manos estaban cerradas en puños. Su figura más alta se movía hacia Amycus, aunque uno de sus amigos lo detuvo antes de que pudiera dar un paso real hacia el mortífago.

-¡Tú eres el cobarde!. -Escupió, frunció ligeramente el ceño y mostró una pizca de confusión por su propia valentía.

Cegados por su valentía sangrienta de Gryffindor; la mayoría de ellos.

Como era de esperar, la sonrisa de Carrow solo se hizo más amplia ante la acción del chico, casi como si anticipara que uno de ellos haría exactamente eso. Él asintió con la cabeza y se alejó unos pasos del escritorio en el que estaba apoyado.

-Neville Longbottom. -Su nombre salió de su lengua amenazadoramente lento, su varita en su mano se levantó para apuntar directamente hacia él.

Para mi sorpresa, Neville no se inmutó ante el movimiento. En cambio, se mantuvo firme, la confusión mostrada anteriormente en su rostro había desaparecido. Y por un momento, casi lo admiré por eso.

Eso fue hasta que una sola palabra de la boca de Amycus cambió toda la atmósfera de una mala a una mucho, mucho peor.

-Crucio. -siseó, aunque las palabras salieron de su lengua casi en broma. Estaba disfrutando esto. Cada segundo de dolor que causó fue completo y un placer absoluto para ese hombre.