Potter?|| Draco Malfoy |Traducción.

»4«

Eran alrededor de las 11 de la noche cuando finalmente firmé la carta con mis iniciales, la puse en un sobre color crema y la sellé.  Debe haber habido una mejor manera de sellar estos sobres que no sea lamiendo para cerrarlos, pensé tan pronto como el desagradable sabor del papel se extendió por mis papilas gustativas.  Sacudí la cabeza con disgusto.  

Una risita desde el otro lado de la habitación llamó mi atención y desvié mi mirada de la carta en mi mano hacia la dirección del ruido.  Gemí cuando vi el cabello rubio platino y una sonrisa de suficiencia.  

-Sabes. -Comenzó, sus ojos escaneando la sala común vacía. Fue bastante grandioso y bastante especial. Mi sala común en Durmstrang no era nada comparada con ella.  

Las lámparas redondas verdosas que colgaban del techo con cadenas combinaban con el color de las sillas.  Los sofás de cuero negro y verde oscuro esparcidos por la habitación complementaban perfectamente las paredes y el techo de piedra en bruto.  

Las grandes ventanas que dan a las profundidades del Lago Negro ahogan la larga habitación en un tono verde, debido a que la mazmorra se extiende parcialmente debajo del lago.  Fue realmente impresionante.  

Pero sin la chimenea, que le dio a la habitación un toque confortable, tiñendo los objetos cercanos de luz naranja, no creo que me hubiera gustado mucho.  Habría perdido ese toque de comodidad que lo hizo perfecto.  

Al final, la mirada de Malfoy se posó en mí de nuevo.  -Realmente no sabía que eran dos.-

-Entonces, ¿por qué no finges que todavía no lo sabes? Estoy segura de que nos estarías haciendo un favor a los dos. -Dije, sin siquiera mirarlo y en cambio admirando las llamas bailando dentro de la enorme chimenea.  Era al menos el doble de mi tamaño.  Resopló.  

-Le di a tu hermano un pequeño consejo cuando nos conocimos. Estoy dispuesto a mostrarte la misma cortesía a ti también. -Una sonrisa jugó en sus labios.  -Después de todo, no quieres hacerte amigo del tipo equivocado. -Dijo el rubio con orgullo, sugiriendo que era del tipo correcto.  

-Bueno, si eras tan encantador en ese entonces como lo eras cuando nos conocimos hoy, no puedo imaginar por qué decidió no aceptar esa oferta. -Sonreí inocentemente y la sonrisa en su rostro cayó en un instante.  

-Oh, sí, me disculparía por eso ... -Se calló, fingiendo estar perdido en sus pensamientos.  Arqueé una ceja.  -... pero todo era cierto. -Fingió un puchero antes de finalmente estallar en carcajadas.  

Antes de que tuviera la oportunidad de responder, Inkwood asomó la cabeza por la puerta de nuestro dormitorio compartido. -¿No es suficiente un Potter con el que estar obsesionado, Malfoy?. -La chica se rió y me hizo señas con la mano hacia ella. Feliz con el regreso de Inkwood, me reí y me levanté para llegar al dormitorio.  

-Tú. -Antes de que pudiera responder cerramos la puerta de nuestra habitación, ahogando el resto de lo que probablemente habría sido un desagradable insulto.  

-Te debo una. -Confesé, todavía sonriendo mientras nos arrojábamos sobre las camas pequeñas.  Ella solo se rió y me despidió.  -Cualquier oportunidad de molestar a Malfoy con mucho gusto lo tomaré. - No se hicieron preguntas. 

-¿Cuál es su problema de todos modos?.-Me pregunté en voz alta e Inkwood me dio una sonrisa a medias. Harry no dijo mucho cuando le hice una pregunta similar antes. 

Parecía bastante irritado después del encuentro.  Así que en ese entonces parecía la mejor opción simplemente dejarlo en lugar de regañarlo por eso. 

-Lo ha tenido por tu hermano desde que papá le dijo que se hiciera amigo de él y Harry se negó -Explicó brevemente. -Desde entonces han tenido enfrentamientos casi todos los días, en serio.  A veces nos recuerdan a una pareja de ancianos. -Se rió.

-Parecían realmente odiarse el uno al otro. - -Lo hacen.- 

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Después de un desayuno impresionante a la mañana siguiente, me estiré y me levanté de la gran mesa del comedor para llegar a mi clase de adivinación a las 9 am. Si así era el desayuno, no podía esperar a ver qué tenía que ofrecer la cena, ya que me perdí la primera de ayer. 

Sonreí con anticipación al salir del Gran  Hall. 

-La comida siempre tuvo un gran impacto en tu estado de ánimo. -Harry se rió mientras corría a mi lado, estudiando mi sonrisa de satisfacción. 

-Esperemos que la adivinación no arruine eso. -Suspiré al pensar en mi primera clase en Hogwarts.  -Todo lo que puedo esperar es que no sea en absoluto como lo estudiamos en Durmstrang el año pasado. ¡Merlín, fue tan aburrido!. -Me quejé justo cuando estábamos a punto de salir de la habitación.  

-¡Hey, Potter!. -La misma chica que no podía apartar los ojos de mí ayer por la noche ahora gritaba en la mitad de la mesa de Slytherin, ganándose nuestra atención.  -¡Potter! ¡Los dementores vienen! ¡Potter!. -Ella rió.  

La mayoría de los Slytherin rompieron a reír, incluido Malfoy.  Parecía especialmente encariñada con la atención que la rubia le dio por el comentario.  

-¿Dementores?. -Pregunté con curiosidad mientras empujaba a Harry los últimos pasos fuera del Gran Comedor.  Él suspiró.  -Sí, esas cosas en el tren ayer. -Dijo, perdido en sus pensamientos.  

¿Fueron ellos la razón de la extraña experiencia que tuve durante mi primer viaje en el Expreso de Hogwarts?  -No vi nada. -Mis ojos se fijaron en mi hermano junto a mí, me encogí de hombros.  

-¿No estabas escuchando durante el discurso de Dumbledore anoche?. -Levanté las cejas ante su comentario antes de que su mirada volara desde el suelo hacia mí.  -Oh, lo olvidé por completo. No estabas allí. -Murmuró y una risita escapó de mis labios.  Le di unas palmaditas en la espalda;  Su memoria nunca fue la mejor.  

-Bueno. -Comenzó. -Cuando Sirius Black escapó de Azkaban, enviaron a Dementores a buscarlo. Ahora, también los colocaron en todas las entradas aquí en Hogwarts. Como protección, si él decidiera aparecer aquí. Eso es lo que dijo Dumbledore de todos modos. 

Aunque hace mucho que no estoy, escuché sobre Sirius Black.  No todos los días un notorio mortífago sale de Azkaban.  Incluso el norte de Europa estaba hablando de eso antes de que me fuera. 

-¿Por qué vendría a Hogwarts?.- Le pregunté bastante confundida, pero Harry simplemente negó con la cabeza. -No tengo idea.-