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Ese collar no tenía nada de malo, el hecho de cargar con un anillo en una cadena al cuello 24/7 era posiblemente porque le gustaba, no traía muchas sospechas al chico de cabellos rosados hasta que pasando por unos pequeños puestos que semanalmente llenaban la calle con diferentes objetos había varios anillos y cadenas juntos.
-- Disculpe ¿Para qué se usan estos? - la duda lo carcomía por dentro, no hay forma de negarlo-
-- Veo que busca algo especial, estos anillos se introducen en la cadena y es para usarse en pareja ya sea en amistades o noviazgos, pero se usan más en estos últimos.
-- ¿Noviazgos?
-- Ambas partes usan el mismo anillo, sólo hay un par de cada diseño.
-- Ya veo...
-- ¿Gusta uno, jovencito?
-- N-no, gracias.
Después de una corta reverencia siguió su camino viendo a un punto nulo de la calle.
--- ¿Me engaña? ¿Cómo que en noviazgo? ¿Acaso yo soy el otro? ---
Su mente se llenaba de preguntas y sin darse cuenta hasta que estaba frente al departamento de su novia supo que había corrido.
Las manos le temblaban de pensar en lo peor, tocó el timbre y su chica le abrió la puerta sonriente.
-- ¡Yeonjun! ¿Qué te trae por aquí?
-- Quise pasar a visitar. -fingió una de sus mejores sonrisas-
-- No parece. -cerró la puerta una vez que el pelirosa estuvo adentro y se acercó a él en el sillón- ¿Sucede algo?
Su mano aún temblando tomó con delicadeza el anillo que colgaba justo en medio de su clavícula y jugaba con él entre sus dedos.
-- ¿Con quién compartes este anillo?
-- ¿Por qué preguntas eso?
--- Se ve tranquila --- pensó el más alto.
-- Pues... Vi unos en la calle y... Pensé en comprarnos unos pero recordé que ya usabas este.
En su mente el chico rogaba para que no fuera lo que pensaba pero la chica corrió a su habitación sin decir o demostrar nada.
Sintió su corazón partirse, ¿Era enserio?
No se iría sin reclamarle un par de cosas pero aún así empezó a llorar en ese sillón subiendo sus rodillas al asiento para abrazarlas y llorar en silencio hasta que ella decidiera bajar.
-- No quiero terminar esto ¿Cómo pudo hacerlo? ¿Lo va a negar?
5 minutos después, la castaña bajaba con un álbum de fotos en mano y vió a su novio llorando en el sillón.
