El Éfiro - Zelda Breath Of The Wild

TEMPORADA 2 / CAPÍTULO 31: NUEVAS AMISTADES

El repentino ataque producido en el refugio fue interrumpido por una joven que apareció por sorpresa. El feroz y extraño monstruo, por su parte, se convirtió en humano y su mecanismo de defensa lo desmayó para recuperar su brazo. Ambos tenían 18 años, uno más que ellos. Honelia era una chica rubia y de ojos azules. Su rubio era mucho más claro que el de Link y Adox. Tenía la sonrisa más radiante que habían visto en sus vidas. Utsubi, por su parte, tenía el pelo azul, , muy oscuro y muy despeinado, un poco largo, y unas ojeras increíbles. Además, tenía una pequeña cicatriz en el centro de la frente. Su rostro mostraba una expresión de desgana y poco entusiasmo, casi hasta melancólica.

Link no se anduvo con miramientos y se puso de nuevo en guardia.

-No te he preguntado tu nombre. Dime ahora mismo qué pretendes con todo esto.

-Honelia: Oye, tranquilo, soy tu aliada... Y Utsubi también, tienes que perdonarle. (Hum... Este chico... Me suena muchísimo... Esas ropas, ¿Dónde las he visto yo antes...?

-Link: ¿Aliados? ¡Ja ja ja! Tu amiguito casi nos mata a los tres. Mira, ¿Sabes qué? No tengo tiempo para esto, me sabe mal atacar a una mujer, pero lo haré si es necesario.

-Honelia: Tranquilízate, te demostraré que estoy de tu parte.

Honelia comenzó a caminar hasta el arbusto donde se encontraba Dark, que estaba desangrándose por la herida en el estómago.

-Link: ¡¿Qué te crees que estás haciendo?!

-Honelia: Él es tu compañero, ¿Verdad? Voy a sanar su herida...

-Link: ¿Acaso eres curandera? Si se te ocurre hacer algo raro, no dudes que le cortaré la cabeza a tu amiguito, que sigue desmayado a mis pies.

Honelia no respondió, comenzó a cerrar los ojos para concentrarse. Una luz comenzó a emanar de sus manos, y acercó estas a la herida de Dark. Tras unos segundos, paró.

-Honelia: Ya está. Ahora es solo cuestión de tiempo que se despierte.

Sonrió y se levantó.

-Link: Hum... Supongo que puedo confiar un poco en ti... pero más te vale curar también a Adox y contarnos qué pasa, porque no me estoy enterando de absolutamente nada.

-Honelia: Podrías ser un poco más agradable...

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Adox abrió lentamente los ojos. Estaba tumbado en la hierba, con un dolor sordo en la cabeza y una extraña sensación de déjà vu. Una figura brillante se encontraba en la lejanía. Cruzaron sus miradas, y la persona se acercó a él. La luz era tan brillante que no pudo ver su cara, pero esa persona le extendió la mano.

-Ya queda cada vez menos para que de comienzo. No tengas miedo cuando suceda...

-¿Quién... eres...? ¿Que de... comienzo...?

-No tengas dudas cuando llegue el momento... Ya verás como todo sale bien...

Adox extendió también su mano, y la persona tiró de él para levantarlo. Sentía una extraña paz, pero justo cuando iba a ponerse en pie...

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Abrió lentamente los ojos. Estaba tumbado en la hierba, le dolía un poco la cabeza. Por alguna razón tenía la sensación de haber vivido eso antes. Giró y vio que Dark estaba al lado suyo, pero él aún no estaba despierto. Al lado de Dark había otro chico. Entonces recordó el golpe que había recibido a causa del árbol. ¿Qué habría pasado desde entonces? ¡No le dolía nada en absoluto! Intentó levantarse, pero algo lo frenó. No era dolor o cansancio. Era una mano.