TEMPORADA 3 / CAPÍTULO 55: YOURO EL CAZARRECOMPENSAS - PARTE 2

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-Youro: ¡Ja ja ja! ¡Victoria! ¡La recompensa es nuestra!

Pero entonces miró al suelo, y no pudo creer lo que vio. Era un gran muro de hielo, que los había salvado a todos. Aunque este estalló en mil pedazos justo después del ataque, ya que fue un golpe demasiado poderoso, y esto causó pequeños cortes en la piel a todos. Adox, Honelia y Utsubi parecían muy sorprendidos y agradecidos con Link.

-Youro: ¡¿Qué significa esto?! ¡¿El poder del témpano?!

-Link: Tú mismo lo has dicho. Eres muy meticuloso, pero en un combate real te vuelves un torpe de cuidado. Observa, ha estado lloviendo, por lo que todo está lleno de charcos de agua. Si has hecho los deberes, sabrás que puedo solidificar hielo a partir del más mínimo punto de agua.

-Adox: Guau... El témpano. Ya era hora de verlo en acción, casi me había olvidado de que lo habías conseguido. ¡Gracias, hermano, muy inteligente!

-Link: (¿Quién mierdas es este tipo...? Nos tiene contra las cuerdas a los cuatro... Es casi tan fuerte como un miembro de Asigma...)

-Utsubi: Chicos... No quiero interrumpiros, pero...

Honelia y Utsubi miraban hacia la parte del bosque de la que había salido el gran rayo. Dos ojos rojos brillaban y los miraban fijamente desde las oscuras profundidades del bosque. Todos sintieron respeto al instante, y Adox tragó saliva.

-Adox: (¡¿E-Ese es el perro de antes...?!)

Link: ¡Vale! ¡Chicos, están haciendo lo que quieren con nosotros! ¡Nos estaban esperando y han planeado todo, dispersaos todos ya!

El bosque de la pared rocosa derecha comunicaba con el de la izquierda, sí... ¿pero por qué? Pues porque poco más adelante, el camino se abría a una pequeña planicie, rodeada de una gran pared rocosa que cerraba el camino, creando un valle circular en forma de anfiteatro, si bien este seguía montaña arriba en dirección al Monte Trueno por una cuesta en medio del bosque. Corrieron hacia aquella planicie , y Youro lanzó otra esfera lanza-humo, desapareciendo en el bosque. Llegaron al centro, y frenaron para mirar en todas las direcciones.

Entonces, desde una parte baja del bosque que comunicaba con el suelo, a la izquierda de la planicie, algo salió a la luz. Era Uky, pero... su aspecto había cambiado drásticamente. Ahora era un perro enorme, con un aspecto muy diferente, aterrador, y que tenía una intimidante mirada agresiva de ansias de matar. Se le caía la baba de la boca, y sus ojos eran rojos. Ya no tenía puesta su capa.

-Honelia: Ugh... (¡Q-Qué miedo...!)

Youro apareció desde otro saliente del precipicio, con los brazos cruzados y sonriendo.

-Link: Encargaos de ese monstruo, se me acaba de ocurrir una forma de subir hasta donde está el chico sin entrar en el bosque, que seguro que estará lleno de trampas.

-Youro: ¡Me llamo Youro! ¡Que poca memoria tenéis, en serio!

-Adox: Y el tonto de él le sigue el juego...

-Utsubi: No os distraigáis, que el "perro" se está acercando lentamente. Voy a transformarme.

-Honelia: Bien.

Utsubi se transformó en moblin y se colocó en posición de combate. Adox  preparó su arco, y Honelia su lanza. Uky, en cambio, abrió la boca y comenzó a cargar energía. Seguramente se trataba de otro rayo púrpura. Ahora que estaban cara a cara, se dieron cuenta de que Uky era tan grande como Utsubi transformado.

-Adox: Hay que impedir que cargue ese ataque otra vez, es demasiado poderoso.

-Honelia: Si lo llega a ejecutar, no tendremos nada con lo que cubrirnos...

-Utsubi: En ese caso, no perdamos más el tiempo. A por él.

Mientras tanto, Link tenía que enfrentarse a Youro él solo. Para subir hasta su posición, se le ocurrió algo: utilizar el témpano para crear unas escaleras de hielo desde un charco cercano. Comenzó a subir, pero Youro le atacó con agujas, aunque Link las esquivaba todas sin mayor problema. En cuestión de segundos, ya estaba a su lado.

-Youro: ¡Maldito seas!

Youro alargó la mano y sacó otra esfera desde otro de sus tantos bolsillos. Esta vez la esfera se estiró y, en un instante, se transformó en un bastón, que utilizó para frenar la embestida de Link con su lanza. Comenzaron a intercambiar golpes al borde del risco. Un trozo de roca se desprendió, provocando que Link casi se resalara, pero mantuvo el equilibrio clavando la lanza contra la pared, e impulsándose con ella. Entre golpe y golpe, se iba desplazando cada vez más hacia la derecha. En uno de los lances, Youro dio una increíble voltereta hacia atrás, se apoyó el la pared del risco, y se impulsó hacia Link, que esquivó el golpe, y continuaron luchando. Desde su entrenamiento con Sidon, sus reflejos, que ya de por sí eran muy altos, habían aumentado de forma asombrosa.

-Link: No te mueves mal, te esperaba más débil.

-Youro: ¡Cállate, eso ahora no importa! ¡Dime, ¿Cómo has podido utilizar el témpano si es de noche?! ¡Está claro que me había fijado en los charcos de agua, y conozco el poder del témpano, pero... ¿Cómo es posible que lo puedas utilizar?! ¡El témpano por la noche se queda inactivo, que es cuando tiene que recargar energía!

-Link: Vaya, sabes más de lo que pensaba, pero no importa. Y deja de decir tonterías, todavía no es de noche. Simplemente, este risco cubre completamente el sol y todo es más oscuro. Desde allí abajo se ven perfectamente todavía los últimos rayos de sol.

Golpearon su lanza y su bastón a la vez. Era un duelo de fuerza, hacían todo lo posible por llegar a golpear al otro.

-Youro: Grrrr... ¡Nunca me podrás ganar, insensato! ¡Solo quiero tu cabeza, en cuanto la consiga llamaré a Uky y nos iremos de aquí corriendo!

Sin embargo, la fuerza no resolvió el duelo, sino la resistencia. La poderosa lanza de Centaleón de Link tenía mucha más calidad que el bastón de Youro, que terminó partiéndose en dos, y su portador recibió el golpe.

-¡Ahh!

Aunque no fue muy grave, decidió cambiar de estrategia de todas formas. Lanzó otra bomba de humo y, de nuevo, tras escucharse un sonido metálico, apareció en lo alto de otro risco, por encima de Link.

-Link: ¡Deja de huir y lucha cara a cara, cobarde! ¡Aquí también hay charcos, pierdes el tiempo!

-Youro: ¡Eso ya lo verem-... ¿Eh?! ¡¿Qué es eso?!

Entonces señaló al cielo. Link trató de crear una nueva escalera de hielo, pero era incapaz.

-Youro: ¡He dicho, ¿Qué es eso?!

-Link: ¿Te crees que soy un idiota como pa-...? ¡No puede ser! ¡La luna! (¡Mi témpano...! Pero... eso debería alegrarlo, ¿entonces, por qué...?

Efectivamente, la luna comenzaba a asomarse desde el horizonte, por encima de la espesura del bosque. Era una preciosa luna llena. La cara de Youro había perdido toda su confianza. Ahora estaba asustado. Muy asustado.

-Link: ¡Vamos, contesta! ¡¿Qué pasa con la luna?!

Se puso de rodillas y se llevó las manos a la cabeza.

-Youro: ¡No, no, no! ¡¿Por qué siempre tengo la peor de las suertes!?

-Link: ¡Habla de una vez! ¡¿Qué es lo que sucede?!

- ¡¡Se trata... de Uky!!

- ¿Uky? ¿El perro?

Link no entendía del todo la situación, pero Youro miró hacia abajo, donde estaba peleando su compañero contra el resto del equipo. Lo que vio lo dejó aún más aterrado.

-Youro: ¡¡Eh, eh, eh, eh!! ¡¡Oye!! ¡¿Pero qué?!

-Link: ¡¿Y ahora qué es lo que pasa...?!

El Éfiro - Zelda Breath Of The WildDonde viven las historias. Descúbrelo ahora