Ya estando en Turquía se habían instalado en una cabaña a las orillas del mar.
-Es esta- indico Erick al ver la entrada de la cabaña, la cual a simple vista se veía pequeña, pero al abrir aquella puerta se podía ver que estaba perfectamente equipada.-Es hermosa- indicó Madi al verle desde la entrada y cuando estaba por entrar Erick la alzo -¡Hey! ¿Qué haces? - indico divertida Madi.
Erick la observo y sonrio -Soy un poco anticuado- le guiño y entro a la cabaña.
Madi alzó la ceja y se tiró una carcajada -¿Anticuado? Cariño por favor... ¿A qué hora dieras que también eres virgen? - se sostuvo de su cuello y lo observó atentamente.
-¿Quieres averiguarlo?- Alzo la ceja y sonrio de lado, camino hasta la habitación principal y la recostó en la cama.
-Uhh yo estaría encantada- sonrio Madi y lo atrajo a ella haciendo que sus labios se unieran en un beso muy apasionado.
Erick no dudó en seguirle aún con más intensidad el beso, sus hábiles manos no dudaron en llevar sus dedos a su delicada piel y acaricia sus muslos y senos, sentir como su pequeño cuerpo se estremecía ante sus roces era una total locura, solo hacía que sintiera más deceo de hacerla suya se una vez por todas.
Poco a poco las prendas de ambos se hacían menos y sentir como sus hábiles movimientos le sorprendían y le causaban un inmenso placer era increíble, escuchar sus gemidos roncos en su oído era único, saber que él era solo de ella le hacía sentir tan bien, saber que en ese momento solo importaba ambos era un pensamiento ambicioso.
Las estocadas contra sus caderas eran placenteras y se sentía tan libre al tocar cada centímetro de su musculoso cuerpo, verlo sonreír ante sus caricias y escuchar su respiración agitada era señal que lo estaba disfrutando tanto como ella.Sentirla tan cerca le causaba un sentimiento de calidez y escuchar sus jadeos bajo él le hacia sentirse el hombre más feliz y complacido del mundo, solo el hecho de poder besarle y admirar su cuerpo era un privilegio que solo el tenía.
Sentir como sus uñas se clavaban en su espalda no causaba ningún dolor, al contrario sólo lo evitaban más y le daban más fuerza para continuar.
Era increíble como ambos cuerpos podrían resistir tal volumen de placer y no desvanecerse en el acto... -¿Crees que pase la prueba siendo virgen?- alzo la ceja Erick mientras acomodaba un mechón del cabello de Madi.-Claro que la ha aprobado señor Robinson... Y con honores- le guiño y lo abrazo bajo aquellas sábanas que eran las únicas testigos de aquel encuentro tan furtivo y placentero.
-Eso me tranquiliza- sonrio y beso su frente -¡¿Que te parece si más tarde vamos a dar un paseo por la cuidad o también podríamos nadar o hacer buceo?!
Madi río leve -Tendremos tiempo para todo eso y más mi amor, tenemos una vida por delante... Por ahora quiero disfrutar un poco más con mi Esposito...- sonrio y lo abrazo, para luego esconder su rostro en su cuello.-¿Como me llamaste?- pregunto entusiasmado.
-¿Esposito?-
-Dilo otra vez - murmuró ruborizado.
Madi alzó la vista y sonrio tierna al ver a Erick de tal forma -¡Esposito!
-¡Una vez más!
-¡Es...Posito!- río divertida ante lo infantil que se veían, pues sin querer ambos habían terminado sonrojados.
El tiempo de Luna de miel se pasó volando y luego de tres semanas en Turquia y Hawai estaban de vuelta y Madi estaba ansiosa por ver a su lindo Mateo. En todo el viaje no hubo día que no hicieran video llamada y llevaban casi dos maletas más con juguetes para Mateo y recuerdos para amigos y familiares.
-¡Mami! ¡Papi!- grito Mateo al ver entrar a sus padres por aquellas dos puertas de la casa Robinson, corrió a ellos y no dudó en lanzarse a los brazos de su mami, nunca había pasado alejado tanto tiempo de ella y no pudo evitar llorar de felicidad por tenerla cerca.
Aún que se había divertido con los abuelos, extraba a su mami, aún que ahora que habian regresado sus padres, extrañaría ser tan mimado por Ataga y Dego.
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Amor sin Contrato
Teen Fictionsegunda parte de "Matrimonio por Contrato" Aquí descubriremos que sucedio con Madison, Erick y el pequeño Mateo. ¿volverán a estar juntos nuestros protagonistas o su orgullo ganará? Si no has leído Matrimonio por Contrato te recomiendo que vay...