Era de tarde y Madi se encontraba en la sala de los Black colocando su babero a Mateo para darle su papilla.
-Madi... ¿Enserio te irás mañana?- dijo la señora Black mientras se sentaba en el sofá.
-Asi es Gloria... Saben que los quiero mucho y agradezco su ayuda pero no quiero ser más una molestia...
-Madi te e dicho que nunca serás una molestia, tú puedes quedarte más días aquí si lo necesitas
-El departamento está listo, así que me iré mañana en la mañana, toda mi ropa ya está haya así que no puedo quedarme más- dijo Madi.
-Recuerda visitarnos - sonrio
-Claro lo que lo haré- sonrío Madi.
-¡Hame! ¡Hame! - hizo puchero Meteo
-Este bebé al parecer está muy hambriento- añadió Gloria mientras reía por la cara de enojado que tenía Mateo.
-Sera mejor que le dé su papilla a este comelon- río Madi mientras cargaba a Mateo y lo llevaba al comedor.
-Es una lindura - sonrio Gloria
-Me recuerda a Mike cuando era pequeño- agregó el señor Black
-Es hora que Mike nos de unos cuantos nietos... ¡Le presentaré algunas chicas!
-¡Mujer ya hablamos de eso, déjalo vivir su vida de soltero renegó una vez más Samuel ante la loca idea de Gloria por tener nietos.
Aunque el amaba los niños, tener nietos le daría la sensación de vejez y el quería la juventud eterna si era posible.
Al día siguiente Madi se despidió de los señores Black y les sin que se dieran cuenta les dejo un pequeño obsequio en la mesa de la cocina, se marchó y tomo un taxi.
La señora Black quien se había quedado en casa junto al señor Black solo se limitaban a seguir con sus rutinas diarias.
-Extrare los gritos de ese pequeño- indico El señor Black quien tomaba un pequeño pulpo de algodón que había olvidado Mateo entre los cogines del sillón.
-Yo también los extrañaré Samuel... - dijo ella mientras entraba a la cocina y veía un sobre rojo sobre la mesa -Cariño... ¿tú dejaste esto aquí?
-¿Que cosa mujer?- pregunto este confundido mientras encendia la televisión.
Gloria abrió el sobre y río al ver los billetes dentro de este -Esta niña... siempre dijimos que no le cobrariamos el hospedaje y aún así pago cada centavo...
El taxi llevó a su destino a Madi y Mateo quienes comenzarían una nueva vida, era temprano así que lo primero que haría era ir de compras, pero antes mostraría a su pequeño su nuevo y lindo hogar.
-¡Ya llegamos! - dijo al abrir la puerta y ver la sala muy limpia y hermosa, al final los detalles pequeños que agrego Renata habían quedado espectaculares.
Llevo a Mateo a su habitacion y este se emociono de inmediato al ver aquellos juguetes que sus tías se habían empeñado de regalarle.
Diana se había esforzado colocando toda clase de decoración deportiva por las paredes y cuna, mientras Renata se había empeñado en colocar la manta y almohadones combinados con el color de la pared la cual era celeste.
Madison sonrió al ver a Mateo tirarse sobre aquellos almohadas gigantes en forma de balón de fútbol y caer de pansazo en ellos.
- Bienvenido a nuestro nuevo hogar - murmuró.
Ambos salieron del departamento y fueron al súper mercado, pues en las alacenas de la cocina lo había nada de comida.
-Mmm que deberíamos comprar...- dijo Madi mientras empujaba el carrito y sobre el Mateo quien veía todos los colores y cosas que le rodeaban.
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Amor sin Contrato
Teen Fictionsegunda parte de "Matrimonio por Contrato" Aquí descubriremos que sucedio con Madison, Erick y el pequeño Mateo. ¿volverán a estar juntos nuestros protagonistas o su orgullo ganará? Si no has leído Matrimonio por Contrato te recomiendo que vay...