Amor sin Contrato

♡ Capitulo 31♡

Observo el enorme portón negro con la enorme R dorada en el centro, hacia mucho que no iba a ese lugar y no había pensado en ir en el resto de toda su vida pero por un maldito folleto todo eso se había arruinado.
¿Que cara pondría al ver a Agata? ¿Que diría al ver al señor Fernando? ¿Erick estaría sorprendido por su repentina aparición en su casa?
Toco el timbre esperando respuesta y al cabo de unos minutos este se abrió, Madi camino por el sendero un poco extenso, el cual no lo recordaba tan tétrico como lo era ahora, la sobra de los árboles no dejaba pasar la poca luz del sol que había pues este ya se estaba ocultando.

Al llegar frente a la casa dudó en tocar o darse la vuelta e irse.
No quería enfrentar a Agata, seguramente esta estaba muy molesta por el engaño de Madi, aún que claro ella nunca había querido eso.

-¿No estarás pensando en huir, no?- dijo Esmeralda quien la había estado observando desde el balcón delantero.
Madi alzó la vista y sonrio leve al verla.

Unos minutos más tarde Esmeralda bajo a la primera planta en invito a Madi a pasar, esta entro y observo que muchas cosas habían cambiado, la alfombra ya no era de aquel rojo con dorado, ahora era verde con plateado.. al igual que las cortinas.
Renata quien notó la sorpresa de Madison al ver todo el primer piso cambiado estéticamente añadio -Am... Mi padre es Sliteryn y por eso este año quiso trasformar la casa en el hogar de las serpientes... ¿Es raro no? - dijo mientras se dejaba caer en el sofá.

-De hecho yo soy Slyterin así que...- se encogió de hombros y Esmeralda río.

-Bueno y a que se debe la visita de tan tan prestigiosa mujer en la casa de unos mugles como nosotros - añadio burlonamente y poniéndose de pie para dar una leve inclinación hacia Madi.

-Tonta - río Madi y saco de su mochila el panfleto -El traje esto al sangre sucia de tu hermano.

-Mm Erick está es su habitación... Será mejor que se lo des en persona - sonrio

-Am... No creo que sea conveniente, dacelo tú, yo me voy antes que tu madre se de cuenta que vine y me eché a patadas

- Mamá no está... Ni papá... El seguramente apreciara que se lo des en sus propias manos -El guiño y camino a a cosina sonrientenente.

Madi suspiro y negó, subió las escaleras y justo al llegar frente a la habitación de Erick la observo unos minutos, tantos recuerdos iban y venían de su mente, tanto como la primera discusión, hasta el primer abrazo de aquel que era su todo tiempo atrás.

-Vamos tu puedes, entra rápido, deja el folleto en el escritorio y sal- de dijo mentamente.

Tomo la manecilla y justo cuando iba a abrirla alguien la abrió desde adentro haciendo jalada y chocar su nariz con algo duro.

-auch- se quejó Madi

-¿Madi que haces aquí?- dijo Erick confundió al ver a la rubia fente a el y además con la nariz chorreando de sangre.

Minutos más tarde Madi se encontraba sentada en la orilla de la cama mientras Erick limpiaba su nariz.

-Sabes... Deberías de ser más cuidadosa... Te podrías quebrar la nariz- la regaño

-Pff.. Fuiste tu el que me atacó...

-¿qué yo te ataque? Fuiste tú la que se metió a mi casa y a mi habitación... - dijo burlón

-¿Qué? No, no me metí a tu casa... Bueno si pero con permiso del guardia de seguridad... Además no es la primera vez que me golpeas la nariz, cuando te vi en la oficina del director tambien chotaste conmigo y... ¡Casi muero! Te demandere por intento de asesinato