♡Capítulo 12♡

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Muchas veces el destino juega totalmente en tu contra, como cuando vas a una entrevista de trabajo y accidentalmente derramas café en tu traje o cuando vas contra el tiempo y justamente en ese instantes es como si todos los taxis de la ciudad hubiesen desaparecido.

Justamente asi que sentía Madison, entre menos quería encontrarse con Erick Robinson, más se lo seguia mostrando el destino, y como si eso no fuera sufiente tal chico hasta terminaba salvandole la vida.

El escalofrío en su piel, causado por su mirada era una sensación poco olvidable y más cuando estos solo muestran preocupación por ella.

Madison se encontraba totalmente estable en su casa, aun que claramente no le preocupaba para nada que estuvo a punto de perder la vida hace menos de una hora, si no que aún podía sentir como se le caia la cara de vergüenza cuando Erick bajo su vista y se encontró con el paquete de toallas femeninas y dijo "toma se te cayó" mientras levantaba el paquete de toallitas frente a muchas personas que se habían acercado a ver si estaban bien.

En el mismo instante las mejillas de Madison se pusieron como tomate y lo unico que torpemente salieron de sus labios fue "te... te las regalo" y al instante se pudieron oir las carcajadas de Erick.

- ¡Ahh! ¡como pude decir tal estupidez!- se maldijo asi misma mientras se tapaba la cara con un cojín

- ¿Madison que pasa?- exclamó Diana quien estaba en la habitación de Madison jugando con Matteo

-Am... nada... sólo me maldecia a mi misma... Nada de lo fuera de lo común- añadio reincorporandose.

Diana alzo una ceja y luego nego, era evidente que su hermana había enloquecido.

-Mami esta descabechada, loquita y hace cucu- murmuro Diana mientras reía en sus adentros y tomaba los bracitos de Matteo.

Madison la vio mal y aún que si la vergüenza que había pasado no bastará, su móvil se había hecho pedazos.

La hora de la cena llego y sólo cenaban las chicas Miller ya que Diego y Amanda estaban en una cena con algunos embajadores.

- ¿Creen que por fin se solucionen sus problemas? - añadio Diana haciendo referencia a sus ausentes padres.

- Posiblemente... - respondió Renata mientras tomaba modestamente una taza de café.

- Ojalá y si - añadio Madison comiendo su postre.

-Madi, escuche que... Robinson esta en la ciudad- añadio Diana quien hasta la ficha ignoraba que Erick era compañero de clase de su hermana.

- Amm.. si - respondió Madison viendo su postre.

Renata observó a ambas y tomo otro sorbo de café, la colocó delicadamente en la porcelana y observó a Madie -Dicelo, al final y al cabo se enterara - añadio en tono demandante pero sutil.

Madison suspiro -Erick Robinson es mi compañero de clase- se detuvo un poco y siguió - Y si eso no fuera poco hasta me salvó la vida -

-¡Tu compañero de clase! - dijo sorprendida Diana

-¿cómo que te salvó la vida?- pregunto Renata frunciendo el seño.

-Si Diana mi compañero de Clase y mi compañero de mesa, pero no... No es como lo piensas, Él y yo somos desconocidos ¿okey?- añadio observando a su hermano quien aun se veía aturdida y sin poder creerlo -Hay Renata muy larga historia y con un muy estúpido final... Lo único que puedo decir es que me encuentro bien- Madison dejo el cubierto en la mesa y se levantó -Si me disculpan debo ir a dormir - sonrió leve y camino a su habitación.

Amor sin Contrato Donde viven las historias. Descúbrelo ahora