39. La amo

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"Amar duele. Es como entregarse a ser desollado y saber que en cualquier momento la otra persona podría irse llevándose tu piel." 

Susan Sontag


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—¿Qué tienes, Marcus? —La pregunta de Erick es expresada con suavidad y el silencio es la única respuesta.

En una amistad de tantos años, no son necesarias tantas pistas. Las molestias o problemas se manifiestan en pequeños gestos. En este caso, la expresión ausenté de Marcus no es la habitual. Sus párpados caídos indican que algo no funciona bien.

Marcus está sentado sobre la silla giratoria de su oficina, con la cabeza inclinada ligeramente hacia atrás. Parece más ausente y perdido de lo habitual.

—Marcus —insiste Erick al pararse a su lado —. No te quitaste tu informe del trabajo, eso no es normal en ti.

Erick se alarma aún más al observar el desorden de papeles sobre el escritorio. Marcus es una persona excesivamente ordenada y a diario le exige no quitar nada de su lugar.

Erick suspira profundamente y enuncia sin dirigirle la mirada:

—Si no quieres contarme, esta bien. Se que puedo llegar a ser bastante pesado en querer saber lo que te ocurre. Pero, me quedaré contigo.

Erick toma uno de los papeles esparcidos. Lee con atención que todos se tratan sobre hogares para huérfanos. El brujo recuerda a la bebé mestiza de la que tanto suele hablar Marcus. Pero decide no preguntar por ahora.

No dijo nada. Erick no dijo nada sobre los alucinógenos que halló en posesión de Mery y tampoco planea manifestar algo al respecto en las siguientes horas. Quiere asegurarse primero; hablar con Nahomi.

El brujo trata de concentrarse en el aquí y ahora. A Marcus le sucede algo pero él no va a presionarlo. Solo se quedará a su lado; a veces Marcus únicamente necesita una compañía silenciosa que le asegure no encontrarse en soledad cuando afronta momentos difíciles.

—Estoy confundido —dice Marcus finalmente.

Erick se alegra de no tener que esperar más. Y pregunta:

—¿Por qué estás confundido?

—Nahomi —expresa con cierta pesadumbre.

—¿Nahomi? —vacila Erick tratando de comprender —¿Qué pasa con Nahomi?

—Ella... me confunde.

—Bueno, Nahomi es complicada. Ya sabes, la naturaleza de los oráculos es una mierda imposible de entender. No creo que...

—Estoy preocupado por ella —revela Marcus con una visible inquietud —. Se que carga con demasiada debido a los que sucede últimamente. Yo no entiendo bien a la gente, mucho menos cuando se cierran. Nahomi es demasiado difícil de interpretar, demasiado. Y no puedo pensar con claridad cuando no dejo de preguntarme si esta bien o no.

Lux: Hospital para monstruos ✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora