¡No quiero ser su padre! [YoonKook/YoonMin..?] FINALIZADA

Capítulo 81

⚠️TEMA SENSIBLE, SE RECOMIENDA QUE SI EL LECTOR ES SENSIBLE, POR FAVOR NO LEA A PARTIR DE QUE APARECEN LOS SIGNOS DE ADVERTENCIA ⚠️

Yoongi: 28 años.
Jungkook: 13/14 años.

Empezó a oír sonidos a su lado, quizás a unos pocos metros de él, entonces abrió los ojos y estos mismos le ardieron y se sintieron pesados y agotados.

Luego de unos segundos, o tal vez minutos, logró mantener la mirada sin tener que cerrar los párpados cada 2 segundos.

Yoongi en ese momento se estaba abrochando los últimos botones de una camisa gris, su ceño estaba fruncido levemente, se notaba molesto.

Jungkook al instante se enderezó cuando captó que apenas era jueves, si su padre estaba levantado era porque ya deberían estar por salir de la casa.

Sintió un poco de dolor en la cabeza al hacer el movimiento brusco, pero no le importó. A punto estaba de quitarse las sábanas de encima cuando Yoongi lo miró y cambió su expresión molesta a una tranquila.

-tranquilo, vuelve a dormir otro rato- le dijo con calma como siempre. -aún es temprano, apenas sonó el despertador hace como 10 minutos.

Jungkook ante esto miró confundido a Yoongi.

-pero...es jueves- intentó decir para aclarar su punto, pero el mayor negó con la cabeza.

-no vas a ir a la escuela, no hasta que resolvamos los problemas, ¿sí?- le dijo el mayor, volviendo a fruncir un poco las cejas ante la frustración que sentía desde la noche pasada. -no te voy a exponer a esos hijos de puta de nuevo.

Entonces el chico lo recordó; la plática de anoche.

Sintió sus ojos aguarse de nuevo, ardiendo horrores por lo irritados que aún los tenía. Se pasó el dorso de las manos sobre ellos para tallarselos, pero Yoongi lo detuvo.

-no te talles los ojos, te dolerán más- pidió con mirada triste. -si te duele la cabeza te puedes tomar otra pastilla en una hora más, mientras tanto descansa otro rato.

Después de haber dicho esto anterior, el adulto revisó su celular y salió de la habitación. El menor mirándolo irse y volviendo a acurrucarse debajo de las cobijas, deseando desaparecer los malos sentimientos acumulados en su pecho.

Yoongi, por su parte, bajó a la planta baja, llendo directamente a la cocina y sacando ingredientes para preparar el desayuno.

Minutos antes, cuando sonó la alarma, le habló por teléfono a su jefe, explicándole que habían sucedido varias situaciones complicadas con su hijo y debía resolverlas lo antes posible. Le costó un poco de trabajo, pero el hombre le permitió tomarse medio día para solucionar los asuntos que requiriera.

Desde que despertó lo hizo con un sentimiento de rabia puro, como nunca antes lo había sentido.

Muchas veces en su vida experimentó ese sentimiento de enojo, molestia, frustración e impotencia, pero jamás como ese día lo sentía.

El recuerdo de la noche pasada, de Jungkook tan destruido, le destrozó hasta el alma. El daño físico y psicológico que le habían provocado al menor era enorme. Llegó a pesar que el chico despertaría más tranquilo luego de contar todo, pero verlo llorar apenas levantarse le volvió a retorcer el estómago por la furia.

Inhaló y exhaló para controlar su enojo, tenía que mantener la calma para poder ir a la escuela de Jungkook, no podía presentarse como un loco, aunque de hecho estaba en todo su derecho.

Su celular se volvió a iluminar y el adulto sonrió con tristeza al ver el recordatorio iluminando la pantalla, recordatorio que por cierto no necesitaba pues siempre desde hace 13 años lo recordaba.