One-Shots 2 (Teen Wolf)

78. Sterek (2/2)

Las noches en Grimhold eran raras, los aullidos, las peleas y las muertes eran normales en ese reino. Por eso mismo, para Derek salir de la posada y llegar a la frontera le suponía una aventura de vida o muerte, todo dependía del humor de esos bárbaros. Esa noche se encontró con una pelea entre dos ogros en la puerta de su posada, gruñó apartándose de ellos y caminando con la cabeza alta y sus ojos de lobo, así evitaba que alguien le dijera algo. Aunque eso en muchas veces no daba el resultado que esperaba y tenía que pelearse con alguien para llegar a tiempo a su cita diaria.

Había estado investigando cómo volver a Beacon Hills, pero no había encontrado absolutamente nada, los más sabios de los tres reinos le habían dicho que se centrará en crear una nueva vida ahí y se olvidara de su antigua vida. Y para ser sinceros, a él le gustaba su nueva vida, era cierto que tenía muchas posibilidades de morir cada día, pero tenía ese aire fresco que era Stiles para él. Como le había prometido, cada noche acudía a su encuentro, sin retrasarse ni un segundo. Y solo por él, merecía pasar un largo día evitando peleas.

 Al llegar al bosque quitó sus rasgos de lobo y corrió hasta la frontera con Timberfall dónde estaba seguro de que Stiles le esperaba. Al llegar suspiró molesto, notando que su hada aún no había llegado, así que se sentó en el suelo con la espalda apoyada en el único árbol que estaba plantado en medio de la frontera. Cerró los ojos y respiró hondo, intentando captar el aroma a Algodón de Azúcar, detectando trazas de este en el aire. No tardó mucho en sentir como un cuerpo se lanzó encima de él, ambos rieron mirándose a los ojos, Stiles tenía una mirada tan pura y sincera que al lobo en ocasiones le daba miedo estar manchándolo con esas visitas y ese amor que sentía por el hada.

- Hola Derek.- El lobo se acercó y besó los labios de este, dejando que se acomoda en su regazo, Daba igual que se vieran cada noche, nunca tenían suficiente del otro. Stiles gimió frotándose contra el lobo y gimiendo lleno de placer, el lobo se separó de la boca de este sin dejar de acariciar el cuerpo del hada.

- Hola Stiles.- Dijo este con la voz grave, viendo como el hada se mordía él labio y llevaba su mano al cuello de este.- ¿Cómo has estado?- Preguntó en un susurro, sintiendo la erección de este, Stiles bajó la mirada a los regazos de ambos dónde dos bultos se notaban perfectamente.

- ¿Bien, tú has descubierto algo nuevo?- Derek negó con una sonrisa ladeada antes de que Stiles maldijera en voz baja y tirara de los pantalones de este para bajarlos.

Derek se rio lleno de placer mientras veía como Stiles bajaba el suyo y recitaba un hechizo antes de penetrarse con suavidad, el lobo gruñó contra los labios del hada mirándolo a los ojos. El castaño sonrió jadeando y rodeando el cuello de este antes de besarlo y comenzar a moverse con suavidad. Stiles gimió separándose de la boca del lobo y tirando su cabeza hacia atrás mientras gemía. Derek comenzó a dejar besos en su cuello moviendo sus caderas para hacer las estocadas más profundas.

- Joder Derek, me vuelves loco.- Susurró el hada mientras aceleraban sus estocadas ganándose un gemido del lobo, que dejó salir sus rasgos sobrenaturales. Por otro lado, Stiles desplegó sus alas mientras en su iris un aro brillante se ciñó alrededor de la pupila dilatada.- Te juro que voy a buscar la forma de vivir juntos.- Susurró sintiendo la mano de Derek ir a su erección y masturbarlo al ritmo de las estocadas, consiguiendo que Stiles arqueara su cuerpo en busca de más contacto.

El lobo acarició las piernas de este, dejando de lado la erección de este junto a un quejido del hada para llevar sus manos al culo de Stiles ayudando para que el ritmo de las estacadas se hiciera más rápidas, Stiles gritó totalmente extasiado mientras llevo su mano a su erección para correrse en su mano y no manchar al lobo, Stiles cayó agotado encima de este. Derek lo tumbó en el suelo antes de ponerse encima y volver a entrar en él con delicadeza, a él tampoco le quedaba mucho. Stiles se quejó mientras entrelazaba los dedos con Derek y lo miraba a los ojos.

Derek viéndolo de esa forma podía jurar que era la cosa más preciosa que nunca había visto. Stiles estaba tumbado en el suelo, con las alas extendidas a su espalda, la ropa desordenada y la cara sonrojada, con una sonrisa tonta en la cara y algunas lágrimas de placer cayendo por sus mejillas. Derek gruñó dando una estocada más profunda y corriéndose apretando el agarre de sus manos. Salió de Stiles con cuidado y se sentó en el árbol, tirando de este para que quedara recostado en su pecho.

- Podríamos construir una casa aquí en la frontera.- Dijo Stiles subiendo su cara para ver a Derek, este sonrió con suavidad besándolo.

- ¿Crees que nos dejaran?- El hada hizo una mueca antes de moverse y quejarse.- Con cuidado.- Susurró Derek ayudándolo a sentarse.

- Creo que sí, si tú pides el permiso a tu rey y yo a al mío, no deberían negárnoslo.- Dijo el hada acariciando el pecho de este con cariño.

- ¿No causaré problemas con tu familia?- Stiles lo miró antes de hacer una mueca apartando la mirada para que el lobo no viera las lágrimas.

- Mi familia ya lo sabe y no quieren oír hablar de ti.- Susurró mientras Derek le acariciaba la espalda dándole ánimos.

Una rama crujiendo cerca y en la parte de Grimhold los hizo que ambos se pusieran en alerta, Stiles arregló su ropa y se sentó dentro de su territorio, así no podrían hacerle nada sin enfrentarse a la decapitación que dictaban sus reglamentos.

Un orco se detuvo delante de ellos, mirando confundido al hada que había perdido el color al ver ese monstruo. Este sonrió acercándose a la frontera, pero encontrándose con el lobo, que se interpuso entre el hada y la horrible criatura. Este miró al lobo antes de mover su nariz, captando algún aroma, captando uno en particular que lo hizo reír soltando un ruido como el que hacían los cerdos.

- Huele bien.- Dijo con una voz tan grave que parecía de ultratumba.- Yo también lo quiero hacer.- Dijo dando un paso hacia el hada, Derek lo empujó para que se alejara de Stiles mirándolo con seriedad.

- Está en su territorio, si le haces algo debo matarte.- Dijo como aviso Derek, el orco lo miró enfadado antes de irse dejando a la pareja sola.- Vete ya. Ten cuidado ¿Vale?- Dijo girando para mirarle a la cara, Stiles asintió aún un poco asustado de esa bestia.

- ¿Nos vemos mañana?- Preguntó Stiles acercándose al lobo y acariciando la mejilla de este con cariño.

- Y cada noche.- Prometió el lobo con una sonrisa besando los labios del hada. Stiles se rio antes de respirar hondo y salir volando hacia su casa.

Derek se giró para volver a Grimhold, dispuesto a conseguir una conversación con el rey para pedirle permiso de construcción. No pensaba dejar a Stiles lejos de él por mucho tiempo más, Beacon se podía ir a la mierda si ese castaño se quedaba con él.