128. Stheo

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Miró de nuevo su teléfono antes de entrar al edificio que tenía enfrente. Ser el nuevo siempre era algo que le molestaba, sobre todo para alguien como él. Pero Stiles tenía claro que esa situación era inevitable, y por descontado que no sería la última vez. Solo estaba en la universidad, aún le quedaban muchas situaciones en la vida en las que sería el nuevo. Así que se había propuesto tomarse esas ocasiones como práctica para cuando entrara en el mundo laboral.

Subió a la tercera planta, notando cómo a cada escalón su bolsa pesaba más. Y cuando se detuvo delante de la puerta, podía jurar que su hombro se descolocaría en cualquier momento. Llamó a la puerta y esperó a que alguien le abriera, deseando que su compañero estuviera y no tener que buscar dónde estaba la secretaria.

La puerta se abrió y Stiles le sonrió al chico con un singular atractivo. Mirarlo era cautivador por su piel bronceada y sus ojos, de un profundo tono gris azulado, que brillaban con una intensidad que hipnotizaba. Tenía su cabello castaño claro, rebelde por naturaleza, despeinado con un toque de gel que acentuaba su aire desenfadado. Y todo eso adornado por una barba incipiente de varios días que, lejos de desmejorarlo, le confería un irresistible aire varonil. Su presencia magnética y su aura de misterio lo convertían en alguien difícil de ignorar.

- ¿Qué quieres?- preguntó rompiendo todo el aura que se había creado en su cabeza. Todo lo atractivo desaparecía ante el tono de prepotencia que este tenía.

- Soy tu compañero de habitación.- le respondió con una sonrisa. El chico resopló haciéndose a un lado dejándole entrar. Stiles dejó su bolsa en la cama y miró por la ventana, dándose cuenta de que tenía el campo de lacrosse justo enfrente.

- ¿Qué tipo de deporte haces? Siendo tan escuálido te debes romper en cualquiera.- comentó dejándose caer en la cama. Stiles lo miró por encima de su hombro molesto y se sentó en la cama.

- Pues soy un becado de lacrosse, así que creo que eso significa que soy lo bastante bueno, ¿no crees?- dijo con agresividad, pero sin borrar su sonrisa. El otro se sentó mirándolo con el ceño fruncido, repasándolo de arriba a abajo antes de reírse.

- Derek te va a partir el culo.- comentó el capitán divertido, tumbándose de nuevo en la cama y cerrando los ojos, El otro frunció el ceño antes de negar con suavidad.

Se acercó a la mesa y rescató el mapa del campus, lo leyó y se aseguró de que la mochila estuviera guardada en el armario antes de ir a secretaría a por las cosas que le faltaban. Esperaba que la actitud de su compañero cambiara con los días, porque no soportaría estar en la misma habitación que el capullo que había conocido. La mujer de la secretaría le sonrió antes de buscar su carpeta y dársela.

- Aquí están tus papeles y la llave de tu habitación. Compartes habitación con Theo Reaken, es el capitán del equipo de lacrosse, así que él se encarga de guiarte la primera semana.-  Stiles se apoyó en el mostrador mirándola incrédulo, no podía ser que su integración en la vida universitaria dependiera del capullo de su habitación.

- ¿Y no habría otro voluntario?-  preguntó con una sonrisa inocente. La mujer se rio girando para seguir con lo que estaba haciendo.

- Theo no fue voluntario, el entrenador Finstock le obligó si quería mantener su puesto de capitán.- comentó divertida mirándolo. 

Hizo un gesto con su mano para que se fuera, y este negó con suavidad antes de irse a la habitación, revisando los papeles. Dándose cuenta de que en el llavero había una llave que encajaba perfectamente con la del ascensor.

- Oh, dios, gracias.-  susurró yendo directamente al ascensor y subiendo a la tercera planta del edificio.

Mientras se acercaba a la habitación escuchó voces ahogadas, así que intuyó que debería enfrentarse a más capullos del equipo. Cuando entró se encontró a otro chico sentado en la silla del escritorio de Theo. Había un chico más joven que ellos, de baja estatura, pero de constitución atlética, suponiendo que por el lacrosse. 

A pesar de su juventud, lucía una musculatura definida que hablaba de horas de dedicación y esfuerzo. Su cabello, de un rubio miel que contrastaba con su piel blanca bronceada, caía sobre su frente en mechones rebeldes, enmarcando unos ojos azules que brillaban con una chispa pícara. Su estilo parecía desenfadado y cómodo, aunque en ese momento no podía asegurarlo, su sudadera con capucha, jeans desgastados y zapatillas deportivas le decían que era su uniforme habitual. A pesar de su apariencia sencilla, emanaba una energía contagiosa. Su sonrisa era amplia y sincera, y su risa resonante llenaba cualquier espacio con alegría. No pudo evitar quedarse mirando hipnotizado por la sonrisa llena de dientes.

- Otra vez aquí.- Se quejó Theo desde la cama. Stiles lo miró mal antes de acercarse a dejar sus cosas en su escritorio.

- Es mi habitación, no te voy a pedir permiso para estar aquí, Theo.- Recalcó el nombre de este, consiguiendo que lo mirara divertido.

Stiles se dio la vuelta y abrió el armario para deshacer la bolsa. Se dio cuenta de que alguien había removido su bolsa, por lo tanto Theo era un entrometido de cuidado. La deshizo sin decir nada más, aunque notó que la conversación había acabado.

- Soy Liam, también estoy en el equipo.- Dijo el rubio tendiéndole la mano. Stiles lo miró antes de desviarla a Theo y después a Liam, preguntándose cómo dos polos tan opuestos podían ser amigos.

- Stiles, encantado de conocer a alguien majo por aquí.- Le correspondió el saludo antes de volver a guardar su ropa.- ¿No quieres darme tu tour de bienvenida?- Preguntó apoyándose en el armario. Liam se rio negando con suavidad y bajando sus pies de la mesa para ponerse de pie.

-¿Por qué? Eres majo, no como...- Se quedó callado señalando al chico que se había mantenido en silencio observándolos.

- Solo tienes que conocerle.- Le aseguró Liam dándole un suave golpecito en el hombro. - ¡Y Theo no le acoses!- Gritó cerrando la puerta. La risa de este se escuchó a la par que los muelles del colchón.

- Me duele que no me quieras conocer, después de todo soy tu capitán.- Murmuró deteniéndose delante de él. Stiles lo miró a los ojos, intentando entenderle.

- ¿Qué debería saber de ti? Eso me hará cambiar de opinión.- Preguntó sin dejarse amedrentar. 

Theo sonrió agarrando la barbilla de este para mantenerlo cerca. Stiles tragó saliva bajando su mirada a los labios del capitán, pero intentando que no se demostrara lo que estaba pasando por su cabeza.

- Quizás tú quieras decirme algo.- Susurró este al notar la mirada nerviosa del castaño en sus labios. Esperaba que dijera algo, pero eso no ocurrió, sino que se tiró hacia atrás para poner distancia.

- Que sea gay no significa que me vaya a meter en tu cama, estamos en el siglo XXI, creí que lo teníamos asumido.- Dijo Stiles quitándose la sudadera y tumbándose en la cama.

Theo se rio pasando la mano por su pelo antes de que el teléfono que había en el escritorio comenzara a sonar. Se apoyó en el escritorio respondiendo a la llamada sin quitarle un ojo al chico. Stiles lo miró mal, mientras cruzaba las piernas y desviaba la mirada hacia fuera. Cuando el silencio se volvió a instalar, el castaño esperaba que varios insultos salieran de la boca de este.

- Para tu suerte has entrado en el equipo más gay de la universidad, solo nos supera el de danza. - Dijo Theo mordiéndose el labio, y ganándose la atención de Stiles. - Todo nuestro equipo forma parte del colectivo, bis, gay y no binarios, tenemos de todo.- Dijo acercándose a este y sonriendo de lado.- Así que deja de asumir cosas y no me toques los cojones.- Comentó inclinándose sobre este, sorprendiéndose al ver la sonrisa ladeada de Stiles.

- Una pena, siempre me han dicho que los tocáis de maravilla.- Theo se rio agarrándolo de nuevo de la barbilla para besarlo. Stiles se sorprendió pero no dudó en seguirlo.- ¿Es mi bienvenida oficial?- Preguntó Stiles separándose un poco, pudiendo apreciar el color azul de los ojos de Theo mucho más cerca y brillantes.

- Sí, pero no esperes que todos te den la bienvenida así.- Murmuró Theo separándose y caminando hacia la puerta.- En una hora te quiero abajo, empezamos los entrenamientos y no voy a ir a buscarte a la cama.- Stiles se rio apoyando su cabeza encima de sus manos, cruzando las piernas.

- Mhm, una lástima, te esperaría impaciente.- Dijo viendo como Theo se detenía en la puerta y lo miraba por encima de su hombro con la mirada oscura.

Pensaba ser la piedra en el camino de Theo, había llamado su atención, solo esperaba no tener que sufrir en los entrenamientos. Pero tenía el presentimiento de que ese equipo iba a aceptarlo como una familia.


One-Shots 2 (Teen Wolf)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora