One-Shots 2 (Teen Wolf)

124. Stetopher

El portazo hizo que Peter se levantara del sillón con rapidez, Melissa lo imitó pero un poco más calmada. Era probable que no vinieran buenas noticias y sería ella quien tuviera que recoger los trocitos de los dos hombres. Christopher se detuvo en la puerta y miró a los otros dos, pero negó entrando en el comedor hacia el mueble bar.

- ¿Qué? ¿Qué has averiguado?- Preguntó ansioso Peter mirando como su pareja no decía nada.

- No he averiguado nada nuevo, al menos nada que pueda ser cierto.- Dijo deteniéndose, notó la mirada confundida de Melissa sobre él, pero sobre todo notaba la de Peter en su nuca.

- ¿Eso que quiere decir?- Preguntó el lobo acercándose y tocando su hombro para que se girara. Chris desvió su mirada y respiró hondo, no sabía cómo explicarle lo que había pasado en esa expedición.

- Hemos visto...- Se quedó callado mirando la pared antes de chascar la lengua.- Algo, que se parecía a él.- Dijo consiguiendo que Peter frunciera el ceño, se acercó más a él pidiendo más información.- No era él, no podía ser él.- Murmuró negando y mirándolo a los ojos.- He visto una réplica exacta, pero sé que no era él porque sus ojos brillaban en azul, eran ojos de lobo. Así que no es él.- Sentenció dándose la vuelta y abriendo el mueble bar, llenando un vaso con un poco de whisky.

- ¿Un lobo?- Preguntó confundido Peter, Christopher asintió dando un trago al vaso. El lobo negó mientras volvía a sentarse en la silla.

Melissa los miró suspirando, y fue a la cocina a preparar un té para todos. El ambiente se podía calentar en cero segundos. Chris rellenó su vaso ignorando la queja del lobo, pero aun así se lo bebió de un trago. Peter se acercó y le quitó el vaso cerrando con llave el armario.

- ¿Y por qué no la has traído?- Preguntó el lobo apoyándose en el armario mientras guardaba la llave en su bolsillo. Chris se acercó y apoyó su mano en el hombro de este aprovechando para acariciar el cuello de este.

- No era él, Peter, no podemos aferrarnos a cualquier cosa que se parezca a él.- Dijo el cazador apoyando su mano en el pecho de este. Se acercó y dejó un beso en los labios del lobo notando como se relajaba. Peter desvió la mirada negando, odiaba cuando este usaba ese método para distraerle.

- Él no nos abandonaría así, lo tienen retenido, estoy seguro.- Gruñó separándose, Melissa entró mirando ambos, le dio una taza a cada uno antes de ir a por la suya y sentarse en el sofá.

- Me ha llamado Scott.- Dijo está ganándose la atención de ambos hombres.- Primero el té.- Dijo señalándolos, ambos se sentaron y bebieron en silencio. Melissa sonrió bebiendo el suyo con calma.- Tienen a Stiles.- Dijo sabiendo cómo iban a reaccionar los hombres que estaban sentados ahí.

- ¿¡Dónde están!?- Preguntó Peter perdiendo el control, haciendo que sus ojos cambiaran por un segundo.

- El té.- Volvió a pedir la mujer. Peter gruñó, intentó lanzar la taza contra la pared, pero simplemente se sentó y bebió.

- Lo tienen en la mansión, bajo vigilancia.- Comentó suspirando al ver como ambos se iban sin decirle nada más. La mujer escuchó el portazo mientras se levantaba dejando la taza en el fregadero y se fue asegurándose de que la puerta se quedara bien cerrada.

Ambos entraron consiguiendo que Derek se adelantara al grupo para detenerles antes de que entraran en el salón. Las circunstancias en las que había encontrado a Stiles haría que esos dos se volvieran locos. Derek tuvo que usar un poco de su fuerza con su tío, pero aun así consiguió que estos dos no se acercaran al chico antes de hablar con ellos.

- Debéis entender una cosa antes de que os deje pasar.- Dijo Derek aflojando un poco el agarre que tenía sobre él.- No sabemos lo que ha pasado, no sabemos que ha vivido en estos meses, pero no es el mismo Stiles el que se fue de aquí...

- Él no se fue.- Gruñó Peter, Derek hizo una mueca apartándose y dejando que estos entraran al salón.

El primero en hacerlo fue Peter, que se quedó helado en la puerta. Casi todos los muebles estaban destrozados, había marcas de garras por todo el salón. Un gruñido grave se escuchó desde una de las esquinas, desviar su atención hacia allí y tragó saliva al ver a este agachado y mirándolos con ojos azules brillantes y las facciones de lobo. Peter tragó saliva acercándose un paso, pero al ver como Stiles retrocedía y le gruñía se detuvo. Miró al cazador sin saber qué hacer, este negó frotando la nuca. Así que intentó acercarse de nuevo, esta vez agachado y mostrándole las manos.

- Stiles, soy Peter.- Susurró acercándose más e ignorando los gruñidos de aviso de Stiles.- Ahí está Christopher ¿Te acuerdas de nosotros?- Preguntó deteniendo cuando este desvió la mirada hacia el cazador. Notó como los músculos empezaban a relajarse, pero aún estaba en una posición de ataque.- Te hemos estado buscando, estábamos muy preocupados.- Murmuró dando un paso más cerca de este. Alargó su mano y acarició el brazo, viendo como inclinaba su cabeza suavemente, notó como este movía su cabeza y comenzaba acercarse por voluntad propia.

Peter sonrió de forma temblorosa, y ni siquiera se quejó cuando este se lanzó contra sus brazos haciéndole caer, simplemente abrazó a Stiles con fuerza, sintiendo ganas de llorar. No tardó en sentir la mano de Chris apoyada en su espalda. Así que se separó tragando el nudo que se le había formado ahora.

- ¿Stiles?- Preguntó Christopher, ligeramente asustado, la actitud tan animal que había visto en él le había preocupado mucho. Los ojos de este se clavaron en él, respiró aliviado de no ver los del lobo, sino volver a ver el color whisky.- ¿Te acuerdas de nosotros?- Preguntó acariciando la cara de este con cariño.

El chico se escondió en el cuello de Peter, inhalando el aroma de este, acurrucados mejor. Christopher acarició la nuca de Peter sintiendo la mirada preocupada del hombre encima de él. La puerta se abrió y Derek entró viendo la imagen que había ahí, Stiles al notar la presencia del Alpha se volvió alterado intentando separarse de Peter.

- Shh, tranquilo.- Susurró Peter consiguiendo que los intentos de este se detuvieran.- Derek lárgate, por favor.- Pidió Peter sin mirarle, la puerta se volvió a cerrar y Peter se separó para mirarle a la cara.- Stiles necesito que me digas algo.- Pidió Peter acariciando su mejilla, notando como este se apoyaba en su mano.

- Os recuerdo.- Susurró con voz grave, mirando a los ojos de Christopher.- A los dos, a los tres.- Susurró con una sonrisa tensa, Chris suspiró aliviado, acercándose y besando los labios de este. Stiles gruñó clavando las garras en el costado de Peter sin querer. Este gruñó hizo que ambos se separaran.- Lo siento, lo siento.- Susurró Stiles viendo con miedo la sangre que había en su mano.- Yo no quería, yo...

- Tranquilo, un poco de sangre no me asusta.- Murmuró Peter besándole, Stiles tembló, dejándose abrazar por el lobo mientras sentía calmarse y como su animal se relajaba.- Creo que estaremos mejor en casa.- Murmuró levantándose, ayudando a Stiles hacerlo.

Christopher asintió y los escoltó hasta el coche para volver a casa. Poco a poco debían conseguir que Stiles recordará todo de nuevo. Que perdiera el miedo y que aprendiera a ser un lobo de cero. Entre los dos hombres había la duda de dónde había salido el color azul de los ojos de Stiles, pero esa conversación podría esperar. Cuando llegaron a casa, vieron como Stiles acariciaba la pared con suavidad, como si intentara recordar todo lo importante de ahí.

- Todo sigue igual, así que deberías darte una ducha y relajarse completamente.- Dijo Christopher apoyando su mano en la espalda de Peter. El lobo asintió viendo como Stiles subía a la segunda planta.- Está en casa.- Susurró el cazador mirando a Peter, este sonrió acercándose y besando los labios de este.

Peter acarició la nariz de este suspirando, durante ese tiempo había sufrido mucho, sin la tercera parte de esa relación, la de Peter y Chris había sufrido mucho. El lobo dejó un beso en los labios de Christopher antes de ir a la cocina para preparar la cena. El cazador también fue a la cocina y abrió una cerveza mientras se apoyaba en la isla contemplando como su pareja hacia la cena para todos. El chico no tardó en llegar, al entrar se detuvo un segundo y los miró ambos antes de caminar hacia Chris y abrazarse a él. Este se lo devolvió mientras sonreía. No se había perdido el detalle de que llevaba un pantalón de pijama suyo y una camiseta de Peter. Dejó un beso en el cuello, mientras acariciaba la espalda, notando como el chico inhalaba su aroma. Ahora les tocaba un trabajo lento, pero lucharán por ver a Stiles mejor.