Final

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"Por que quedan, noches para repetir".

-TIMØ

[_____]

Parte 2

Maldita bocanazas

Dice creyendo lo había pensado, pero creo que fue lo suficiente alto para él y para mi.

-Quiero ayudarte, ____. He venido a eso.
-Pues si has venido a ayudarme, te agradecería y nos ahorraría tiempo que me digas dónde está la idiota de tu hermana, así puedo arrancarle la cabeza. - dije sin ninguna gracia.
-

Uf, eso suena... Sí, tiene una gran cabeza.- río divertido.
-No me estorbes, Alex- dije molesta y aguantando las ganas de llorar.
Empuje su cuerpo para dramatizar el momento, en realidad había suficiente espacio para pasar, pero ¿qué más daba?

-Lo siento, ____. En parte esto es mi culpa.

Menuda mierda inoportuna.

-Cállate, Alex. No necesito eso ahora.
-____, escuchame, yo debí ponerle un alto a Isha, y no lo hice, te tomo rencor cuando ni siquiera fue culpa tuya, me siento mal y quiero arreglarlo.
-¿Qué vas a arreglar? Todo está terminado, no voy a tener mañana una boda que me costó días y noches de sobre esfuerzo humano.
-Si la tendrás.
-¿Y me dirías como carajos sería posible? Tu hermana jodio todo.
-Lo sé, de verdad lo siento... La buena noticia es qué...- se rasco el cuello y miro a todos lados- ¿recuerdas la casa de campo de mi tío Javier?

Y entendí porque había adoptado la corporalidad de un adolescente de quince que le había confesado a su novia ser virgen.

Lo malo es que yo sentía lo mismo que la chica de la misma edad hormonal con tremenda confesión.

-Sí, la recuerdo.

La casita de campo de su tío Javier, había sido sin duda mi primera opción protagonica de un sueño digno de boda. Le había confesado en un día normal que sin duda me casaría ahí mismo, el jardín era tan grande y hermoso, todo era como un espectáculo Hollywoodense, con semejante imagen mental, le había descrito hasta el último baile de la jodida fiesta.

-Yo, le conté a mi tío Javier lo que había ocasionado Isha, le he planteado la idea de la boda, y comenzó a organizarlo todo, sólo necesito hacer una llamada y completaremos lo necesario para tu boda mañana.

¿Una llamada?

-No sé que decir.

Y era verdad, tenía unas ganas inauditas de comerme un litro de helado y llorar.

-Solo di, 'Sí, Alex, quiero que mi boda en esa preciosa casa de campo, gracias por salvar el día como el héroe que eres'

Payaso sin gracia.

-Alex, aceptó que limpies el desastre de la castaña con la que compartes ADN.
-Bueno, no eran las palabras mágicas, pero, lo haré.

Saco el móvil de la bolsa derecha de su pantalón color caqui, le quedaban horribles, no lo iba a negar, y parecía qie tenía la llamada en espera.

-¡Hann! Ha dicho que sí.

¿Hann? Dios, es la mejor chica que he conocido en mi vida, la mejor amiga de todas.

-Perfecto, yo me encargo del resto, te veo en un rato.
-¿Qué hay que hacer?
-Tú nada.
-¿De qué hablas? Hay mucho que hacer.
-Lo estoy resolviendo, ¡vamos, ve y duerme! Lo único que te faltaría para una charla a tus nietos futuros, es que te quedaste dormida durante la ceremonia de tu improvisada boda. ¡Nos encargamos de todo!- dijo confiado.

Desastrosa Coincidencia. (Aidan Gallagher)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora