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"Y, por un momento, el universo dejo de latir.
Sus voces desgarraron al mundo entero con su magia"

-Flammae.

[Aidan]

Acostado sobre su pecho, escuchando su corazón, no deseo nada más.
Sus manos juegan con mi cabello, mientras escucho el bombeo de su corazón, su pecho sube y baja, al mismo tiempo que registró cada segundo en mi cabeza, espere por mucho tiempo sentirme de ella como ella de mi.

-¿Entonces estás segura?
-Sí, es decir, me gustaban las clases de Biología, y son cosas que no olvidas, ya sea porque causó interes, risa o asombro. Estamos en días seguros, es casi imposible que quede embarazada, pero, cuando llegue a la ciudad programó una cita con el ginecólogo, comenzaré a tomar anticonceptivos.

Despegó con mucho trabajo mi cabeza de su pecho sólo para verla, tiene un brillo muy peculiar en los ojos, y sonríe.

-¿Qué me ves?
-¿Vas a empezar a tomar anticonceptivos?
-Pues, sí, voy a cuidarme.
-Eso quiere decir que...- pero lo pienso antes de abrir la boca y decir cualquier tontería.
-Quiere decir que voy a cuidarme.

Sonrió estúpidamente, para mi quiere decir que esto no va a terminar, por el contrario, ya empezó.

-Estoy muy a gusto ahora mismo, pero tengo que ir al baño.

Me empuja con cariño, mientras una risita inocente aparece al mismo tiempo que se tapa los ojos.

-Pues, ve.
-¡guau! Que pudorosa saliste.
-¡Déjame en paz!- réplica con un ritmo extraordinario en su lengua, se escucha precioso, justo ahora.

Con malicia enredo la sábana en mi reloj, y me paro jalando la tela fina y blanca.

-¡Hey!- protesta.
-Lo siento, un accidente.

Le doy una sonrisa inocente y fugaz, mientras veo como el color rojo le tiñe los pómulos.

-Ve al baño, por favor.
-Lo que órdenes.

Me voy al baño, después de recoger mi boxer, me peino un poco frente al espejo, hago mis necesidades, me pongo los calzoncillos, lavo mis manos y escucho mi teléfono sonar antes de terminar de girar el pomo de la puerta.
Corro en busca del aparato tecnológico, pero en un tanto de desorden, no sé dónde se encuentra.
Rebusco mientras veo como atenta estudia mis movimientos.

-¡Bingo!- añado al mismo tiempo que tengo el teléfono al aire en señal de victoria.
-Contesta.- ordena.

Obedezco, deslizó el dedo por la pantalla.

#llamada

-¿Sí?
-Aidan, necesito que vengas ahora.
-¿Qué pasa?
-La policía fue a buscar a Adoni, dijo que había escapado, él ahora sabe que lo he denunciado.
-Ok, tranquilizate, voy ahora mismo.

Dejo el móvil en la orilla de la cama, mientras busco mi ropa para irme.

-¿Te vas?- dice ____ con una voz temerosa, es de las pocas veces que la escucho de ella.
-Lo siento, tengo que irme.

Desastrosa Coincidencia. (Aidan Gallagher)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora