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"La curiosidad, esa noche, no mató al gato; pero sí le rompió el corazón. "

-Fausto E. Ruber.

[ _____ ]

Mis manos se aferran al móvil de Aidan, lo ha olvidado, en la habitación.
El abrigo me cubre el aire veraniego de las calles de los Ángeles, me gusta la calma de esta zona residencial.
Camino buscando algo para cenar, muero de hambre y no quería comer en el hotel.
Mañana regreso a México, y lo menos que puedo hacer, es ver un poco de este lugar al que viaje.

En esta calle sólo hay residencias, estoy segura que es la avenida donde está el departamento de Aidan. Camino un poco mas...

Un auto rojo, está parado en el principio de un parque muy bonito, hay un chico de espaldas entre la puerta del auto y su exterior.

-Hola, Buenas noches- digo amablemente, al mismo tiempo que él gira para verme de frente, sus labios se elevan enseguida, su sonrisa toca sus ojos.
-Definitivamente tú no eres de aquí.

Sonrió.

-No, no soy de aquí. Sólo soy una visita inesperada.
-Tienes razón, yo no te esperaba, pero me da gusto encontrarte.
-Soy _____, _____ Ferrer...
-Y yo soy Noah Schnapp. Encantado.
-Muchas gracias, igual. Disculpa que te moleste...
-¿Molestarme? ¡Oh, no! No digas eso.
Mis mejillas suben de temperatura. Y una sonrisa boba sale de mi. -¿Sabes de un lugar para comer? En realidad no conozco mucho, iba a la 2223
-Es unos metros más adelante, hay un lugar maravilloso para comer, quizá yo...

Pero el alto chico pelinegro se queda en total silencio, a nosotros camina un robusto chico moreno, con una cara de enfado... ¡Aterrador!

-¡No está! ¡Se fue!
-Calma Adoni, tenemos un ángel caído hoy.

Su vista se fija en mi por primera vez, pero su gesto no cambia nada. Sólo mueve la cabeza y se dirige a Noah.

-¡Necesito encontrarla!
-Ella es _____- dice el chico alto, ahora está a mi lado, con una mano en mis hombros, con una confianza increíble. - ____ él es Adoni.

Es muy linda su intención de distender, pero ya no sé si ha sido una buena idea.

-Hola ____.

Dice con indiferencia.

-Hola Adoni.

Entonces pasa de mi, como si me hubiera hecho humo de su cigarrillo y me hubiera mezclado con el viento.

-Lo tenía todo planeado, y es casi imposible que viviendo en el cuarto piso, nadie haya visto si llevaba maletas o no.
-¿En el cuarto piso? Ammh... Yo...

Mis ojos alcanzan a ver la farola de la entrada del edificio, vago en mi cabeza unos segundos, y luego veo a los dos hombres que me miran. ¡Maldición ____!

Noah  ha girado un par de grados el cuello y mi mira con mucho interés. Su amigo, me ve con tanta incertidumbre que las manos me empiezan a sudar dentro del abrigo, suelto el móvil de Aidan y sacó las manos con la intención de disimular.

-¿____?- la voz de Noah es muy manipulable, me hace querer explicarle algo que ni siquiera yo sabía que tenía que decir.
-Yo conozco a alguien del cuarto piso, bueno, está mañana estuvo en el apartamento 14

Desastrosa Coincidencia. (Aidan Gallagher)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora