Desastrosa Coincidencia. (Aidan Gallagher)

↪9↩

"No hay errores, sólo accidentes felices"

[ _____ ]

Siento mi pelo hecho una maraña en mi cara y puedo aspirar un aroma entre frutos rojos, alcohol y tabaco.

¡Oh maldición!

Me muevo y es cuando soy consciente que el irradiante calor de alguien está sobre mi cadera, trató de respirar y calmarme.

¡Dios me agarre con los pecados más livianos en el peso de mi conciencia!

Cierro lo ojos con fuerza, mucha fuerza, deseo que sea un sueño...
Mi cabeza me reclama el exceso de alcohol y creo que me vendría bien una ducha y beber una pipa completa de agua, con hielo, creo que con hielo estaría bien.

Aprieto los muslos y noto que ahí ya no está mi pantalón favorito con el que vestía anoche ¿como llegue a casa? Vuevo a sentir la familiaridad de un roce humano, y mi corazón va tun Tun... tun tun...

Me quitó la maraña de la cara con una agitada respiración y noto los ojos abiertos de Aidan Gallagher.
Esto no es verdad, no lo es.

Esta callado, muy callado y yo también, miro un poco abajo y noto su torso desnudo, una oleada de pánico me recorre y yo sólo llevo mi playera pero se que sólo es la playera.

Se sienta titubeante y se frota la cara con desesperación, una sonrisa nerviosa a media luna se asoma en sus labios y yo imitó su gesto para sentarme en la cama y cubrirme con las sábanas.

-Ho... Hola ¿sabes en dónde estamos?

Miro a mi alrededor, ni siquiera se donde estamos, pensé que esa respuesta la iba a tener él.

-No- digo con el alma en la palma de mi mano. - Aidan nosotros... Es que no, no, no, no pudo haber pasado esto, esto es un...- noto su cara estupefacta y supongo que no la debo liar más. Ninguno sabe lo que ha pasado, ¡oh el beso!
Pero por supuesto que recuerdo el beso, yo se lo pedí y decir que es un error es una tontería.

-Sí, esto fue un error.

Y aunque yo era la que iba a decir esas palabras, me duelen como una espina que rasga en lo más profundo de mi.

-No, no existen los errores.
-o quizá sí, no debí haber bebido hasta perder la conciencia, debí portarme como un caballero y llevarte a casa.
-No, Aidan. Puede que no recuerde nada.
-Y es mejor así- dice tajante.

Tengo la leve impresión que el desea saber que entre nosotros no paso nada, y creo que quiero llorar.

-Escucha ___, no quiero arruinar nada, las cosas contigo siempre son como una montaña rusa, de arriba a abajo sin consideración, pero yo estoy agradecido de que la vida me trajera de vuelta a ti.

No digo nada, y no es porque no quiera hacerlo, quizá sólo he olvidado como hablar o he olvidado todo lo que planeaba y yo no quería enamorarme tan rápido y arrepentirme aún más.

Se para de la cama con rapidez y se pone el pantalón, aún no sabemos donde estamos y me aterra que se vaya y de alguna manera me deje sola.

Mi boca tiembla, yo tiemblo e irradia pánico.

-Tranquila, voy a salir a averiguar donde estamos.
-¿No te vas a ir?

Me mira atentamente examinando mis facciones, hasta que su mirada fugazmente se pasa a uno de mis muslos haciendo que mis mejillas comiencen a arder.

-No, no me iría, no voy a abamdonarte, supongo que quieres darte una ducha, hazlo y yo averiguo donde estamos y luego salimos a comer algo.
-Ok- bajo la mirada y respiro pausadamente tratando que la revolución dentro de mi tome tregua.
-¿Todo bien?- me mira con insistencia, con interés y preocupación.
-La idea de que te vayas y no regreses me hace una auténtica y cruel agonía.

Su cuerpo de deja caer desaliniada en la cama, es una versión antigua de él, la reconozco, suspira y levanta con su mano mi barbilla.

-Realmente espero que entiendas que quiero tomar tu mano, ahora me es difícil decir algo pero si te hace sentir mejor, aquí nunca paso nada ¿Bien?

Nunca paso nada, pero claro que paso, paso mucho que mi cabeza me cobra por beber una estipida botella cara.
No me gusta como suena eso, creo que no me gusta saber que "nunca paso nada"
Me gustaría que Aidan me dijera que si paso, y sólo quizá platicar de ello en alguna noche con un buen sofá y un programa al que ignoramos en la televisión.

-Bien, pero lo que pasó aquí; no lo dejaré ir.

Esa sonrisa tan suya, tan siniestra, tan desastrosa para mis sentidos llega, es linda, limpia, plena y natural, su mano viaja por la maraña que seguramente me hace ver como una maldita loca, enreda sus dedos entre feos nudos y juega un poco con ellos, como si lo disfrutará.

-No es buena idea ____, creo que no estamos listos.

Y depositando un beso en mi mejilla susurra un -"Lo siento"
Para desfilar por el cuarto desconocido y desaparecer por la puerta.

Me siento idiota.

Recojo mi ropa del suelo, aquí no hay mucho que pensar o discutir para saber que una noche de copas de más terminó en alguna guerra en la cama de un lugar que no conocemos.

La otra opción es pensar que llegamos con mucha vongianza a despojarnos de la ropa y luego nos hechamos a dormir. Ajá...

Entro a la puerta de lo que apuesto es el baño, y con el agua que escupe la regadera limpio mis pensamientos, la verdad es que me gustaría recordar algo, cualquier cosa, más que el beso del bar.

De una u otra manera yo sabía que iba a llegar el día de que esta coincidencia terminará en desastre, era cuestión de tiempo.

Salgo del baño con la ropa del día anterior, y ahí está Aidan, frente a un gran ventanal contemplando el cielo con las manos en los bolsillos y un café en el Buró más cercano, en las letras de el vaso del otro mueble leo ___ con una caligrafía rebelde, y me río al ver que esta marcado con una tache el cuadro que dice.
Con leche...

Vaya que todo lo hace bien, todo bien Aidan Gallagher.

--**--

Chanfle, creo que ya empezó lo bueno, lo loco... ✨💫
Gracias por leer las amo con todo mi corazón.

-SHS